ecos de valor 3

In this podcast episode, the main topic is the legal framework and laws for protection against violence. The importance of knowing the laws and our rights is emphasized. The General Law for Women's Access to a Violence-Free Life is discussed, along with its principles for access to a violence-free life. Various institutions that offer help and support for victims of violence are also mentioned, such as the National Institute for Women, the National Commission for the Prevention and Eradication of Violence against Women, and the National Network of Shelters. The story of Angela, a survivor of gender-based violence, is shared to highlight the importance of raising awareness about these issues. The episode concludes with a reminder that there is support available and that people should not hesitate to seek help. Bienvenidos nuevamente a nuestro podcast. En este capítulo abarcaremos temas importantes como el marco legal y leyes de protección contra la violencia. En las ediciones anteriores estuvimos hablando qué es la violencia, tipos y casos, pero también queremos mantenerte informado de qué puedes hacer o a quién puedes acudir en caso de sufrir violencia. Creo que es muy importante estar actualizado de lo que pasa con las leyes y conocer tus derechos. Por ejemplo, para quienes no saben, el marco legal es un conjunto de leyes y reglamentos que indican los límites y las bases sobre lo que una persona o institución pueda actuar. Su importancia se abadica en que establezca la sociedad y su estructura estableciendo los principios para garantizar la transparencia y el derecho humano. Una de las leyes más importantes que les vamos a platicar el día de hoy es la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vía Libre de Violencia. Esto tiene por objetivo establecer la coordinación entre la federación, las entidades federativas, el Distrito Federal y municipios para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, así como a los principios para garantizar su acceso a una vida libre de violencia. Dicha ley menciona los principios para el acceso a una vida libre de violencia que deben ser observados. Estos son los siguientes. 1. Igualdad Jurídica entre Mujeres y Hombres 2. El Respeto a la Dignidad Humana de las Mujeres 3. La No-Discriminación 4. La Libertad de las Mujeres También te queremos presentar algunas instituciones a las que puedes acudir y te ofrecen ayuda. El Instituto Nacional de las Mujeres y Mujeres, cuyo teléfono es 911-55-53-22-6030. Lo repito nuevamente para si alguien no lo escuchó bien. 55-53-22-6030. Este programa te permite recibir un apoyo económico del gobierno federal para algún proyecto en busca de igualdad. También te apoya con los trámites de divorcio voluntario, contencioso, guardia y custodia, pensión y padre apotestado. Porque no es un secreto que lo que la mayoría de las parejas ocupan para mantener amenazada a la pareja son los hijos. Amenazar con que van a quitar a los hijos o que no los vas a volver a ver. Hay instituciones que te pueden ayudar con eso. Seguimos con la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, Conavim, cuyos teléfonos son 52-09-89-02 y 52-09-89-07. Lo repito, 55-52-09-89-02 y 55-52-09-89-07. Este es un órgano desconcentrado de la Secretaría de Gobernación que se encarga de diseñar la política para una cultura de respeto. Y por último tenemos la Red Nacional de Refugios, cuyo teléfono es 55-56-74-96-95. También puedes marcar al 55-52-43-64-32 y al 800-822-44-60. Lo repito, 55-56-74-96-95, 55-52-43-64-32 y 800-822-44-60. Esta es una organización feminista integrada por más de 75 espacios de prevención, atención y protección para situaciones de violencia. Ahora, cuando hablamos de situaciones de violencia, esto no solo se va, ofrecen ayuda a mujeres violentadas, también van a niños, niñas y adultos. A continuación voy a dar a conocer la historia de Ángela. Ángela sobrevivió a la violencia de género junto a sus dos hijos. En su caso, la violencia comenzó con insultos. Conoció a su pareja desde hace 20 años y era una muy buena persona. Eso es lo que ella pensaba. Empezó a cambiar en 2015 por la muerte de su madre y compró varias armas, entre ella su machete y una escopeta. Se volvió más agresiva, no solo conmigo, sino con otras personas y a través de las redes sociales. Para él, ella decía que es como si ella no hiciera nada bien. Ella cuenta que una noche, a principios de noviembre, la violencia se volvió física. Estábamos conversando y en un momento dado, el tono subió y le pedí que se fuera. Me acerqué a la puerta, le abrí y le dije que conversaríamos otro día. Me agarró por la capucha de la sudadera, me sacó por la puerta, se me echó encima y empezó a asfixiarme. Logré gritar y llamar a mi hijo mayor y entonces me soltó y se fue. Nos habíamos separado, pero las cosas empezaban a arreglarse de nuevo. Cuando una mañana tuvimos una discusión, yo estaba en la bañera, y él entró y disparó contra mí. Sólo recuerdo los dos últimos disparos. Levanté la mirada hacia él y él me dijo, Mira lo que me has obligado a hacer, Angie. Me has obligado a disparar contra ti. Regresó con mi teléfono móvil y le dije que llamara al número de emergencia. Pensé que me estaba muriendo. Sentía pinchillos en las piernas. No me había dado cuenta de que había recibido un disparo en la espalda y ya no podía moverme. Recuerdo que me fui a la ambulancia y le dije a la paramédica que no me dejara morir, que tenía cuatro hijos que mantener. Pasé tres semanas en el hospital. En ese tiempo me visitaron unas 400 personas y ahí me di cuenta de que quería transmitir un mensaje. Desde entonces, doy muchas charlas públicas, no sólo sobre violencia con armas de fuego y violencia de género en el entorno familiar, sino sobre el control de armas y salud mental. Si la gente está dispuesta a escucharme, quiere hablar de todas estas cosas importantes. No podemos limitarnos a orientar a las personas hacia la dirección adecuada. Debemos caminar con ellas. Esto dijo Ángela, una sobreviviente de violencia de género. Bueno, muchas gracias por escucharnos. Hasta aquí terminaría nuestro capítulo tres de nuestro podcast llamado Echos de Valor. Espero les haya gustado y les sirva realmente toda esta información que damos a compartir. Y saben que no están solas, que hay muchos lugares en los que pueden ser apoyadas. ¡Gracias!