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Predicación del domingo 21 de enero 2024 Horizonte Tequisquiapan Predicador: Hugo Ventura
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Predicación del domingo 21 de enero 2024 Horizonte Tequisquiapan Predicador: Hugo Ventura
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Predicación del domingo 21 de enero 2024 Horizonte Tequisquiapan Predicador: Hugo Ventura
This is a transcription of a sermon in a church. The speaker encourages people to attend the church and invites women to a free event. They then read a passage from the book of Acts and pray. The sermon focuses on the importance of faith, grace, and peace. The speaker explains that even though the final verses of the letter may seem insignificant, they hold valuable lessons. They discuss the importance of prayer and the example of a man named Tychicus who served faithfully. The sermon concludes with a reminder of God's grace and peace. Somos una iglesia que confía, camina y comunica a Cristo. Acompáñanos domingo a domingo. Te esperamos. Cuatro vertículos de esta carta. Entonces voy a pedirte que te pongas de pie, por favor. Vamos a entrar de lleno a la predicación, que es lo que venimos a escuchar. A Dios, a su palabra. Y vamos a leer Hechos capítulo seis, versículo veintiuno al veinticuatro. Nada más hay complementarte lo de mujeres que empieza el próximo sábado. Es completamente gratis y son bienvenidas cualquier mujer. No importa si incluso no viene a la iglesia. De hecho, es una muy buena oportunidad también para invitar a mujeres que quieres que conozcan a nuestro gran Rey y Salvador. Así que te esperamos el próximo sábado a las diez de la mañana. Va a aparecer ahí en pantalla, acuérdate, el versículo veintiuno al veinticuatro. Yo leo el veintiuno, tú el veintidós, por favor. Y así alternamos hasta leer juntos el veinticuatro. Dice, pero a fin de que también ustedes sepan mi situación y lo que hago, todo se lo hará saber tíquico, amado hermano y fiel ministro en el Señor. Pase a los hermanos y amor con fe de parte de Dios el Padre y del Señor Jesucristo. La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor incorruptible. Señor, te damos gracias porque tú eres fiel, uno cambia, Señor, y como cantábamos ahorita, tú has sido bueno, Señor. En nuestras vidas tú has sido bueno, tú has sido fiel, y eso lo sabemos. Y el hecho de que estemos aquí, Señor, cada uno en un contexto diferente, en una etapa diferente, en un momento diferente, Señor, pero al final del día tú eres el único Dios que está por encima de todo, Señor, y el cual ha apartado este tiempo para nosotros porque tú eres bueno, porque anhelamos escucharte, porque tú sabes que te necesitamos, Padre, y qué más grande muestra de amor que podamos estar delante de tu palabra, Señor, la cual yo te ruego uses para gloria tuya, Señor, que tu Espíritu Santo obre y Padre nuestro entendimiento sea no solamente transformado, Señor, sino se ha llevado también a una aplicación en nuestra vida diaria, en nuestra relación contigo, Señor, que al final del día esto es lo que trata, Señor, de una relación contigo. Así que, Padre, glorifica a Cristo, gracias por el tiempo que nos ha regalado en Efesios, Señor, gracias porque hoy culminamos, ayúdanos a entender, Señor, y a glorificarte en este tiempo. En tu nombre oramos, Jesús. Amén. ¿Podemos tomar nuestro asiento, hermanos? El título del sermón es Fidelidad, Gracia y Paz para Terminar. Fidelidad, Gracia y Paz para Terminar. Llegamos a estos últimos versículos donde pareciera no haber mucho. Es como, bueno, ya es una despedida final. En aquellos tiempos las cartas comenzaban con un remitente, después venían los destinatarios, el cuerpo de la carta, y al final se acostumbraba a algunas palabras de bendición. Ahora lo leemos rápido y es como, pues, ¿qué podríamos aprender de todo eso? Bueno, hay algo glorioso que la palabra dice de sí misma. En 2 Timoteo 3, 16, recuerdas que dice que toda la Escritura es inspirada por Dios y es útil para enseñar, revergudir, corregir, para instruir en justicia. Dice que toda la palabra, aun aquellas genealogías, recuerdas cuando empiezas a leer, si has leído los evangelios como Mateo, que empieza describiendo toda la genealogía de Jesús, y dices esto como, pues, ¿de qué podría servir? Hay mucho que podemos también aprender. Igualmente en números, por ejemplo, aparecen un montón de nombres, y en algún momento es mi anhelo que podamos también estudiar esos pasajes de la Biblia. Pero lo que te quiero decir es que, aunque pareciera no haber mucho aquí, hay mucho, hermano. De hecho, platicaba con Juan Carlos y estuve a punto también de volver a dividir estos últimos cuatro versículos en dos sermones, y es que la verdad es que es una porción sumamente rica. A lo largo de estos meses hemos visto toda la identidad que tenemos en Cristo, la salvación, que es únicamente por su gracia, por su misericordia, nos dio vida cuando estábamos muertos de nuestros delitos y pecados. Vimos en el cuerpo de la carta también cómo esa identidad debía haberse reflejada en nuestra actividad, en nuestro diario vivir, en cada área de nuestra vida, y terminamos viendo la parte de la lucha que todo el creyente enfrenta, esta batalla espiritual, pero cómo Dios también, en su amor y en su gracia, nos había dejado los elementos para pelear esta buena batalla de la fe en la armadura y en la oración. Ahora, hoy vamos a terminar con estas palabras finales, y vamos a ver básicamente dos elementos, lo puse ahí en el mapa. Primero vamos a ver unas palabras de recomendación que da Pablo para estos creyentes en Éfeso y que también son muy útiles para nosotros el día de hoy. Y el segundo elemento son la bendición final que Pablo da a los especios y que es un importante recordatorio, porque así como vamos a ver al final, es como un sándwich esta carta. Comienza hablando de la gracia y la identidad que tenemos en Cristo, y Pablo va a terminar poniendo la tapa del otro extremo del sándwich y decir ahí, recuerden que todo esto se trata de la gracia, de la paz que han recibido en Cristo. Entonces, vamos a ver primero las palabras de recomendación que da Pablo. Hace ocho días, recuerdas que veíamos como Pablo estaba instruyendo a los creyentes de Éfeso a que oraran, y después termina pidiendo oración también por él. Mira, para retomar, dice en versículo 18 de capítulo 6, dice, con toda oración y súplica, oren en todo tiempo en el espíritu y así velen con toda perseverancia y súplica por todos los santos. Oren también por mí, dice Pablo. Oren también por mí. Ahora hay un detalle interesante aquí, y es que podríamos preguntarnos, bueno, ¿y qué es lo que Pablo pediría que oraran por él específicamente? ¿Cómo es que Pablo está dirigiendo esta petición de oración por él? Oren por mí, oren por todos los creyentes, pero de una manera particular, oren por mí, dice ahí Pablo. Ahora este es un buen principio que quiero también poner como entre paréntesis. Pablo, este hombre que podríamos decir, wow, es un hombre de Dios, tenía la humildad de exponer sus necesidades, de exponer sus condiciones a sus hermanos creyentes. Algo que sucede también muchas veces es que queremos que las personas nos lean la mente. Digo, si no te ha pasado qué padre. A mí me ha pasado en un montón de ocasiones como, ay, ¿por qué nadie en la iglesia me pregunta cómo estoy? ¿Por qué nadie? Y es como, mira, también él toma la iniciativa de, en este caso, enviar una carta para él decir, miren, esta es mi situación, esto es lo que estoy haciendo, y nos muestra un principio también de humildad. Por eso es importante hacer iglesia, venir a las reuniones de oración, el tiempo de los grupos, al final del servicio, pues también tener la humildad de acercarte, presentarte, ir conociendo hermanos, y que entonces podamos pelear esta buena batalla, que al final del día lo que vemos en Pablo, él está mandando esta carta para que los demás hermanos conozcan su situación y entonces puedan pelear juntos. Pero mira lo que dice Pablo, versículo 21. Pero a fin de que también ustedes, de que también ustedes sepan mi situación y lo que hago, todo se lo hará saber Tíquico, amado hermano y fiel ministro en el Señor. Es un gran nombre. Si estás esperando o planeas o algún día tienes un hijo y dices, mira, qué nombre, quiero ponerle un nombre bíblico. Bueno, pues Tíquico es una, a lo mejor dices, nunca le había escuchado, ¿no? Pero vas a ver algunos elementos por los cuales es un personaje de verdad que nos muestra cómo Dios honra a los que le honran, a los que fielmente le sirven, a pesar de que no sea en algún escenario que tenga tanto brillo. ¿Qué podemos aprender de Tíquico? ¿Qué dice la palabra de Dios de Tíquico? Bueno, es muy probable, varios historiadores coinciden en esto, es muy probable que Tíquico haya sido el que escribió la carta a los efecios, no el que Dios lo utilizó para exponer todo este contenido, sino que físicamente fue el que le escribió. Recuerda que históricamente Pablo se cree que tenía problemas en la visión y entonces él probablemente dictaba sus cartas a Tíquico. Tíquico, en este caso, iba a servir como un mensajero de parte de Pablo para ir a los hermanos de Efecio, recuerda que Pablo está en prisión, y también iba a servir como alguien que iba a informar a los hermanos de Efecio acerca de la situación de Pablo ahí en la prisión. Ahora, Tíquico aparece cinco veces en la palabra de Dios, y es importante saber eso, aparece de forma breve, pero lo que se menciona de Tíquico nos da lo necesario para conocer el perfil que tenía este hombre, y mi anhelo es que también pueda ser un ejemplo para nosotros. Mira lo que dice la palabra de Dios de Tíquico. Tíquico se menciona por primera vez en Hechos capítulo 20, versículo 4. Mira lo que dice, están en un punto donde Pablo va a emprender un viaje a Jerusalén para llevar la ofrenda a unos hermanos judíos que estaban pasando por algunas situaciones económicas, y dice que este viaje lo acompañaban Zópater de Berea, hijo de Pirro, Aristarco y segundo de los tesalonicenses, Gallo de Derbe y Timoteo. Tíquico, ahí aparece otra vez Tíquico, y Trófimo de Asia. Lo vemos acompañando a Pablo, es parte de estos hermanos, dice que era oriundo de Asia menor. ¿Qué podemos destacar en este versículo? Bueno, aquí nos está hablando de que Tíquico iba a emprender un viaje en el cual estaba dispuesto a dejar atrás su vida. Él entendió que tenía un llamado de seguir a Cristo, de servir a Cristo, en este caso estando en el viaje con Pablo, y él no estimó más valioso sus amigos, probablemente su trabajo, probablemente su iglesia, a lo mejor ahí en Asia menor. A él no le importó dejar atrás toda su comodidad, todo lo que era costumbre, tradición o familiar para él, y emprendió esta aventura. Entonces habla de un hombre que tenía un corazón que estimaba en servir a Cristo por encima de sus propios anhelos, por encima de sus propios deseos. Ahora, no olviden que en aquel día viajar no era como en estos días. A mí me encanta porque ya ahorita viajas y los camiones, por lo menos los camiones te dan elementos ya hasta de ver películas, ¿no? Y ves, hay un montón de películas, tienes cosas para leer, en los aviones igual, sé que hay distintas clases, pero al final del día viajar cada vez en estas agencias de viajes te lo intentan hacer de una manera más cómoda. Hay algunos que... Yo he escuchado decir, por lo menos cuando hay mucho tráfico en las ciudades, y por lo menos a mí, te soy honesto, cuando no tengo prisa de llegar a algún lugar y tengo la posibilidad, a mí me encanta andar en camión. Es como, ¡ay, qué padre! Ahí puedo cerrar los ojos un rato, puedo leer un rato, puedo despejarme. Y cuando eres joven quieres aprender a manejar, es como, ¡híjole! Lo menos que pueda... Y si puedo ir descansando, bueno, intento no verle así. Pero en aquellos días los viajes eran pesados, recuerda que tenían que caminar grandes distancias, atravesar desiertos, y hay un elemento importante que nos da en este pasaje, que Tíjico sabía, por causa de Pablo, que adonde él iba a ir, iba a haber dificultades. Imagínate que te digan, oye, vamos a un viaje, pero te advierto que va a haber persecución, te advierto que nos van a encarcelar. Y Pablo sabía eso, lo dice en el mismo capítulo de Hechos, en el vertículo 23, dice Pablo, narrando la instrucción que le había dado el Espíritu Santo de hacer este viaje, dice, salvo que el Espíritu Santo, solemnemente, me da testimonio en cada ciudad, diciendo que me esperan cadenas y aflicciones. Sin embargo, Tíjico dice, no importa, yo jalo, yo voy. Mira lo que dice también, otro pasaje donde vemos a Tíjico y nos da muestra de su carácter, en el capítulo 4, versículo 7, dice, en cuanto a todos mis asuntos, les informará Tíjico, nuestro amado hermano, fiel ministro y consiervo en el Señor, porque precisamente para esto lo he enviado a ustedes, para que sepan de nuestras circunstancias y que conforten sus corazones. ¿Qué sucede aquí? Bueno, vemos a Tíjico, va en este viaje con Pablo a Jerusalén, sigue con él hasta que es encarcelado por primera vez en Roma, y es entonces cuando escribe Efesios y Colosenses. Entonces, de alguna manera, en el mismo momento que está mandando esta carta a los Efesios, la manda a los Colosenses y nos puede dar un elemento de que tenía la confianza en Tíjico, en cuestión de ser un enviado y en cuestión de que se haría cargo de ellos. Otro elemento donde aparece Tíjico, fíjate, ya históricamente Pablo está preso por primera vez, es liberado, es puesto en libertad, y estando libre, Pablo le escribe una carta a Tito y le dice a Tito, oye Tito, necesito verte en Nicópolis, pero te voy a enviar a alguien que cuide de la iglesia que estás pastoreando. ¿A quién crees que manda? A Tíjico. Mira lo que dice en Tito, capítulo 3, versículo 12. Cuando te envíe a Temas o a Tíjico, procura venir a verme en Nicópolis, porque he decidido pasar ahí el invierno. Él dice, ven, yo voy a enviar a uno de los dos para que se haga cargo ahí de la obra. ¿Qué continúa pasando? Pablo es apresado por segunda vez y durante ese encarcelamiento, Pablo le pide a Timoteo, que en ese momento estaba pastoreando la iglesia en Éfeso, que viaje para estar al lado de Pablo. ¿Quién crees que se va a encargar de la obra en Éfeso? Una vez más, Pablo envía a Tíjico. Mira lo que dice en segunda de Timoteo, capítulo 4, versículo 9 al 12. Pablo le está hablando a Timoteo y le dice, Timoteo, procura venir a verme pronto, pues Temas me ha abandonado. Habiendo amado este mundo presente y se ha ido a Tesalónica, presente se fue a Galacia y Tito a Dalmacia. Sólo Lucas está conmigo. Toma Marcos y tráelo contigo, porque me es útil para el ministerio. Pero a Tíjico lo envía a Éfeso. Tú puedes venirte con toda la confianza, porque te estoy mandando a alguien que es sumamente confiable. Mi hermano Pablo confiaba plenamente en Tíjico, ya sea para enviar una carta, ya sea para dar un reporte verbal hacia alguna iglesia, como también para encargarlo de pastorear una iglesia, si es que era necesario. Y este hombre es el que Pablo envía a Éfeso, en este pasaje que estamos viendo el día de hoy, como mensajero, para dar un reporte de la situación que Pablo estaba viviendo en la cárcel. Mira lo que dice nuevamente, regresando a Efesios, capítulo 6, versículo 21. Dice, pero a fin de que también ustedes sepan mi situación y lo que hago, ese es el propósito por el cual va a ir Tíjico, que sepan mi situación y lo que hago. Para eso irá Tíjico, amado hermano y fiel ministro en el Señor. ¿Vean cómo Pablo define a Tíjico? Como un amado hermano. El carácter, la fidelidad, el corazón servicial que tenía Tíjico, desarrollaron en Pablo un afecto hacia él, y un cariño especial que se refiere a él como un amado hermano y un fiel ministro en el Señor. Ahora esa palabra ministro, el día de hoy es muy común que se utilice como de una manera muy rimbombante, como decir, wow, es un ministro del Señor. Pero en ese tiempo la palabra ministro significa simplemente uno que sirve. Alguien que sirve a los demás. Uno que está dispuesto a ver por los intereses de los demás antes que por los suyos. Tíjico, mis hermanos, no pretendía otra cosa que ser siervo del Señor. Fue en un lugar que todos lo vieran, como en algún momento yo estaba al frente de estas iglesias, como fuera simplemente llevar una carta, llevar un reporte, él buscaba la manera de servir a Dios. Él veía todo momento y todo lugar como una oportunidad de servir fielmente a nuestro Señor. Mis hermanos, Tíjico, no vemos que dijera, ay, Pablo, pues si tú ya me has mandado a pastorear, es eso, cuando fui a suplir a este pastor, ¿cómo me vas a mandar ahora a llevar una carta? No, pues, ¿qué te pasa? Yo sé enseñar, yo sé manejar la palabra. Vemos a Pablo en Tíjico un corazón humilde, un corazón entendido, un corazón que valora de la misma manera un servicio fiel, probablemente el día de hoy podría verse lavando la iglesia, lavando los baños, como lo hace de mismo corazón y con el mismo deseo de agradar a Dios, el enseñar o aconsejar a alguien cuando tiene la oportunidad. Tíjico no servía únicamente cuando la labor tenía cierto brillo. Y mis hermanos, ¿cuánta necesidad hay de eso dentro de las iglesias? Hombres y mujeres que estén dispuestos a servir en lo que sea, capaz de contribuir en el reino de Dios, en lo que sea. No todos pueden servir como Pablo, y Tíjico no era alguien que estuviera condicionando ese servicio. Tíjico se menciona cinco veces, ¿cuántas veces se menciona Pablo? Todos conocemos al apóstol Pablo. Pero, ¿saben una cosa, mis hermanos? En el día del juicio, ahí veremos a Tíjico, aquellos que hemos creído en Jesús, y veremos cómo Dios utilizó a él. Decir en algún momento, leyendo, me parece que es el libro de la gracia todo lo cambia, de Chuck Smith. De esta parte del servicio, de que al final del día, tanto es honroso el servir en un lugar donde nadie nos ve, como estar delante de la iglesia enseñando. Y aquel día, mis hermanos, nos llevaremos grandes sorpresas. Aquellas muchas personas, y lo digo porque la Biblia habla en Mateo capítulo 7, versículo 21 al 24, que dice, aquel día, muchos me dirán, señor, señor, y señor, en tu nombre hicimos muchos milagros, muchas cosas, y grandes frutos que mucha gente veía. Y el Señor les dirá, nunca te conocí, apártate de mí, eres un aseor de maldad. Y decía en este libro de Chuck Smith, muchas sorpresas nos llevaremos aquel día. De grandes hombres que creíamos que externamente, realmente eran personas que Dios utilizaba, que estaban viviendo para su gloria. No estarán ahí, porque practicaron la maldad, porque eran frutos artificiales. Pero nos llevaremos la sorpresa también, de mirar aquellos que saldrán desde detrás de la fila y, ah, mire este, este hermanito o esta hermanita que al parecer, pues no, no tenía como mayor lucidez dentro de la iglesia, pero fue fiel, ahí donde Dios le llamó, fue fiel en lo poco. Y por eso, Jesús dice, bien, buen, ciego y fiel. Entonces, vemos en tíquico esto, no buscaba una plataforma para brillar, sino oportunidades para servir. Él no llegaba a condicionar, sino llegaba con un corazón que aceptaba cualquier condición, porque entendía que era para el reino de Dios. Mis hermanos, ¿se puede decir eso de nosotros? ¿Es la disposición que tenemos de servir para el reino de Dios? Ahora, yo entiendo, mi hermano, a lo mejor tú te ves muy débil y dices, ay, ¿yo qué podría hacer dentro de la iglesia? Yo no tengo ninguna habilidad, ningún don extraordinario, pero, mis hermanos, Dios utilizó a hombres comunes y corrientes, a hombres ordinarios, y lo hemos dicho muchas veces, Dios capacita al que llama, él busca corazones dispuestos, no busca un hombre que tenga las grandes capacidades, él utiliza a hombres comunes y corrientes como tú y como yo, nosotros, grandes hombres como Pablo, veíamos que son sujetos a luchas, a debilidades como nosotros, y entonces, lo que es la gloria de estos hombres, como lo es de todos los que servimos a Dios, es que nos amparamos en la gracia de Dios, es por su gracia en nuestra debilidad que podemos servirlo, pero, mi hermano, vemos en tíquico una disposición de servir, y es algo importante también aquí. Me encanta esta cita que leía, mira lo que dice, dice, yo soy solo uno, pero soy uno, yo no puedo hacer todas las cosas, pero puedo hacer algo, y porque no puedo hacerlo todo, no voy a rehusar hacer ese algo que yo puedo hacer, lo que puedo hacer, eso debo hacer, y lo que debo hacer, eso haré por la gracia de Dios, eso haré por la gracia de Dios, mis hermanos, ahí, particularmente leía esto, y yo recordaba mucho a mi mamá, algunos saben, mi mamá murió hace más de 10 años, y era una persona piadosa, servía al Señor, los últimos años de su vida, ella, me tocaba llevarla a la semodiálisis, lo conectan, le limpiaban toda la sangre, y algo que yo admiraba mucho de mi mamá, era que ella utilizaba esas oportunidades, y me decía, trae una manzana para llevarla a la enfermera, trae esto, y pues le quiero compartir de Cristo, y para mí era como de, ¿qué onda?, mi mamá ya en esas alturas de la vida, era muy complicado que saliera de la casa, que pudiera estar activamente en la iglesia, pero algo que yo admiraba y admiro hasta el día de hoy, es como, eso es un corazón que toda oportunidad busca, el hacer el bien a los demás, y a través de ese bien, poder compartir el Evangelio, si bien no podemos hacer todas las cosas, pero hay algo que puedes hacer, mi hermano, hay algo que puedes hacer, y se dice, no, yo de plano no tengo ninguna capacidad, pero se dice que cuando tienes un corazón dispuesto, Dios te va a utilizar. Ahora, a lo mejor tú dices, yo no tengo algo así, como claro dentro de la iglesia, pero tengo algunas capacidades que Dios me ha dado, y que a lo mejor puedo, y hermano, yo me dedico a esto, yo puedo ponerlo, pero el chiste es entender que todo lo que Dios nos ha dado, se ha utilizado como una herramienta dentro del reino. Así que mi hermano, a lo mejor hay muchas cosas que ni tú ni yo podemos hacer, pero mi anhelo es este, que podamos realmente estar haciendo lo que sí podemos hacer, o por lo menos teniendo esta disposición, y esta iniciativa. Tíquico, he expuesto aquí como un mensajero, me gusta que Dios al final del día alguien me decía esto alguna vez, dijo, mira, Dios honra a los que le honran, Dios honra a los que le honran, y Dios honró a Tíquico, cambiando de nombre, a Tíquico, que imagínate, le dio el privilegio de servir en estos viajes al lado del apóstol Pablo, y más de dos mil años estamos viéndolo nosotros como una persona que probablemente no tuvo el gran brillo, pero que Dios lo tiene en memoria. ¿Cuál era la tarea de Tíquico? Entonces, regresando al pasaje, el propósito era darles un reporte, porque Pablo tenía una relación tan afectiva con la iglesia, que él entendía que probablemente estaban preocupados por él, y entonces mira lo que dice, a fin de que también ustedes sepan mi situación y lo que hago, vertículo veintiuno, todo se lo hará saber Tíquico, amado hermano y fiel ministro en el Señor, a quien he enviado ustedes precisamente para esto, para que sepan de nosotros, y para que consuelen sus corazones. ¡Ah, caray! Pablo, estando en la cárcel, ¿está enviando a alguien para consolar a una iglesia? O sea, no está en un Airbnb, este, en Cancún, no está ya jubilado del ministerio cómodamente, está en una aflicción, está en cadenas, y dice que a pesar de eso, su propósito es consolar a los hermanos. Y me gusta, porque es lo que vemos a lo largo de toda la carta de Pablo a los filipenses, una carta que también escribe durante este encarcelamiento, y habla precisamente del gozo en medio de la aflicción. El tema predominante de filipenses es el gozo. Pablo igual está en prisión, y mira lo que dice, por ejemplo, en Filipenses dos dieciocho, le envía esta carta a la iglesia de los filipenses, y les dice, y también a ustedes les ruego, regocijense de la misma manera y compartan su gozo conmigo. Pablo en medio de la aflicción no estaba lleno de amargura, no estaba lleno como de reproches contra Dios, él estaba lleno de gozo. Él experimentaba el contentamiento de la salvación que tenía en Cristo. Y es por eso que Pablo dice, típico, necesito que tú vayas y le digas a los hermanos el gozo que yo tengo por estar padeciendo esto por causa de Cristo. Necesito que consueles sus corazones y que no estén preocupados por mí, que no deben sentir pena por mí, que a pesar de mis dificultades, yo tengo una esperanza gloriosa y eterna y por lo tanto puedo tener gozo. Y esto nos enseña varias cosas, mis hermanos. Primeramente, creo que nos enseña la relación que tenía Pablo con los demás creyentes. Y creo que es lo que la Biblia nos muestra, que como creyentes somos un cuerpo. Ponía en pantalla esto. Este pasaje nos muestra que los creyentes somos una familia. Y aún más que eso, somos un cuerpo, donde todos somos miembros los unos de los otros. Pablo dice, yo sé que ellos no son indiferentes a mi situación, típico, ve y consuélalos, anímalos. Y entonces, Pablo, por el otro lado, conoce a estos hermanos y él sabe que estos hermanos son capaces también de orar por él, de interceder por él y de ponerse en sus zapatos. Y eso es algo importante también, porque leí estos días un concepto de misericordia y decía que misericordia es meterse en la piel del otro. Misericordia es meterse en la piel del otro. Y Pablo sabía que estos hermanos eran capaces de hacer esto. Pablo sabía que estos hermanos podían meterse en su piel como si estuvieran ahí encerrados también y por lo tanto, probablemente podrían estar muy preocupados y en día típico a consolarlos. Entonces, es importante ver esto, la relación que había de Pablo con la Iglesia. Y es lo que nos dice también en Primera de Corintios, el mismo Pablo hablándole a la Iglesia en Corinto. Primera de Corintios doce veintiséis. Si un miembro sufre, todos los miembros sufren con él. Y si un miembro es honrado, todos los miembros se regocijan con él, se duelen con él. Mis hermanos, todos los creyentes, por causa de Cristo, estamos ligados los unos a los otros con un amor indisoluble que no depende ni de raza, no depende ni de qué ciudad vienes, ni tu condición social o económica. El vínculo que nos une es Cristo. Somos un cuerpo. Y por lo tanto, somos llamados a dolernos con los que se duelen y honrar a los que nos honran. Quiero poner un paréntesis aquí, porque me anhelo que estemos orando esto, que Dios nos estire a hacer esto. Pero yo conozco, porque también vivo estas mentiras, y Satanás utiliza estos pasajes para decirte ¿Ah, sí? Pues nadie te ha buscado en esta iglesia. Esa iglesia ni vive lo que te están predicando. Y entonces, si es cierto, oye, ¿por qué si dicen eso? ¿Por qué nadie hace eso por mí? ¿Por qué ni se han acercado a mí? Mis hermanos, mi intención es que Dios nos examine y nos mueva cada uno de nosotros a ser intencional con los demás. Pero es algo que a la luz de la Palabra de Dios debería caracterizarnos a todos, el tener esta iniciativa no solamente de venir y escuchar, ah, pues qué padre, o lo que sea, sino que una característica de un miembro es que participa activamente o esté involucrado también en la vida de los demás. Involucra tiempo, venir a las reuniones, tomar tiempo para platicar, probablemente un mensajito entre semana, una llamadita entre semana. Pero eso, mi anhelo es que, más que ver si lo están haciendo con nosotros, y honestamente yo digo, señores, tírame en esto. Yo quiero ser más esta parte activa de estar más al pendiente y de gozarme con los que se gozan, pero también dolerme con los que se duelen. Es indudable, hermanos, que estos Efesios se preocupaban por Pablo, y por eso Pablo les envía esta carta. Ahora es evidente también que ellos amaban a Pablo y se preocupaban por él, porque Pablo al final del día era el que les enseñaba la palabra. Y mira lo que dice también Pablo en primera de Tesalonicense 5, 12 y 13, hablando de esta parte de una instrucción hacia los creyentes respecto a los que les enseñan. Dice, pero le rogamos, hermanos, que reconozcan a los que con diligencia trabajan entre ustedes, y los que se dirigen en el Señor y los instruyen, y que los tengan en muy alta estima con amor por causa de su trabajo. Vivan en paz los unos con los otros. Pablo dice, ellos viven por el bien de las almas, para enseñar la palabra, que es lo que nos da vida, que es lo que nos santifica, que es lo que nos consuela, que es lo que nos transforma, que es lo que nos alimenta, la palabra de Dios. Y cualquiera que anhela eso, va a anhelar evidentemente el bien para aquellos que hacen eso. ¿Qué otra cosa nos muestra Pablo aquí, además de ver como el corazón y el afecto que tenían tanto Pablo hacia la Iglesia como la Iglesia hacia Pablo? Bueno, me encanta esto. Nos enseña cómo Pablo utilizaba sus sufrimientos para consolar y edificar a sus hermanos. Y eso, Pablo, que a mí me híjole, me súper redargulló. Pablo utilizaba sus sufrimientos para consolar y edificar a sus hermanos. No solamente era evidente que Pablo no había perdido el gozo de su salvación, aun en medio de estar en la cárcel, sino que él estaba enfocado de hacer el bien a los demás. Muchas veces nosotros, me incluyo, también yo batallo con eso, cuando estamos en problemas, tenemos la tendencia a volvernos egocéntricos, que nuestros problemas es lo único que hay, y por qué no me atienden, por qué no me ayudan, y yo, y yo, y yo. Pero Pablo estaba preocupado por edificar y consolar a los hermanos de Éfeso. Pablo no dice, ay, mándales esta carta, y diles, pobre de mí, oh, siendo yo un gran hombre del Señor, y que estuve dispuesto a dejar mi comodidad de predicar la palabra, con esto Dios me pagó, con estar aquí encarcelado. ¿Esta es la manera en que Dios me paga de servirle tan fielmente a él? Yo debería más bien estar disfrutando ya mi jubilación, y no en una cárcel. Pero Pablo no pensaba así. Pablo quería glorificar a Cristo en sus prisiones, y dice, este encarcelamiento es para gloria de Cristo, está dando beneficio para la Iglesia, para el Reino, entonces yo estoy contento, yo estoy contento, y quiero que animes a los hermanos, porque yo entiendo que Dios, como cantamos ahorita, él todo lo hace bien, y aún estando en esta cárcel, él sigue estando en control, y aún estando en esta aflicción, yo tengo una oportunidad de crecer en dependencia de él, de conocerle más, de dar testimonio y consolar a los demás. Ahora yo me pregunto, y te quiero preguntar a ti hermano, fue algo que, te repito, me revergulló, ¿en medio de las dificultades somos capaces de dar ánimo a los demás? Si estoy pasando esto, pero Dios está en control, él todo lo hace bien, y en medio de esto, ha sido bueno en todo esto, y por lo tanto, ¿puedo anunciar mi esperanza y confianza en Cristo? ¿O más bien somos como, como este rollo de, de conmiserarnos, de tirarnos, y ya, no quiero saber nada, mejor apago el celular, me aíslo, y pobre de mí, vemos en Pablo que no es así. Mis hermanos, mira lo que puse en pantalla, no son las circunstancias las que nos deprimen, sino la perspectiva que tenemos de las cosas. Pablo tenía la perspectiva, recuerda lo que veíamos en filipenses, el supremo llamamiento al cual yo lo había llamado, la esperanza de la salvación, la gracia que había recibido, y él tenía la perspectiva de que Dios estaba en control, aún en medio de esa situación que humanamente pudiera ser dura. Porque es importante entender la perspectiva que tenemos. Lamentablemente, el mundo nos vende que vivimos para ser felices, tú vives para ser feliz, y entonces, muchos están convencidos de que el fin último de nuestras vidas, es que seamos felices. ¿Y para qué vives? Pues yo quiero ser feliz, gozar de la vida. Mi hermano, si tú estás viviendo para eso, tu vida va a ser desgraciada. Si tú vives únicamente para ser feliz, tu vida va a ser desgraciada. La felicidad, el estar persiguiendo cosas para alcanzar la felicidad, es como una de esas pelotas grandes que a veces los niños persiguen, o un globo grande, y cuando lo alcanzan se truena, y creen que la van a atrapar, pero la agarras, y entonces se truena, o se va más lejos, y así es la felicidad aquí en este mundo. Cuando tú intentas derivarlo de cosas materiales, de logros, de dinero, de tu pareja, de tener pareja, y luego ya pareja de tener hijos, y luego ya te aburrir de cambiar de pareja, mi hermano, eso te va a ser miserable. Cuando tú enfrentas las circunstancias de igual manera, creyendo que Dios tiene que acomodar todo de la manera que tú seas lo más cómodo posible en el aquí y en el ahora, tú vas a ser muy decepcionado, porque Dios no nos llamó ni nos salvó para estar cómodos, nos llamó para hacernos santos, para hacernos más como Él, para depender más de Él, de tal manera que debemos cambiar esta perspectiva. Ponía en pantalla esto, ¿cuál es la perspectiva entonces que podríamos ver en Pablo? El fin último de nuestra existencia es glorificar a Dios y gozar de Él por siempre. Vivir para la gloria de Dios y deleitarnos en Él, y esos son los que conocen el gozo que Pablo está hablando aquí en sus cartas. Te pregunto, ¿estás viviendo para eso? Pues como no, mira, pues sí, vengo el domingo, pero realmente yo necesito esto para ser feliz. Veremos más adelante esta tendencia del corazón de desviarse a buscar esta plenitud y satisfacción lejos de Cristo y que nos pagará con miseria. Pero mira lo que Pablo va a decir ahora en las bendiciones finales. Pablo va a terminar, me encanta, te repito, cerrando este sándwich y recordándonos y recordándoles a los efesios la identidad que tenemos en Cristo. Dice el versículo 23 al 24 Paz sea a los hermanos y amor con fe de parte de Dios el Padre y del Señor Jesucristo. La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor incorruptible. ¿Qué les decía Pablo a estos hermanos? Bueno, ahorita vamos empezando el año. ¿Qué andamos deseando generalmente cuando acaba un año y empieza el otro? Salud, dinero y amor. De cajón, ¿no? Que tenga salud, dinero y amor y con eso viene todo lo demás por añadidura. ¿Qué es lo que Pablo dice aquí? Habla de paz, amor y fe. Tres elementos que se relacionan íntimamente, que están ahora sí que como dicen, como juntos con pegados y les recuerda la paz. En este punto de la carta, recuerda que esa carta la leían de una sentada. No tardaban meses como nosotros, ¿no? Tal vez se reunían, a ver hermanos, ¿tenemos junta en iglesia? Nuestro hermano Pablo, que está en prisión, nos mandó una carta, vamos a leerla de corrido. Muy probablemente en este punto, como ya habían pasado todos los elementos prácticos que se desprenden de la identidad en Cristo, a lo mejor ellos se habían envuelto nuevamente en el tengo que hacer y como marido como esposa y con mis hijos y en el trabajo y la armadura y la oración y a lo mejor en algún momento se habían olvidado de que era por gracia lo que habían leído en los primeros versículos y estaban otra vez teniendo como esta sensación de es que tengo que hacer cosas para que Dios me acepte. Y mira lo que Pablo les recuerda, les recuerda la paz. Es algo con lo que comenzó hablando. Efesios capítulo uno, versículo dos recuerdas el saludo inicial de Pablo, les dice, gracia y paz a ustedes de parte de Dios, nuestro Padre y del Señor Jesucristo, la paz capítulo dos versículo catorce, porque Cristo mismo es nuestra paz y de ambos pueblos hizo uno derribando la pared intermedia de separación hablaba de esta parte de que Cristo derribó esa pared intermedia que separaba judíos y gentiles y ahora todos somos uno en el capítulo cuatro, versículo tres Pablo les dice que sean solicitos o que se esfuercen por preservar la unidad del espíritu en el vínculo de la paz capítulo seis, versículo quince habló de esta parte de calzarte el evangelio, de la paz también entonces es un tema predominante en Efesios, la paz de Cristo, la paz de Dios nos ha dicho por medio de Cristo recuerden que ustedes tienen paz con Dios, ustedes fueron justificados para con Dios por medio de Cristo y entonces tienen paz con Él ahora participamos de una paz con Él que nos debería llevar a estar en paz también con nuestros hermanos porque somos parte de esta familia, de este mismo vínculo, por lo tanto esfuercense en mantener esa unidad esfuercense en mantener esa paz y me gusta porque vemos el corazón de Pablo Él les dice lo que yo deseo para ustedes como individuos y como iglesia es que puedan experimentar la paz de Dios pero la paz y la unidad entre ustedes mi hermano si tú amas esta iglesia esta es una gran petición que deberíamos estar orando constantemente ante la obviedad que vimos en Efesios seis de un enemigo que quiere destruir la iglesia que quiere meter división, que quiere meter queja, chisme esta es una gran oración, decirle Señor derrama tu paz sobre nosotros primero el entender el evangelio que nuestra paz contigo no es por mi sobra, no es por mi servicio, yo no soy mejor que el hermano que llegó por primera vez la única razón por la que puedo tener paz contigo es por Cristo, pero Señor también ayúdame a mi a esforzarme en preservar esa paz, a no crear inquietud, chisme, queja ayúdame a esforzarme en preservar esa paz sería hipócrita, pienso yo como estar orando a Dios Señor ayúdanos a mantener esta unidad, estar en paz y mientras tanto tener un espíritu quejumbroso, crítico destructivo, creando problemas y Pablo dice fuimos comprados y fuimos llamados, paz sea a los hermanos y amor con fe ahora me gusta que dice paz sea a los hermanos, habla otra vez de un contexto no individual ni siquiera dice paz sea a cada uno dice paz sea a todos habla de que nuestra fe y la salvación no es un concepto que debemos vivir de una manera individualista sino que habla que nuestra fe nos llama a ser también parte de un grupo, en este caso de la iglesia poní esto en pantalla mi hermano y por eso la importancia de ser parte de una iglesia local tú no puedes estar en Cristo y odiar la iglesia o no ser parte de una iglesia local no puedes amar a Cristo y repudiar lo que Él ama Cristo ama la iglesia aquí Pablo está instruyéndonos nuevamente esta paz que Cristo compró ustedes también esfuércense en mantenerla, Cristo no entiende de un creyente que dice mira yo creo en Dios, pero somos Dios y yo yo no necesito ser parte de ninguna iglesia eso no está en la Biblia la palabra dice en Hechos 2 que el Señor añadía cada día a aquellos que habían de ser salvos a la iglesia y Pablo dice hablando de esta armonía, de esta paz dentro del pueblo de Dios dice que toda esta paz proviene también de Dios, me encanta esto, versículo 23 paz sea a los hermanos y amor con fe de parte de Dios el Padre y del Señor Jesucristo les dice hermanos recuerden esto y nos está diciendo y lo necesitamos recordar porque constantemente estamos relacionándonos con Dios en baja nuestro rendimiento y a lo mejor esta semana hubo tropezones en tu vida y dices híjole no es que no tengo confianza acercarme de Dios yo creo que algo está raro y Pablo dice recuerda esto que la paz vino por Cristo de parte de Dios el Padre y del Señor Jesucristo está diciendo es Dios el Padre por medio del hijo que todos los creyentes obtenemos esos beneficios toda la identidad y bendición espiritual y hablando de este punto del paz del amor y de la fe fuera de Dios mis hermanos y escucha bien esto mi amigo si nos estás visitando fuera de Dios no hay paz puede haber momentos puede haber paliativos y hay paz si me echo cierta sustancia un trago, alcohol si voy y grito en algún lugar si eres aficionado a algún deporte yo era así lamentablemente yo voy al estadio ahí suelto todo lo que tengo y encuentro paz y si gana mi equipo tengo paz pero si no es una tristeza y andamos por ahí fuera de Dios buscando paz en cualquier situación si voy a la terapia si voy al masaje dice la palabra de Dios en Isaías 57 21 no hay paz dice mi Dios para los impíos no hay paz, ¿quién es un impío? bueno, todo aquel que no pertenece a Cristo todo aquel que no ha venido a Cristo en arrepentimiento y fe todo aquel que no vive para Cristo incluso tú puedes proclamar con tu boca que crees en Cristo pero tu vida da una evidencia de que eres un impío, un impío es alguien que no rinde piedad, que no rinde devoción a Dios que de labios le honra pero realmente su vida es la de un impío y dice la palabra no vas a encontrar paz, no importa lo que hagas no importa cuánto dinero tengas, no importa tus estudios no importa nada de eso, no vas a encontrar paz y si somos honestos mis hermanos debemos reconocer que muchas veces no tenemos paz que muchas veces aún como creyentes andamos buscando este descanso y esta paz fuera de Cristo, pero aquí es claro para un impío poní en pantalla esto no hay paz para los impíos, esa paz viene de Dios el Padre, no viene de tus obras, no viene de tu moralidad viene de Dios el Padre es imposible acercarnos a Dios el Padre y andar en sus caminos si no es por medio de Cristo nuestro Señor y Salvador únicamente por Cristo no otro intermediario, no el Papa no la Virgen, no un Santo hazlo únicamente de un camino, Juan 14 6 yo soy el camino la verdad y la vida y nadie viene al Padre si no es por mí es Cristo mi hermano, mi amigo que estás aquí o sea a lo mejor habitas en este tema y dices es que tienes razón, he probado en un montón de cosas y muchas las he logrado y soy como este niño que vuelvo a quedarme vacío, que mi alma quede insatisfecha no tengo paz, no duermo y por más que le he buscado, que tomo esto y lo otro, no hay paz y quiero y entiendo que debo volverme a Dios, pero como vengo a él es por Cristo no es algo abstracto ni místico, la palabra de Dios habla de un solo camino, un solo Salvador y es Cristo no sé si has, porque es necesario aclarar esto, porque es muy común también encontrar gente que dice bueno pues yo y Dios Dios, Dios, Dios y yo me relaciono con Dios a mi manera, si pero como te acercas a pues yo y Dios y mi Dios esto y mi Dios lo otro, pero nunca mencionan a Cristo nunca mencionan a Cristo, a Dios simplemente como un ser supremo y la palabra de Dios dice que es imposible que podamos tener una relación con Dios si no es por medio de Jesucristo es imposible mi hermano tener una relación con Dios el Padre echando a un lado a Dios el Hijo que es Cristo y esto también nos recuerda recuerda esto recuerda esto todas las bendiciones que recibimos de la mano de Dios las recibimos en virtud de los méritos de Cristo, todo lo que recibimos, lo recibimos en virtud de los méritos de Cristo no son nuestros méritos somos dados, me encanta esto porque nuestro corazón es tan asqueroso que somos dados en momentos que andamos como bien, vamos a decirlo, ahora no ha habido diferencias en el matrimonio ahora he tenido buenas reacciones y Dios te bendice de alguna manera, nuestro corazón es muy dado a decir, ah pues claro pues yo ahora me he portado bien y a mi me encantan esos días en los que Dios te humilla tanto que ves tu debilidad ves tu fragilidad y Dios te bendice con algo pero como Señor tiene que recordar, es que es necesario que recuerdes que es por gracia, yo te amo yo te bendigo, yo te cuido no por tus méritos sino por los méritos de Cristo, todo lo que tenemos como creyentes, Pablo nos está recordando y dice recuerden esto para terminar esta carta, recuerden que ustedes son bendecidos y tienen todos estos favores por los méritos de Cristo como lo dijo en Efesios 1, mira Efesios 1, vertículo 3 al 7 ¿te acuerdas que iniciando Efesios te dije, mira, lee Efesios y subraya cuando diga en Cristo, por medio de Cristo que era el tema central de la carta como las bendiciones en Cristo, nuestra identidad en Él, dice bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo según nos escogió en Él no nuestra capacidad, no nuestro potencial no, en Él, antes de la fundación del mundo para que fuésemos santos y sin mancha delante de Él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo según el puro afecto de su voluntad para la alabanza de la gloria de su gracia con la cual nos hizo aceptos en el amado en quien tenemos redención por su sangre eres aceptado por los méritos de Cristo, eres perdonado por la sangre de Cristo, el perdón de pecado según las riquezas de su gracia es imposible tener alguna relación con Dios que no sea por medio de Cristo por otro lado, es sumamente alentador y esperanzador en estos momentos de desánimo que nuestro corazón quiere relacionarse con Dios en base a nuestro rendimiento y decirle corazón, guarda silencio ni en el mejor de mis momentos fui digno de recibir algo ni en este peor de mis momentos Dios me va a abandonar, porque no hay nada que me pueda separar de su amor, porque es por Cristo que yo soy más que vencedor Ahora Pablo recuerda también ya vamos cerrando esto otro elemento además de la paz termina diciendo esto instruyendo a los creyentes a que habitemos en la gracia de Dios si una instrucción podemos llevarnos es mi hermano esforcémonos como Pablo le dice a Timoteo, esfuérzate en la gracia le dice, esforcémonos en habitar en la gracia versículo 24 la gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor incorruptible, a menudo conectamos la gracia únicamente con la salvación, pero también la gracia es todo aquello que recibimos de mano de Dios cuando no lo merecemos poniendo esta definición hay muchas maneras de decirlo pero esencialmente la gracia es aquello que mueve a Dios a bendecirnos aunque en realidad merecemos todo lo contrario eso es gracia lo que mueve a Dios a bendecirnos aunque en realidad merecemos todo lo contrario porque nos favorece Dios a pesar de que somos pecadores porque nos sigue bendiciendo Dios a pesar de que tengo dudas, a pesar de que hay momentos que tengo caídas que soy infiel y que no merezco completamente su palabra porque Dios es fiel porque Dios te ama, te salvó y te bendecirá por su gracia gracia y paz dice ahí en Efesios capítulo 1 versículo 2, y él dice mi anhelo es que ustedes habiten en esto no se envuelvan en el legalismo, en sus obras, en sus acciones porque cuando nos miramos a nosotros mismos honestamente hay decepción, hay frustración, hay vergüenza miremos a Cristo y la gracia que hemos recibido ahora, mira lo que termina diciendo Pablo nuevamente la gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor incorruptible la idea de amor incorruptible es algo que no puede ser destruido algo que es indestructible alguien ha parafraseado esto diciendo la gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor, con un amor que una vez presente jamás puede perecer una característica de un creyente es que a pesar de las adversidades de la prueba, de las dificultades perseverará porque es Cristo el que mora en él puse en pantalla en esto mi hermano es de alguna manera como Pablo está definiendo a un creyente aquí en este texto como son los cristianos según este texto quienes son, una persona amada por Cristo, empiezo otra vez en lo que Cristo hizo, amada por Cristo que ha sido transformada para que ahora ame a Cristo en respuesta al amor gracia y paz que ha recibido de Cristo eso es un cristiano alguien que abraza el amor de Dios aquel que dice Romano 5 8, más Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores Cristo murió por nosotros, entiende yo no había hecho nada y Dios ya me había amado Dios ya me había reconciliado con él y entonces en respuesta a ese amor esa gracia, ahora él le ama, mis hermanos me gusta esto porque Pablo está partiendo desde la identidad está diciendo recuerden en todo momento que todo lo que se ha instruido en esta carta debe partir de que ustedes recuerden su identidad, ustedes son amados son escogidos, son perdonados Dios nos cambia desde identidad, desde la gracia y la paz que ya tenemos en Cristo no por nuestras obras, sino por los méritos de Jesús ahora hay un pasaje que a mi me encanta y es lo que Cristo hace en una persona que realmente transforma y mira a Cristo de otra manera como algo supremamente valioso por lo cual vale la pena perderlo todo mira lo que dice nos explica de una manera muy gráfica lo que sucede en la conversión de un creyente como Dios produce en nosotros un nuevo gusto espiritual, un nuevo corazón hacia él, como es él el que nos transforma mira lo que dice Mateo 13, 44 al 46 dice el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en el campo que al encontrarlo un hombre lo vuelve a esconder y de alegría o dice la reina Valera y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene y compra aquel campo el reino de los cielos también es semejante a un mercader que busca perlas finas y al encontrar una perla de gran valor fue y vendió todo lo que tenía y la compró habla del proceso sobre el cual todo creyente pasa y como pasa de ver a Cristo de una manera tan gloriosa en este pasaje en versículo 46 habla del pecador como este mercader y habla de esta perla preciosa a Cristo este mercader iba por la vida invirtiendo en comprar y en gastar en cualquier falluca por decirlo así falluca, cháchara, chatarra él iba disfrutando de los deleites baratos de este mundo porque el pobre miserable creía que era todo lo que había iba por la vida deleitándose en cuestiones híjole yo pensaba es como como estar buscando en la basura algo con lo cual saciar su estómago iba sacando cosas de la basura ya has visto a personas así y muchas veces somos así como creyentes también y allí estábamos tú y yo cuando no éramos creyentes definitivamente buscando nuestra identidad, nuestro gozo en otras personas comenzamos muy niños buscando la aceptación de nuestros papás, de nuestros compañeros en la escuela y entonces si no me aceptan yo tengo que cambiar y ser como ellos y vivimos esclavos de la aceptación de las demás personas de tener alguna relación con alguien de tener un mayor nivel de estudios, de prestigio, dinero y creemos que eso es lo que define la vida como lo más valioso y la palabra dice eso al final del día no es que sea necesariamente malo pero al lado de Cristo para derivar nuestro gozo e identidad es basura, es comida chatarra y ese individuo estaba ahí comiendo de eso y entonces pasa por este terreno y ve esta gran perla y pregunta ¿cuál es el precio de esta perla? y le dicen todo incluyendo tu vida ahora, ¿qué fue lo que realmente sucedió en este individuo? te has preguntado ¿cómo es que alguien, cómo es que alguna persona pasó de ver a Cristo como algo aburrido insípido a de repente desvivirse por él? bueno, a lo mejor has estado ahí mi caso fue así, yo crecí en la iglesia y eran como híjole me callan bien tengo buenos recuerdos pero honestamente en el tema de hablar la Biblia era que aburrido que insípido, no, me da mucha flojera aún con un modelo de mis papás que por gracia de Dios en sus posibilidades glorificaron a Cristo eso no era suficiente para mí era algo insípido era algo insoportable de escuchar la palabra de Dios al punto que yo decía yo nunca voy a estar metido en esas ondas de mis papás ahora, ¿qué fue lo que pasó? que en un momento dado vemos el Evangelio de esta manera, que lo vemos como lo más glorioso, bueno, mi hermano de repente Dios abre nuestros ojos por su gracia, nos abre la visión y comenzamos a ver el pecado el pecado es la fuente de toda nuestra miseria y todas nuestras desgracias y comenzamos a ver ese pecado como lo que realmente es pasa de ser esto y me encanta esta imagen de John Piper cuando habla de que el pecado cuando estamos sin Cristo lo apapachamos, creemos que es algo bonito y es como cuando estamos con la luz apalada y estamos acariciando algo y está suavecito como de peluche y entonces se prende la luz y resulta que era una tarántula bueno, así es cuando Cristo abre nuestros ojos, comienza a ver el pecado y es, claro que sí en esencia el pecado es he vivido para mi gloria para mi reino, por lo tanto estoy insatisfecho, vacío, por lo tanto es miserable mi vida no tiene ningún rumbo ningún propósito, el pecado en esencia es darle espalda a Dios vivir para nuestro reino y no para aquel que nos creó, pero Cristo abre nuestros ojos mira lo que dice 2 Corintios 4 pero si nuestro evangelio está aún encubierto entre los que se pierden está encubierto en los cuales el Dios de este siglo según el entendimiento de los incrédulos para que no le resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios, estaba encubierto pero Dios apareció en un momento en la historia de todo creyente y a lo mejor es este día para ti dice pues Dios vertículo 6 que dijo de las tinieblas resplandecerá la luz dice que ha resplandecido en nuestros corazones para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en el rostro de Cristo ¿qué hizo Dios? apartó las tinieblas abrió nuestros ojos mi hermano, si eres creyente yo sé que hay un montón de situaciones que día a día nos quieren desanimar, yo sé que hay un montón de situaciones que quieren llevarnos a dudar del amor de Dios pero recuerda esto, Él abrió tus ojos para que tú puedas tener deseo por Él con respeto, con batallas con momento, con activa pero fue Dios que abrió tus ojos a Dios le plació hacer eso por ti por su gracia, por eso termina diciendo versículo 44 en otra escena dice el reino de los cielos semejante a un tesoro escondido en el campo, que al encontrarlo un hombre lo vuelve a esconder y de alegría gozoso por ello va a vender todo lo que tiene y compra aquel campo dice que este hombre deja su vida atrás, se despoja y sigue a Cristo gozosamente wow, yo me quedé como hay momentos que ya en tu caminar en Cristo pierdes este gozo una carga, no, recuerda mi amigo, recuerda el milagro de la salvación y este hombre está gozoso y dice mira yo no tengo nada que calcular me da risa que hay gente y digo no oro más por Él, el Señor tiene que entender el Evangelio y me dicen oye para seguir a Cristo yo tendría que dejar esto tendría que hacer esto y es como la gracia no es por tus obras pero Señor ayúdanos a apreciarte tan glorioso y tan valioso que es una respuesta natural este hombre no considera lo que va a dejar, no considera que ya no va a tener probablemente una propiedad, un bien raíz para su futuro, su estabilidad él dice mira Cristo es mejor que todo Cristo es mejor que todo y lo deja atrás, lo vende el hombre es gozoso él dice y es mi anhelo y es lo que sucede como creyentes y es mi anhelo que suceda cada día para nosotros que al ver la gloria del Evangelio podamos recordar esto y decir Cristo ha perdonado todos mis pecados tengo paz con el Dios del universo con este Rey Él me ha dado el don de la vida eterna ya no soy huérfano ya no soy extranjero, ya no estoy desahuciado en este mundo, tengo un Padre celestial tengo un pasado perdonado por los méritos de Cristo tengo un presente consentido ya no vivo aquí y acá buscando a ver qué hago y terminando vacío, insatisfecho vivo para la gloria de Dios y finalmente tengo la certeza, porque es otro miedo con el que vivimos, el enfrentarnos a la muerte yo tengo la certeza que no tengo nada que temer a la muerte, porque la muerte es la puerta únicamente para entrar en la presencia de mi Rey y Señor por su gracia mis hermanos, es un gozo y ese gozo va creciendo a medida que nosotros vamos conociéndole y a medida que también vamos conociendo nuestra indignidad me encanta como creyentes a veces cuando Cristo te salva ves algunas áreas de tu vida que dices, gloria a Dios que Dios me perdonó pero después comienzas a leer la Biblia y dices no te pases me salvó de un montón de más de cosas que yo he pecado contra Él y entonces comenzamos a ver la cruz el perdón más grande y más grande y más grande porque honestamente el pecado cada vez nos separaría más y por lo tanto cada vez más podemos apreciar el Evangelio y la salvación que tenemos en Cristo mis hermanos, es un llamado a intimidad con Él, lo que Pablo está terminando aquí diciendo es, recuerden la paz de Cristo no de sus méritos, no de sus obras recuerden la gracia de Cristo no de sus méritos, no de sus obras y permítanle y rueguen y peleen por estar íntimamente enamorados de Él cada día de luchar por seguir viéndolo como este tesoro de supremo valor, por lo cual vale la vida perderlo todo ¿Cuál es el llamado de Cristo en los Evangelios? poniste en pantalla, su llamado es venir a Él, para ser plenamente satisfechos en Él, a intimidad con Él una y otra vez, Juan 6.35 Jesús les dice, yo soy el pan de vida el que a mí viene, no dice el que hace estas cosas y estas cosas, no, el que a mí viene, el que en mí habita, el que en mí cree no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed Juan 7.37, si alguien tiene sed que venga a mí, beba, el que cree en mí como ha dicho la escritura de lo más profundo de su ser, brotarán ríos de agua viva, mi amigo que estás aquí, deja de estar buscando en la basura Cristo te ha traído aquí para que realmente comiences a vivir para que vuelvas, alguien explicaba de esta manera, somos como peces si estás fuera de Cristo, estás ahí saltando en lo seco, buscando charquitos que medio te mantengan hidratado y Cristo te dice, ven métete nuevamente al estanque tú me perteneces, y solamente de esta manera, tu vida tendrá propósito tendrá paz, y tendrá esperanza ahora, quiero terminar con esto porque también Dios me llevaba a este punto, de que muchas veces como creyentes también podríamos estar perdiendo esta este asombro de Cristo, y a lo mejor es una pregunta que tú te estás haciendo, porque ha llegado momentos en mi vida donde yo ya no veo a Cristo con esta satisfacción con este gozo bueno, recuerda esto que puse en pantalla la vida cristiana es una lucha y somos continuamente seducidos a buscar deleite y satisfacción en eso mismo que un día tuvimos por basura, es increíble pero así de astuto es el diablo, él levanta ídolos en nuestro corazón que desvían nuestra mirada de Cristo, que es un ídolo algo o alguien que cautiva mi pensamiento, mente, corazón y deseos más que Dios y somos desviados por eso, y olvidamos de donde Dios nos rescató quitamos la mirada de Cristo y andamos ahí volviendo a buscar en la basura mis hermanos, mi anhelo es que podamos examinar nuestro corazón y decirle Señor, hay algo en mi vida que yo he levantado como ídolo quizá el vivir ahora para el dinero quizá el vivir únicamente para mi familia, para el trabajo que he perdido mi gozo por ti ponía ahí una fórmula y es como una receta una fórmula para encontrar un ídolo si la Biblia nos dice que somos creados para encontrarnos y estar satisfechos en Cristo de si alguien por ahí es Cristo, más nada debería ser Cristo, más nada es igual a todo pero cuando hay algo más en nuestra vida, aún no cosas malas, no necesariamente cosas malas, pero lo estamos poniendo ahí probablemente se ha convertido en un ídolo. ¿Qué es eso en tu vida que tú dices, mira es que sí creo en Cristo pero estoy esperando que esto se solucione, estoy esperando que pase esto y entonces yo tendré el gozo y probablemente encontrarás ahí un ídolo que ha desviado tu mirada, tu tiempo, tu mente y te ha cautivado de tal punto que te has desviado y nos sucede constantemente que hemos perdido este asombro del Evangelio y de la gloria de Dios Juan se lo advierte a esta iglesia en Éfeso Apocalipsis 2.4 pero tengo esto contra ti que has dejado tu primer amor fíjate que interesante que esta misma iglesia y en general, no es solamente la iglesia sino a todo creyente dejamos nuestro primer amor vamos en pos de ídolo nos olvidamos de nuestra identidad y de lo que tenemos en Cristo y volvemos a esta basura mi hermano, mi anhelo es mostrar esta carta y desde un inicio ha sido mi anhelo y pedirle a Dios Señor, recuérdanos que todo se trata de ti que la identidad que tenemos, la aceptación el amor, el perdón es únicamente por tus méritos pero Señor cautívanos tanto con tu amor que podamos verte como este único Rey y Salvador en toda tu gloria, para que entonces y en fruto de esa intimidad con Él andemos de una manera digna al llamamiento o a la salvación que tú nos has dado y por eso es necesario recordar que la gracia y la paz vienen únicamente por Cristo, puse esto y voy a terminar con esto, recuerden esto mis hermanos y yo creo que es lo que Pablo les está recordando a los efecios, recuerden el principal llamado intimidad con Él recuerden la gracia la paz, el amor deleitense en Él, gócense en esa salvación e identidad que ya tenemos por gracia en Cristo como hijos amados y ante cualquier situación, tentación aflicción, podamos responder que Cristo es mejor así que vamos ahora para terminar mis hermanos Padre gracias por este tiempo que nos has regalado en tu palabra Señor gracias porque deseamos al inicio toda la Escritura toda la Escritura es inspirada por ti Señor y es útil para redarguir para instruir, para capacitarnos Señor Padre gracias porque nos has hablado de varios temas Señor, gracias por un hombre como tíquico y por el estímulo de que tú honras a quienes te honran pero también a un modelo breve del servicio Señor y te ruego que derivado de nuestra identidad y de la gracia que hemos recibido, te levantes también mujeres Señor con corazones humildes y dispuestos Señor y aún a los que ya servimos Señor perdónanos límpianos y en tu espíritu Señor, ayúdanos a crecer también en esta humildad en esta disposición Señor entendiendo quienes somos ya en ti Padre Señor guárdanos de de esto que hablábamos de la división la división de queja, de chisme y ayúdanos a esforzarnos y a pelear como iglesia en habitar primeramente en paz contigo porque en Cristo nos has dado paz y por lo tanto vivamos gozosamente pero también ayúdanos con tu espíritu Señor ante una batalla que hay te pido por esta iglesia y por toda la iglesia en general Señor, que nos portalezcas y nos libres ante las insidias o artimañas del enemigo que quiere sembrar división Señor y más bien en tu espíritu nos portalezcas para esforzarnos en el vínculo de la paz Señor pero finalmente Señor, como veíamos aquí con Pablo gracias por recordarnos nuevamente refrescar nuestra alma y anclarnos en los motivos correctos de que todo se trata de ti gracias Padre porque si hoy podemos buscarte, adorarte y anhelarte, fue porque tú no solamente nos salvaste, sino transformaste nuestros afectos Señor para que así sea Padre y te damos toda la honra y toda la gloria ayúdanos a vivir habitando en esta gracia, en esta paz Señor y que entonces Padre podamos vivir a la altura del llamado que nos has dado, Padre gracias porque al final del día todo se trata de ti, gracias por tu palabra Señor, gracias porque en Cristo somos amados, perdonados aceptados y perdónanos Señor porque constantemente estamos yendo en pro de otras a buscar lo que solamente tú nos das Señor, estar complejos y satisfechos en ti y Padre yo te ruego que examine nuestros corazones así como la iglesia en Éfeso fue advertida de que había dejado su primer amor, Padre yo te ruego que también examine nuestros corazones, nos dé la humildad de reconocer, pero también en tu Espíritu Santo, tomar acción Señor y retomar nuestra intimidad contigo primeramente Señor y entonces los frutos visibles Señor, sea todo lo que hemos visto a lo largo de esta carta Padre, gracias Señor porque el llamado primordial es la intimidad contigo, gracias porque sabes que te necesitamos gracias porque eres un Padre que está 24-7 los 365 días dispuesto a hablarnos en tu palabra y dispuesto a escucharnos a través de la oración Señor gracias Padre por tan gloriosa salvación que nos has dado en Cristo en cuyo nombre oramos, Amén somos una iglesia que confía camina y comunica a Cristo acompáñanos domingo a domingo te esperamos