¿Para que nació Jesús? (Lucas 2:8-14)

This is a sermon from a church where they are reading and studying Luke 2:8-14. The purpose of the sermon is to explain why Jesus was born and what it means for us. The pastor emphasizes the importance of understanding the true meaning of Christmas and the impact of Jesus' birth on our lives. The passage mentions the shepherds being visited by an angel and the glory of the Lord surrounding them. The pastor also highlights the historical context and location of Jesus' birth in Bethlehem. Overall, the sermon focuses on the significance of Jesus' birth as the Savior and Lord. Somos una iglesia que confía, camina y comunica a Cristo. Acompáñanos domingo a domingo. Te esperamos. En esta fecha. Y entonces vamos a leer el día de hoy, vamos a estudiar el día de hoy. Lucas capítulo 2, versículo 8 al 14. Es un pasaje muy, muy conocido. Pero el propósito que tengo a través de este pasaje es poder explicar para qué nació Jesús. Te has preguntado, pues, para qué nació, cuál es el propósito, a mí en qué me afecta, por qué debería importarme, para qué nació Jesús. Entonces, te voy a pedir que te pongas de pie. Vamos a comenzar leyendo. Vamos a leer desde el versículo 1, para agarrar como todo el contexto de este pasaje. Lucas capítulo 2, versículo 1 al 14, aunque solamente estudiaremos del versículo 8 al versículo 14. Recuerda que va a ir apareciendo ahí en pantalla, si quieres ahí seguir, es la versión, la NBLA, no varía mucho de la Reina Valera 60, pero va a ir apareciendo ahí. Entonces, yo leo versículo 1, tú lees versículo 2 y así nos alternamos hasta terminar juntos en versículo 14. Dice, aconteció en aquellos días que salió un edicto de César Augusto para que se hiciera un censo de todo el mundo habitado. Este fue el primer censo que se levantó cuando Sirenio era gobernador de Siria. Todos se dirigían a inscribirse en el censo, cada uno a su ciudad. También José subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret a la ciudad de David, que se llama Belén, por ser el de la casa y de la familia de David. Para inscribirse junto con María, comprometida para casarse con él, la cual estaba en tinta. Sucedió que mientras estaban ellos allí, se cumplieron los días de conumbramiento. Y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón. Y un ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor. Pero el ángel les dijo, nos teman, porque les traigo buenas nuevas de gran gozo, que serán para todo el pueblo. Porque les ha nacido hoy en la ciudad de David un Salvador que es Cristo el Señor. Y esto les servirá de señal, hallarán a un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. De repente apareció con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales alabando a Dios, y diciendo, juntos, Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace. Señor y Dios, te damos muchas gracias por el privilegio que nos das nuevamente de estar en tu presencia, Señor. Y de estar en tu palabra, y de venir, Señor, y meditar, y Padre, precisamente ver cuál es la repercusión de este suceso histórico, porque es un hecho real, como veremos, que cita personas, tiempos, momentos, Señor. Y que tú precisamente programaste, y lo hiciste, Señor, con el propósito, Padre, de rescatarnos. Como esto implica varias cosas, Señor, y es lo que yo te ruego, Señor, que Padre, a lo mejor para varios ya es, no sé cuántas veces ha escuchado este pasaje, cuántas Navidades ha pasado, a lo mejor para algunos es la primera vez que esté en una iglesia, pero Señor, yo te ruego que tanto para aquel que tiene años en ti, como para aquel que a lo mejor va a escuchar por primera vez tu palabra, realmente abra nuestros ojos, como cantábamos ahorita, Señor, y podamos ser asombrados y maravillados, Señor, por la obra que tú hiciste a través de Jesús, Señor, y cómo, Padre, esa salvación nos repercute en tanto en el día a día, en nuestra identidad en ti, Señor. Así que, Padre, abre nuestros ojos, concédenos fe, Señor, y permite que sobre todas las cosas Cristo sea exaltado, porque al final del día es de lo que se trata, no solamente este día, Señor, sino toda nuestra vida. Así que, Padre, glorifica a Cristo, en cuyo nombre oramos. Amén. ¿Podemos tomar nuestro asiento, hermanos? Precisamente ahorita lo que terminaba diciendo, ¿no? En teoría, en la Navidad, supuestamente celebramos el nacimiento de nuestro Señor Jesús, y aunque no sabemos con certeza el día que Jesús nació, no me voy a meter en esos detalles, la fecha tradicional, incluso en las iglesias, está arraigada a estos tiempos, pero más allá de las fechas, es el propósito por el cual Cristo nació, para qué nació Jesús. Ahora, una de las cosas que me gustan de esta época son los cánticos navideños, los himnos navideños, y en la Biblia vemos el primer himno navideño, que es la porción que estábamos leyendo el día de hoy, y es en donde yo quiero meditar para entender el verdadero significado de la Navidad. ¿Para qué vino Jesús al mundo? ¿Te lo has preguntado alguna vez? ¿Qué fue lo que Dios llevó a cabo a través de la encarnación de Jesús? Mira lo que dice este cántico, versículo 14 de Lucas 2, dice Ahora, como vimos en ese relato, los primeros en enterarse del nacimiento mencionan ahí que son unos pastores, quizás versículo 8 dice que había unos pastores que estaban a campo abierto cuidando a sus ovejas, versículo 8, en la misma región había pastores que estaban en el campo cuidando sus rebaños durante las vigilias de la noche. Entonces, aquí hay muchos elementos que como oraba nos dan veracidad del suceso del nacimiento de Jesús. Aquí menciona algunos elementos o algunos detalles que confirman también la veracidad de los evangelios. Uno de los elementos que me llama mucho la atención es precisamente que menciona aquí a un grupo de pastores, si te fijaste ahí en el versículo 8, habla de que había pastores. Y mis hermanos, hay muchas personas que intentan desprestigiar la Biblia, pero la Palabra de Dios tiene detalles como estos donde nos confirman la veracidad de los evangelios. ¿Por qué digo esto? Cuando menciona pastores, realmente en ese tiempo era un oficio o un trabajo que era muy poco reconocido en ese tiempo. Es decir, está hablando aquí evidentemente no de pastores de iglesias, sino de pastores que cuidan ovejas, y en aquel tiempo los pastores eran una clase muy despreciada en Israel. Era muy poco probable que si alguien siguiera inventar una historia, utilizar a este tipo de personas, y es que no solamente eran un grupo o una clase despreciada en Israel, te preguntarás, pero ¿por qué eran una clase despreciada? Bueno, ellos estaban en contacto con mucha suciedad, con mucha impureza, para ellos era muy difícil mantener estas reglas o leyes de purificación añadidas a la ley, y entonces eran personas impuras desde el punto de vista religioso. Por otro lado, también históricamente los pastores ahí tenían fama como de ser, como que tomaban prestado lo que no era suyo, por decirlo así. Eran fácil para robar cosas. De tal manera que eran personas que su testimonio era poco creíble. Ahora, aún así, Lucas, que sabemos es un doctor y relata a detalle las historias, él utiliza a estos pastores, y me llama la atención porque esto confirma una parte importante de la veracidad de los evangelios. Lucas hubiera inventado este relato muy probablemente escogiendo a personas más honorables a la sociedad, pero él está descansando en la voluntad de Dios. Él sabe que Dios es más poderoso que incluso cualquiera de las personas, incluyendo cualquier clase social, y Lucas no se limita a narrar los hechos estrictamente como ocurrieron. Estos pastores dicen que están cuidando a las ovejas, y en medio de eso aparece el ángel del Señor, el ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor y tuvieron gran temor. Esta gloria en este momento se refiere a una manifestación visible especial de la presencia de Dios, como esos momentos donde Dios se revelaba al pueblo de Israel después de que habían sido liberados de Egipto. ¿Recuerdas estas escenas cuando Dios los guía a través del desierto y en el sol? Si, en el sol del día era una nube que los cubría y les daba sombra, y en la noche era una columna de fuego. Bueno, era una de estas manifestaciones. Ahora, en el Antiguo Testamento, este tipo de manifestaciones solían darse en el templo, pero aquí está haciendo una aparición en un campo abierto, sin estar asociado a algo típicamente religioso, y tal vez esto era un preámbulo de lo que Jesús le iba a decir más adelante a la mujer samaritana en Juan capítulo 4. ¿Recuerdas cuando le dice, mujer créeme que la hora viene, cuando ni en este monte ni en Jerusalén adorareis al Padre? Dios es espíritu y los que le adoran en espíritu y en verdad es necesario que adoren. Esta visión de la gloria de Dios, imagínate la imagen. Están ahí, evidentemente no había electricidad, entonces todo estaba muy oscuro, y de repente se produce esta gran visión y dice en versículo 9 que los pastores tuvieron gran temor. ¿Cómo no? Era algo impresionante. Y entonces el ángel les dice que no había razón para temer, sino que era un mensaje de gran gozo lo que ellos venían a dar, dice versículo 10. Pero el ángel les dijo no teman, porque les trae de buenas nuevas, de gran gozo, que serán para todo el pueblo, porque les ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador que es Cristo el Señor. Ahora no sé si notaste, quiero poner esto como paréntesis, cuando leímos todo el pasaje desde versículo 1, hay un énfasis que hace Lucas y es que ubica el día y el lugar de esta historia. Mira lo que dice versículo 1 y 2. Aconteció en aquellos días que salió un edicto de César Augusto, dice a personas contemporáneas de ese momento, para que se hiciera un censo de todo el mundo habitado. Este fue el primer censo que se levantó cuando Cireño era gobernador de Siria. Lo que Lucas nos está diciendo es que el nacimiento de Jesús no es un mito, no es una fábula. Tampoco dice que Jesús nació en un lugar que nadie puede saber, o que nació en Narnia. Dice que nació en Belén, en una ciudad real, en un tiempo real en el cual quita elementos históricos. Y dice versículo 11, porque les ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador que es Cristo el Señor. El Mesías ha anunciado, o los profetas en el Antiguo Testamento, este gran rey que habría de sentarse en el trono de David, ahora ha llegado y el ángel les dice, esta será la señal, versículo 12. Hallarán a un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. Ahora esto del pesebre también es un elemento importante porque en este tiempo también se acostumbra, ¿no? De hecho yo tenía, tengo un tío, no sé si sea tu tradición, que le encanta poner su nacimiento y le decían por ahí, o veía un meme estos días, estos nacimientos grandotes, grandotes, con un montón de, ¿cómo se llama? musgo, creo que se llama, figuras, y acaban haciéndolo tan grande que decía alguien por ahí, eso ya ni parece nacimiento, parece la Huasteca Potosina, ¿no? Es demasiado. Pero es algo que a muchas personas les gusta, es algo bonito, de paso ahí todavía lo adornan con nievecita, por ahí si lo hacen adentro de la casa, hasta algún aroma rico, un aroma navideño, ducleite, olor manzana canela de Navidad, y pareciera todo sumamente como cómodo, rico, acogedor, pero la verdad es que no es lo que estaba sucediendo ahí. En los días del Señor, como mencionó versículos anteriores, que José y María llegan a este mesón, había estos lugares que se llamaban mesones, donde generalmente las personas se hospedaban en la segunda planta del mesón, en la parte de abajo, ahora sí que era como el patio de los animales, ahí dejaban estacionados a los animales, entonces evidentemente se llenaba del espiércol, de la suciedad que traían los animales, y era un sitio por lo tanto con muy mal olor, muy antihigiénico, y entonces José y María llegan ahí, y como hay tantas personas que se están moviendo ahí por causa del empadronamiento, la ciudad está atestada de personas, y les dicen, ¿saben qué? Ya no hay lugar acá en el mesón, pero solamente hay lugar ahí en el pesebre, y entonces el ángel le dice a los pastores, bueno, ahí van a hallar al rey que ha nacido, en ese pesebre, no va a nacer en el palacio de Herodes, sino que lo van a encontrar en un pesebre rodeado de animales. Ahora es posible que muchos bebés hayan nacido ese día también ahí en Belén, pero solamente Jesús nació en el establo de Belén. Ahora, continúa hablando el ángel, no terminaba de hablar a los pastores, y mira lo que sucede ahí, dice el versículo 13, que aparece una multitud de ejércitos celestiales, dice, de repente apareció con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales alabando a Dios y diciendo, yo me gusta esto porque necesitamos tener un buen de imaginación, ir y buscar el lugar más oscuro, que no haya luz, y ahí estaban los pastores, y de repente se aparecen cientos y cientos de ángeles, y están ahí en los cielos alabando a Dios, y mira lo que dicen en medio de esta noticia de gran gozo, dice el versículo 14, Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace. Ahora es en este canto que los ángeles están haciendo que yo quiero centrarme el día de hoy, que vamos a desmenuzar el día de hoy. Ahora, yo lo dividí solamente en dos elementos, este himno o este pasaje, en respuesta a para qué vino Jesús al mundo. El primer elemento del sermón es que Cristo nació para la gloria de Dios. Cristo vino al mundo para la gloria de Dios, y el segundo elemento es que Cristo vino a traernos paz. Entonces vamos a ver el primer elemento, y es que Cristo nació para la gloria de Dios. Para la gloria de Dios, es importante recordar esto, es hermosa esta época. Ahora hay un montón de elementos que no son necesariamente malos, pero que no apuntan al propósito real por el cual Cristo nació, para que Cristo vino al mundo. El primer elemento, Cristo nació para la gloria de Dios. Versículo 14, mire el punto de la alabanza que están haciendo estos ángeles, y están ahí, mira lo que dice el versículo 14, gloria a Dios en las alturas, gloria a Dios en las alturas, lo primero que hacen es gloria a Dios, y mis hermanos, mis amigos que a lo mejor están de visita el día de hoy, si nosotros queremos realmente apreciar y entender el significado verdadero de la Navidad, debemos tomar la gloria de Dios como punto de partida. La Navidad no se trata, primeramente, escucha bien esto, y no son cosas malas, precisamente de un gran tiempo familiar, de un gran tiempo de regalos, de convivencia, de gran comida, que todo eso, wow, no está mal, y gloria a Dios si Dios te ha permitido esto. Pero el foco primario, vemos aquí en este cántico de alabanza, es la gloria a Dios. Decía alguien, nosotros no podemos apreciar realmente lo que significa el nacimiento de Cristo para los hombres, a menos que apreciemos primero lo que significó este evento para Dios mismo. Cristo nació para la gloria de Dios. Cristo nació para la gloria de Dios. Ahora eso suena súper espiritual, ¿no? Para la gloria de Dios, pero ¿qué significa eso de la gloria de Dios? Porque yo escucho que los cristianos se la pasan diciendo que la gloria de Dios y que debemos hacer todo para la gloria de Dios, y mira lo que dice el primera de Corintios 10.31, entonces ya sea que coman, que deban, o que hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios. Pero ¿qué significa en un sentido práctico? ¿Cómo nosotros podemos glorificar a Dios? Primero, quiero aclarar esto. Dios ya es glorioso por sí mismo. Nosotros no podemos añadir más gloriosidad, si existiera esa palabra, a su ser. Él ya es glorioso por sí mismo. Nosotros no podemos hacerlo más glorioso de lo que Él ya es. Él ya es infinitamente glorioso, pero nosotros sí podemos y debemos hacer todas las cosas, aún las más triviales, buscando dar gloria. De una manera muy sencilla, yo puse ahí, ¿qué es hacer algo para la gloria de Dios? Ponía en pantalla. Hacer algo para la gloria de Dios es buscar hacerlo de una manera en que mostremos lo que podamos mostrar de la grandeza y el valor de Dios. Lo que podamos. Dios es infinito y no podemos mostrarlo todo. Es mostrar con nuestra vida su carácter, su persona. Pero Él es poderoso, Él es infinito. Es hacerlo reconociendo y mostrando que Él vale más que todo lo demás, que Cristo es mejor que cualquier cosa, que Él es digno de todo nuestro ser. Debemos hacer todas nuestras cosas, cuando hablamos de hacer las cosas para la gloria de Dios, es hacer todas nuestras cosas, aún las más triviales, con la intención de dar a conocer el nombre de Dios, de modelar el nombre de Dios, de mostrar en alguna medida aquellas características que caracterizan a Dios y que lo hacen un ser lleno de gloria y supremo. Ahora, ¿Por qué Cristo muestra la gloria de Dios? ¿Por qué Cristo glorifica a Dios? Primer elemento, ya vimos, la gloria de Dios es, en nuestro caso, vivir para su gloria es intentar reflejarlo, modelarle, reflejarle a Él. La palabra de Dios nos habla también de que hay otros elementos que muestran la gloria de Dios, por ejemplo, la creación. Salmo 19, 1 dice, Los cielos cuentan la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Así como la capacidad o la genialidad de un artista se conoce por su obra, de la misma manera Dios se manifiesta a través de todas las cosas que Él ha hecho. Si a ti te gusta el arte, si te gusta apreciar pinturas, creo que hay varios artistas que aunque no seamos precisamente fanáticos del arte, a lo mejor hemos escuchado hablar de algunos, y si es tu caso, a lo mejor has escuchado hablar de Miguel Ángel, de Da Vinci, y tú conoces su increíble capacidad artística ¿Por qué? Por sus obras, por sus obras terminadas. Bueno, lo que el salmista nos está diciendo es que en un sentido infinitamente mayor nosotros vemos un despliegue de la gloria de Dios a través de todas las cosas que Él ha hecho, porque a través de todo lo que Él ha hecho, las huellas digitales de Dios están impresas en toda la creación. Si somos honestos y nos paramos delante de la creación y vemos cómo funciona la naturaleza, cómo funciona nuestro cuerpo, debemos llegar a la conclusión de que hay un Dios, de que hay un Creador, de que es perfecto, de que es poderoso, de que es más sabio, de que es más poderoso, de que Él es digno de nuestro honor, de nuestra alabanza y de nuestra adoración. Ahora, ya vimos como seres humanos estamos llamados a reflejar la gloria de Dios. Salmo 19, la creación muestra la gloria de Dios, pero regresando al tema de Cristo, escucha bien esto y lo puse en pantalla. De todas las cosas que Dios ha escogido para mostrar Su gloria, ninguna es más extraordinaria que el nacimiento de nuestro Señor Jesús. Ninguna es más extraordinaria que el nacimiento de nuestro Señor Jesús. No hay un evento en la historia, no hay una persona ni ninguna cosa creada que se pueda comparar a nuestro Señor Jesús y en este caso, al momento que se estaba suscitando en Belén. Lo que estaba pasando en Belén y lo que celebramos del nacimiento de Jesús es que el Dios Todopoderoso, aquel que creó el universo, aquel que sostiene las galaxias, aquel que es el Alfa y la Omega, decidió asumir una naturaleza humana semejante en todo a la nuestra, excepto que sin pecado. Y todo eso para redimirnos de nuestro pecado, reconciliarnos con Él y en todo eso, Él nunca dejó de ser Dios, aún cuando abrazó esta humanidad y se hizo 100% hombre, Él nunca dejó de ser Dios. Mira lo que dice Filipenses capítulo 2, nuevamente es un pasaje muy conocido y es mi anhelo que podamos verlo con el asombro de lo que este está diciendo aquí. Mira lo que dice Filipenses 2, versículo 5 al 8. Hay, pues, en ustedes esta actitud que hubo también en Cristo Jesús, el cual existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres y hallándose en forma de hombre, lo cual de por sí ya era una tremenda humillación para el Dios de gloria. Jesús continuó este camino de humillación, dice que se humilló Él mismo haciendo su obediencia hasta la muerte y muerte de cruz. Jesús tomó forma de siervo en obediencia al Padre, se humilló hasta la muerte. Mis hermanos, es un suceso glorioso lo que estaba sucediendo en el pesebre, lo que estaba sucediendo en Belén. Te imaginas cuando Jesús, indefenso siendo un bebé, este Rey de gloria que tomó forma de hombre, estaba ahí indefenso en los brazos de María, el Dios Todopoderoso. Ese niño indefenso, ese Dios y hombre, estaba ahí débil, estaba ahí necesitado y pudiendo utilizar sus atributos de Dios como lo veremos durante toda su humanidad, jamás los utilizó y eso por obediencia al Padre, por amor a ti y a mí. Mira lo que decía un comentario respecto a esto. Me gusta esta escena, es como gloriosa. No está ahí en pantalla, pon atención, dice que en ese momento en el que Jesús está naciendo, que pudiéramos imaginarnos siendo amamantado incluso por María, dice, la Deidad vino a ser alimentada por el seno de una joven doncella. La Deidad, Dios mismo está siendo ahí amamantado por el seno de una joven doncella. ¿Puede haber algo más misterioso o más profundo? El bebé termina de comer y suspira. La palabra divina reducida a unos pocos balbuceos. Entonces, por primera vez, sus ojos se fijan en su madre. La Deidad esforzándose por enfocar. Ella toca sus manos pequeñitas y las manos que una vez esculpieron las montañas de Salmo 19, tratan ahora de aferrarse a los dedos de María. ¿Te imaginas esta escena? Y todo eso sin dejar de ser Dios. Y es lo que Pablo está diciendo en Filipenses capítulo 2. Mis hermanos, esto es lo que hace sorprendente la encarnación de nuestro Señor Jesús y su sacrificio. Mira lo que puse en pantalla. Aunque Jesús tuvo en todo momento a su disposición sus atributos divinos, decidió no usarlos. Él decidió no disponer de su omnipotencia para poder hacer lo que Él vino a hacer, morir por nosotros en una cruz. Escuche que alguna vez alguien decía Jesús pudo haberse marchado de este mundo en el primer momento que sintió hambre. ¿Haces tal vez un momento que dices, Hijo de Dios, tengo tanta hambre que sale lo peor de mí y que nadie se me cruce. Y son momentos de debilidad, momentos de cansancio. Bueno, Jesús nunca utilizó ni uno solo de sus atributos como Dios para reducir las exigencias que Dios había colocado en Él por causa de nuestra salvación. Cristo no se defendió. No se defendió. Puse en pantalla esto. Y hay una escena muy clara. ¿Recuerda? ¿Recuerda esta escena? Cuando Jesús está siendo arrestado y entonces Pedro saca la espada y le vuela la oreja y Jesús le dice, Pedro, tranquilo, si yo quiero, ahorita ruego al Padre y Él le envía legiones de ángeles. Pero no lo voy a hacer porque yo vine a cumplir esta obra de redención. Puse en pantalla esto. Cristo voluntariamente se hizo débil para que nosotros pudiéramos ser salvados por medio de Su muerte. Cristo no se defendió porque Él vino a glorificar a Su Padre haciendo Su voluntad y Su voluntad era que Él muriera en una cruz. Ahora sí, regresando a la pregunta, ¿en qué sentido Cristo glorifica a Dios? Gloria a Dios en las alturas, dice el versículo 14. Pero ¿por qué el nacimiento de Cristo glorifica a Dios? Ya hablamos que glorificar se refiere a mostrar aquello que hace glorioso a Dios, aquellos atributos de Dios que le dan fama, honor y gloria. ¿En qué sentido Cristo muestra a Dios, muestra la persona de Dios, el carácter de Dios a través de Su nacimiento? Bueno, el primer elemento por el cual glorifica a Dios es porque Cristo a través de Su nacimiento nos muestra una forma sorprendente de la justicia infinita de Dios. A través del nacimiento de Jesús se nos muestra también la justicia de Dios, que Dios es santo, que Dios es justo. Yo sé que lo primero que viene a nuestras mentes cuando celebramos Navidad y escuchamos del nacimiento de Jesús es el amor de Dios. Y vamos a ver ahorita también esta parte, pero lo cierto es que primeramente ponía en pantalla que Jesús se encarnó porque Dios es perfectamente justo. Jesús se encarnó porque Él no podía pasar por alto de nuestros pecados. Él necesitaba hacer algo al respeto. Había algo que estaba en contra de nosotros. Había esta acta de decretos que estaba en contra nuestra que se menciona en Colosenses capítulo 2. Nuestra relación estaba rota con Dios por causa de nuestros pecados y eso al momento que Jesús nace, Dios está siendo evidente. Yo soy justo, los amo, los cree para mí, necesito reconciliarlos, pero esa justicia necesita ser satisfecha. Ponía en pantalla esto. El amor de Dios no puede ser comprendido en toda su dimensión hasta que no tomamos en cuenta que Dios decidió amar a lo que no era en absoluto digno de su amor, sino de su ira, tú y yo. Mis hermanos, la Navidad, como paréntesis, también hay un rubro de personas, de creyentes que son fechas muy melancólicas. Yo no sé cómo te fue este año, pero a lo mejor ya no está alguna persona que tú amabas. A lo mejor algún proyecto en el cual estaban puestas tus esperanzas, tu identidad, es destruido. A lo mejor tus finanzas ahorita están por la calle y dices ya quiero que pase esto, ya nada más veo gastos. Y muchas veces este tipo de temporadas también podrían llevarnos a sentirnos presionados, solos, desolados, sin amor. Híjole, ahora nadie me invitó, ¿y ahora con quién voy a pasar este tiempo? Y hay elementos que nos llevan muchas veces a olvidarnos de la identidad que tenemos en Cristo. Y yo quiero que recuerdes esto, mi hermano. En la Navidad Dios estaba mostrando su justicia, pero su amor, y ni tú ni yo lo merecíamos. Ni tú ni yo lo merecíamos. De hecho, por causa de su carácter santo y justo, nosotros hubiéramos merecido lo contrario. Pero la Navidad nos recuerda que Dios decidió amar a lo que no era en absoluto digno de su amor, que éramos tú y yo. Es donde dice Pablo en Romanos capítulo 5, versículo 8, que Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. De repente, el pecado es tan natural en nosotros que perdemos de vista lo que significa amar a Dios, lo que significa para Dios amar a personas como tú y como yo. Al final del día nosotros, pues todos, Dios nos estira en gracia, y a través de ese vacilo decimos, bueno, podemos amarnos porque al final todos somos pecadores, pero Dios no entra en esa categoría. O sea, Él no ama de una misma manera que tú y yo amamos. Él ama a aquello que por su naturaleza no sería objeto de su amor. Escuchaba esta ilustración, a mí me encanta, como para entender lo que Dios ha hecho contrario a lo que nosotros hemos hecho con Él. Imagínate que el gobierno de los Estados Unidos dedica mucho tiempo, mucho esfuerzo, muchos recursos en tratar de equipar a su ejército, a las Fuerzas Armadas. Obviamente lo está haciendo con el propósito de qué, pues de pelear por la nación de Estados Unidos, de defender al país, tanto de las agresiones internas como de las agresiones externas. Ahora imagínate que se descubriera que una división completa del ejército está utilizando todos esos recursos que el gobierno de Estados Unidos les ha dado para ayudar a Al Qaeda. Nos está ayudando a planificar un ataque para destruir a los Estados Unidos. ¿Te imaginas eso? Seguramente todos los implicados serían juzgados por alta traición y serían condenados a la pena máxima. Mis hermanos, eso es exactamente lo que el hombre ha hecho con su Creador. Mira lo que puse en pantalla. Dios nos creó, nos equipó para que nosotros pudiéramos vivir para Su gloria. Pero elegimos vivir para nuestra gloria y eso es una terrible traición al Creador. Mis hermanos, nosotros no nacimos por accidente. Dice la palabra de Dios que Él nos creó. Él nos dio una mente para pensar. Él nos da aliento, nos sostiene aún. Cuando nosotros ni sabemos cómo respiramos, Él nos sigue dando aliento. Seguimos teniendo vida. Él nos da la capacidad de entender muchas cosas. Nos da capacidad también de entender quién es Él. Nos da Su palabra. Nos da un corazón para sentir. Nos da habilidades. Nos da una voluntad para decidir. Nos da una boca para alabarle. ¿Y sabes qué hemos hecho con todos esos dones? Que le pertenecen a Dios. Para gloria Suya, los usamos para nuestra propia gloria, para nuestra propia agenda. Y mis hermanos, esta es la esencia del pecado. Algunos definen el pecado, se limitan a decir, el pecador es el borracho, el adúltero, el asesino. Y mis hermanos, la esencia del pecado es esta palabra que se traduce como errar en el blanco. ¿Recuerdas estos tiros al blanco? Y había un punto en el que te daban el... o sea, al que le tenías que dar en el mero centro. Bueno, todos nosotros fuimos creados con un propósito. Tenemos que apuntar ahí. ¿Cuál es ese propósito? Vivir para gloria de Dios. De tal manera que cuando nosotros vivimos para cualquier cosa que no es la gloria de Dios, mis hermanos, nosotros estamos viviendo en una terrible traición para aquel que nos creó. Puse en pantalla esto. Dios nos creó y nos equipó para que nosotros pudiéramos vivir para Su gloria, pero elegimos vivir para nuestra gloria y eso es una terrible traición a nuestro Creador. Romanos 11.36 dice que todo es de Él, por Él y para Él, para que a Él sea la gloria. Isaías 43.7, todos los llamados a mi nombre para gloria mía los he creado, los formé y los hice. De tal manera que cuando quitamos del centro de nuestra vida a Dios y de vivir para Él y vivimos para cualquier otra cosa, estamos viviendo en una terrible traición que a la luz de la palabra de Dios merece la condenación y merece el infierno. Es algo severo lo que ha sucedido con el hombre por causa del pecado. Ahora, ¿qué nos recuerda precisamente la Navidad? Bueno, fue precisamente por esa relación que estaba rota, por esta alta traición, por esta rebeldía que Cristo vino al mundo. Él vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. Mis hermanos, Cristo vino al mundo a reconciliar al hombre con Dios a través de su propia muerte. Cristo asumió nuestra culpa. Regresando a este ejemplo del ejército, supongamos que les hubieran dado la penda máxima y les dan la inyección letal o la silla eléctrica. Mis hermanos, alguien decía, bueno, lo que Cristo vino a hacer en nuestro lugar es el sentarse en esa silla eléctrica que tú y yo merecíamos. Tú y yo habíamos traicionado al Creador y Cristo vino como esa solución. Por eso dice, el castigo de nuestra paz fue sobre Él. Mis hermanos, dice, ahora, no solamente vino a perdonarnos, sino que también vino a restaurarnos de tal manera que nosotros podemos vivir para el propósito que fuimos creados. ¿Cuál? Vivir para su gloria. Hallar gozo en Él y estar satisfechos en Él. Mira lo que dice Cito 2, 14. Él se dio por nosotros, hablando de Cristo, para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo, para posesión suya, celoso de buenas obras. Nos redime, nos rescata, pero también nos limpia y nos hace un pueblo suyo, celoso de buenas obras. Y esa es la noticia que están proclamando los pastores, los ángeles a los pastores, en esa noche, vertículo 11. Porque les ha nacido hoy en la ciudad de David un Salvador. Ustedes que merecían el desprecio, la condenación y el aborrecimiento del Creador por esa traición que habían hecho, Dios les ha dado un Salvador que es Cristo el Señor. Es por eso, mis hermanos, que al pensar en la Navidad debemos recordar la justicia de Dios, pero debemos recordar también la cruz. Debemos recordar que en la cruz Cristo saldó nuestra deuda para que pecadores como tú y como yo ahora podamos gozarnos y deleitarnos en el amor de Dios. Ahí en la cruz podemos ver que Dios es santo, que Dios es justo, pero también que Dios es amor. Y este es el segundo elemento de por qué Cristo glorifica a Dios a través de su nacimiento. Ya vimos que es a través de que muestra su justicia. Pero ahora vemos que Cristo glorifica a Dios a través de su nacimiento porque es un despliegue extraordinario de la bondad, la compasión, la misericordia y el amor de Dios. ¿Recuerdas este versículo de Juan 3.16? Dice Porque de tal manera amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito para que todo aquel que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Mis hermanos, cuando recordamos la Navidad, la encarnación de Cristo debemos recordar que Dios el Padre amó tanto al mundo que estuvo dispuesto a desprenderse de lo que él más ama para salvar a este mundo traidor. Para salvar a este mundo que le dio la espalda, que lo traicionó. ¿Te imaginas qué clase de amor es este? Ponía en pantalla tal inmensidad del amor de Dios que él pudo vencer su propia enemistad hacia el pecado, rebeldía y traición del mundo y entregar lo que él más ama por este mundo que lo aborrece. Porque de tal manera amó Dios al mundo y hemos dicho esta palabra mundo no habla de la población de personas sino habla del sistema de valores que está en contra de Dios. Y dice de esa manera dando a lo que él más amaba por ese mundo que le aborrecía es que Dios amó al mundo. Ahora, hasta este punto hemos dicho que la Navidad supuestamente se celebra en nacimiento y digo supuestamente no porque no sea así sino porque a veces nos dejamos llevar por otro tipo de cosas periféricas pero supuestamente estamos celebrando el nacimiento de aquel que vino al mundo para redimirnos del pecado para que nosotros pudiéramos cumplir el propósito de nuestra existencia. ¿Cuál propósito? Glorificar a Dios y gozar de él por siempre. Pero también la Navidad nos recuerda que evidentemente algo anda mal en el hombre por eso era necesario un Salvador porque en lugar de vivir para su gloria hemos decidido vivir para nosotros mismos. Ahora, ¿cómo se supone entonces que deberíamos enfrentar la Navidad? Bueno, recuerda esto, recuerda lo que Cristo hizo. Si somos honestos este tiempo de la Navidad fin de año es uno de los tiempos que más se apela también al egoísmo humano. Poco se recuerda la gloria de Dios poco se recuerda la necesidad que teníamos de un Salvador y el gozo y la alegría y la identidad que tenemos ahora independientemente de nuestra condición o situación financiera familiar, de salud de la identidad que por gracia tenemos como hijos amados y todo eso mis hermanos como lo hemos visto requirió de una gran muestra de amor y una dolorosa muestra sacrificial en la cruz. Así que debemos recordar que el papel protagónico mis hermanos es Cristo Él creó todo para su gloria. Puse en pantalla esto me gusta esto porque es algo que recuerda también la Navidad, estaba mostrándonos su justicia pero también su amor y vemos cómo este Dios Santo, cómo es que este Dios Santo pudo reconciliar a esta humanidad o aquellos que han creído en Él siendo pecadores sin perder su santidad. Cristo vino para la gloria de Dios. Él vino para hacer brillar como nunca antes la melodiosa armonía que sólo puede producir la combinación de la justicia y el amor de Dios. Mis hermanos en Cristo estaban mostrando estos dos elementos lo dice mejor Salmo 85.10 Hablando de Cristo, la misericordia y la verdad se han encontrado. La justicia y la paz se han besado. La justicia y la paz se besaron, se unieron ahí Cristo nos vino a dar paz sin pasar por alto la justicia de Dios sino más bien cumpliendo la justicia que para nosotros no es imposible y por lo tanto ser reconciliados con Dios por la paz que hay en Cristo. Y esto nos lleva al segundo elemento del sermón. Ya vimos primero que Cristo vino para la gloria de Dios para mostrar específicamente en este pasaje la justicia de Dios pero el amor de Dios pero también vino para traernos paz y esto es importante mi amigo si estás aquí puede ser que digas híjole mi vida está cerrando este año en una condición que no sé ni para dónde voy. Ya le calé por un montón de cosas, de personas hasta de filosofías o ideologías creo que puedo reconocer que necesito a Dios pero cómo me acerco a Dios si he sido terrible, si tú conocieras y yo sé que pues para acercarme a Dios o me han dicho pues yo tengo que ser muy buena persona y si tú supieras Dios lo sabe y Dios te trajo aquí y Dios quiere que estés en paz con Él y Él proveyó el medio a través de Cristo mira lo que dice versículo 14 nuevamente Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él te complace dice les ha nacido hoy en el versículo 11 porque les ha nacido hoy te fijas que el ángel no le dice a los pastores les tengo una gran noticia le nació un niño a María no la buena noticia le está diciendo pastores a ustedes les nació ese niño y a ustedes también creyentes cientos de años después para nosotros el día de hoy debemos apropiarnos también de esto el Señor recuerdas esta profecía le he estado leyendo extraordinariamente porque necesitamos recordar esta Isaías 9.6 porque un niño nos ha nacido un hijo nos ha sido dado y la soberanía reposará sobre sus hombros y se llamará sobre su nombre admirable, concejero, Dios poderoso, Padre eterno es admirable que estaba en el pesebre es admirable, consejero, Dios fuerte, Padre eterno príncipe de paz y nos ha nacido a todos los que creemos en Él Él es el príncipe de paz, vino a traer paz y dice en el versículo 7 que el aumento de su soberanía y de la paz no tendrán fin no tendrán fin, el aumento de su soberanía y de su paz no tendrán fin el Señor Jesús vino a ofrecer una paz verdadera y permanente porque es una paz que no depende de nuestras circunstancias no, no depende de cuánto tenemos, no depende de nuestro estado económico, no depende de nuestra salud, no depende de nuestros estudios no depende, es una paz que depende del hecho de que nosotros hemos sido reconciliados con Dios, hermano recuerda esto cuando pienses en la Navidad, has sido reconciliado con Dios eres hijo amado, tu pasado está perdonado tu presente tiene un sentido y tu futuro está asegurado dice su soberanía no tiene fin soberanía habla de este tema de que Dios está en control de manera concreta Dios está en control de todas las situaciones de nuestra vida tu vida no es un accidente, tu vida no es híjole ahora que sucederá, si eres hijo de Dios tu vida está en manos de Dios y es un Dios bueno un Dios que te ama y aun cuando estabas en tu peor momento en rebeldía y en esta alta traición, Él te estaba amando enviando a Cristo a través de un pesebre para reconciliarse con Él ahí en el madero tienes un futuro que está en la vida de aquel Padre bueno es esa paz con Dios que nos da paz también míralo que hermano 5-1 me gusta esta parte que decía eso, a lo mejor dices bueno yo quiero acercarme a Dios pero la verdad es que he sido muy malo ninguno de nosotros fuimos reconciliados con Dios por ser bueno es más, ni aun siendo creyentes sería posible que por nuestras obras pudiéramos ser aceptados por Jesús porque aun nuestras buenas obras muchas veces están permeadas de malas motivaciones y somos bien honestos muchas veces aun las buenas intenciones terminamos haciéndolas buscando nuestra propia gloria, pero mis hermanos este Dios de paz envió a Jesús al mundo a morir por nuestros pecados para que podamos ser perdonados y declarados justos en la presencia de Dios únicamente por los méritos de Cristo Romanos 5-1, por tanto habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo nuestra justificación, el poder ser aceptados delante de Dios y también mi amigo te repito si es tu punto que dices que mi pasado es terrible, como podría yo pararme delante de un Dios Santo cuando abrazas a Jesús cuando dices no hay nada bueno en mi pero confío en tu obra de salvación y entonces eres justificado por la fe en Él, lo hemos dicho, la salvación es por obras pero no es por nuestras obras es por las obras de Cristo, a través de lo que Cristo hizo, de su muerte en el madero la ira de Dios fue removida, nuestra rebeldía fue conquistada para que ahora podamos disfrutar de esa paz con Dios, ya no ser enemigos ya no estar avergonzados delante de Él, sino más bien andar en una relación de confianza gracia y amor por lo que Cristo hizo a favor nuestro, ya no más enemigos sino hijos amados, ahora esto es en relación con Dios pero también la paz que Cristo trae mi hermano es una paz que podemos experimentar de manera vertical en el aquí y en el ahora es una de las cosas extraordinarias y me encanta porque Cristo te salva viene en situaciones complicadas y miras atrás y dices híjole, sin Cristo me hubiera derrumbado en esto y ves como Dios te da esta paz que sobrepasa todo entendimiento porque entendemos que Él está en control de nuestras vidas, Cristo dijo a sus discípulos la noche antes de su crucifixión Juan 14, 27, la paz os dejo mi paz os doy mi paz os doy, la noche antes de ser crucificado Cristo no estaba ansioso no estaba angustiado sino que le dice mi paz os doy, yo no os la doy como el mundo la da, no se turbe vuestro corazón ni tenga miedo, no se turbe vuestro corazón, yo estoy en control de lo que va a suceder y ese mismo Salvador que estaba prometiendo a esos discípulos que Él estaba en control y que por lo tanto podían estar en paz ese mismo Salvador nos ha nacido a nosotros como creyentes, lo que hemos visto en el versículo 11 de Lucas, mi amigo cuando estamos lejos de Dios o separados de Dios es imposible disfrutar de una paz real, de una paz permanente, puse en pantalla esto, no se puede disfrutar de paz mientras estemos separados del Dios de paz del príncipe de paz y puedes probarle con sustancias alcohol, ansiolíticos bueno me voy a echar una para dormir y queremos obtener nuestra paz de cosas que son paliativos, ah que si cambio de trabajo voy a tener paz, sabes que el tema es que tu corazón no lo dejaste en ese trabajo, sigues llevándolo ahí, sigues llevándolo al otro trabajo y tu corazón está diseñado para ser saciado únicamente por el príncipe de paz y tu puedes cambiar de matrimonio, de carrera, de trabajo puedes estar cambiando y cambiando y creyendo que ahí encontrarás la paz pero separado del príncipe de paz es imposible tener una paz permanente y no solamente paliativos, poní en pantalla esto mientras continúes viviendo para tu propia gloria en vez de vivir para la gloria de Dios, es completamente imposible que experimentes paz real y permanente y eso aplica en tu matrimonio, en tu trabajo, en tu agenda en tus planes, leí ayer estoy leyendo un libro de matrimonio porque lo necesito un buen y hablaba precisamente de este tema en el matrimonio la mayoría de los conflictos o todos los conflictos surgen porque buscamos nuestra propia gloria en lugar de buscar la gloria de Dios sirviendo y sacrificándonos por la otra persona cuando comienzas a entender que tu matrimonio no está diseñado para que la otra persona te dé esta paz, te dé esta felicidad te dé esta dicha que solamente Cristo puede dar y lo veas más bien como un medio en el cual tú puedes darle gloria a Dios sirviendo, amando, sacrificándote estimando como superior al otro y viendo por el otro antes que por lo tuyo la gloria de Cristo cuando no hacemos eso, mis hermanos, no habrá paz no habrá paz, por eso necesitamos permanecer en el Dios de paz mira lo que dice Romanos capítulo 15, vertículo 13 me encanta la bendición que da Pablo aquí dice, y el Dios de la esperanza los llene de todo gozo y paz en el creer para que abunden en esperanza por el poder del Espíritu Santo y el Dios de la esperanza los llene tenemos un Dios de esperanza ahora cuando la Biblia habla de esta palabra llenar de los llene, se refiere a algo que nos controla que nos controle los llene de todo gozo y paz en el creer para que abunden en esperanza por el poder del Espíritu Santo entonces es por medio de la fe de este Salvador que vino es Cristo que fuimos reconciliados con el Dios de paz, pasamos de una condición de ser traidores, enemigos, extraños ahora ser hijos amados pero también lo que está diciendo Pablo es que por medio de esa misma fe, nosotros podemos ahora ser llenos de gozo y paz, dice ahí en versículo 13 de Romanos 15, podemos ser llenos de gozo y paz en el creer también habla de este tema de creer, de abrazar las promesas de Dios, por eso la importancia de pasar tiempo en la palabra de Dios, ahora no quiero tampoco engañarte y lo hemos visto ahorita que estamos viendo Efesios capítulo 6 no te estoy vendiendo o te estoy hablando de un tema de aquel que ha creído en Cristo vive siempre en paz y entramos como un estado no es algo místico número uno, que pasar tiempo en su palabra, conocer sus promesas y como dice Isaías, tú guardarás en completa paz aquel cuyo pensamiento en ti persevera, en tu palabra habita, en tus promesas y por otro lado, poní en pantalla aquellos que tienen paz con Dios serán continuamente atacados para que dejen de disfrutar la paz de Dios a lo mejor tú eres creyente, has entendido tu identidad delante de Cristo, pero estás llegando a este tiempo y dices, yo no estoy como tan disfrutando de tanta paz y a lo mejor estás siendo distraído estás habitando en otras cosas que no son las promesas de Dios y estás bajo ataque, como veíamos en Efesios 6 de ataques del maligno, de tu carne, del mundo, de lo que sea pero debemos estar conscientes de esto y también pelear a través de las promesas, de la palabra, de la oración para cerrarnos a esta paz de este príncipe de paz que debemos hacer entonces, cuando vienen estos momentos de ansiedad, de amargura, mira lo que dice Pablo en Filipenses 4, 6, por nada estén afanosos no, pero es que esta situación esta situación sale del, a veces somos así o sea, así dice que nada, pero es que esto si es más aquí dice, por nada antes bien en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, tampoco dice pues quédate ahí viendo el techo y dándole vuelta a sus pensamientos antes bien en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios y la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús dice, en lugar de afanarte ven delante de Cristo, pasa tiempo con Él Él es un Padre bueno, que te ama que está en control de tu vida, su soberanía no tiene fin recuerda que Él te cuida recuerda que cuando tú eras un enemigo y un traidor Él estaba llamándote en Cristo, como ahora que eres su hijo has comprado la idea que Él se ha olvidado de ti finalmente, vamos a entrar a este último punto y me encanta hay un detalle ahí que no podemos pasar por alto y es esto, poní en pantalla los ángeles dan gloria a Dios porque ha traído paz en Cristo sobre aquellos que Él ha hecho soberanamente objeto de su favor mira lo que dice versículo 14 gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él te complace la reina Valera dice, buena voluntad para con los hombres ¿alguna vez escuchamos rápido esto? no sé si te ha pasado y pareciera que dice, gloria a Dios en las alturas y paz a los hombres de buena voluntad como y paz a los hombres buenos, bonachones amorosos, generosos con esos Dios es bueno, los de buena voluntad si lo leemos detenidamente y me gusta esta nueva Biblia de las Américas, porque no dice ni siquiera buena voluntad para con los hombres, sino que dice en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace, en quienes Él decide extender su favor escucha esto mi amigo todas las religiones del mundo presentan al hombre tratando de alcanzar el favor de Dios, de ganarlo por medio de obras, de servicio, caminar kilómetros rezos, dinero, compartir, dar pero solo el cristianismo nos muestra a Dios alcanzando al hombre por su gracia solamente el cristianismo, porque los ángeles no están exaltando la buena voluntad de los hombres están exaltando la buena voluntad de Dios mi amigo, mira lo que puse de no haber sido por la iniciativa de Dios encarnarse, venir a nacer en un pesebre en esas condiciones, de no haber sido por la iniciativa de Dios y su obra completa de salvación porque eso era el nacimiento únicamente pero Cristo vivió también la vida perfecta de obediencia que ni tú ni yo podríamos vivir si no hubiera hecho eso, sino que pagó el castigo que tú y yo teníamos que haber pagado en la cruz si no hubiera hecho pero eso, no habría evangelio que predicar ni salvación que celebrar la salvación es del Señor totalmente Él la diseñó, Él la llevó a cabo y Él nos preservará hasta el día que estemos con Él ¿y por qué lo hace? por su pura gracia, en quien Él se complace escucha bien esto Dios no nos salva por nada bueno que haya en ti o en mí dice la palabra de Dios que Él desde la eternidad pasada por una razón que es su voluntad y es su gracia Él escogió a personas sobre las cuales derramar su gracia abrir sus ojos y entonces extender su compasión, su misericordia y mi hermano si tú eres creyente si tú eres creyente tú eres uno de esos escogidos y eso es suficiente no solamente para hoy sino para cada día vivir y decir gracias Señor gracias Padre por otro lado mi amigo este regalo también está para aquellos que no lo han abrazado ya ves que ahorita es la época de los intercambios y luego ya aunque pongas tope de dinero ya ni eso es garantía que te vaya a tocar algo que te convenga ¿no? ayer decía una prima en un grupo nos decía ¿alguien le gusta Harry Potter? porque pues es que me regalaron una y a mí ni me gusta pues sí pero le valió y a eso te arriesgas a veces en los intercambios te tocan cosas que no te gustan ahora mi hermano, mi amigo la palabra de Dios nos muestra un intercambio glorioso un intercambio en el que solamente es ganar, ganar, ganar y es reconocer tu pecado traerlo delante de Dios y por fe abrazar su vida justa y la muerte que tú merecías en su lugar para entonces abrazar esta salvación alguien decía por ahí ¿qué es lo que hicimos nosotros en la salvación? solamente aportamos el pecado Cristo hizo la salvación completa, mira lo que dice 2 Corintios 5.21 que alguien ha definido este versículo como este glorioso intercambio dice al que no conoció pecado hablando de Cristo Dios lo hizo pecado por nosotros no que Cristo pecó fue colocado en la cruz, cargó con todos nuestros pecados no sus propios pecados, Él no pecó para que fuésemos hechos justicia de Dios en Él ese es el intercambio, Cristo toma nuestros pecados Dios derrama la ira sobre esos pecados que tú y yo merecíamos y por la fe en Él mi hermano, somos revestidos de la justicia perfecta de Cristo, de ese que no conoció pecado de tal manera que por la fe en Jesús pasamos de ser enemigos, hijos de ira y merecedores de esa ira a ser más bien hijos amados, perdonados que Dios nos ve como si estuviera mirando a Cristo porque nos reviste de su justicia, nos ve como si nunca hubiéramos pecado y como si siempre hubiéramos obedecido es como no decir, gloria a Dios, gracias por Jesús gracias por venir y cumplir lo que para mí era imposible tú lo hiciste posible por tu gracia y es por su gracia porque Él decidió complacerse en quien Él quiso mi hermano y eso es algo que yo quiero recuerdes el día de hoy, estas buenas nuevas de gran gozo, que tu identidad no la definan las fiestas la familia, el dinero, la comida gloria a Dios disfrútalo si lo tienes, gloria a Dios toda buena dadiva y don perfecto también viene de Dios, disfrútalo pero probablemente no es una navidad para ti este año como el mundo la vende recuerda quien ya eres en Cristo recuerda quien eras y ahora quien eres en Jesús y recuerda que eres un hijo amado que eres perdonado y todo eso únicamente por su gracia Señor te damos muchísimas gracias por tu palabra te damos gracias porque ciertamente es glorioso recordar esto Señor y en nuestro en nuestra naturaleza somos dados a ponernos como protagonistas Señor muchas veces a creernos buenos o merecedores y no lo decimos como tal pero nos amargamos cuando las cosas no están saliendo como nosotros pensamos Señor y creemos que te has olvidado de nosotros creemos que nos debes a algo Señor y perdemos de vista este gran gozo y paz que nos has regalado en Cristo Señor padre te quiero dar gracias porque como creyentes y a la luz de lo que vemos en tu palabra es una obra que solamente tu puedes hacer el darnos fe, el abrir nuestros ojos el conocer nuestra condición de pecado y abrazar por la fe tu obra de redención tu elección desde antes de la fundación del mundo pero tu encarnación que es lo que celebramos estos días pero padre también tu vida justa tu muerte en la cruz y la atención que sella totalmente porque tu venciste la muerte Señor el que ese sacrificio fue suficiente para perdonar nuestros pecados y ahora Señor podamos tener paz contigo Señor gracias porque esta paz contigo no solamente es una paz en cuestión de identidad de ser tus hijos y gloria a Dios porque eso es lo más glorioso Señor somos hijos tuyos pero también ahora Señor por medio de tu soberanía que no tiene fin y que descansamos que nuestra vida está en tus manos Señor padre podemos también andar en paz Señor yo te ruego que guíes nuestros corazones a esta verdad y como hablábamos hace unos momentos hay una lucha constante en robarnos esta paz y este deleite de hallar satisfacción y gozo en ti Señor y querer buscarlo y derivarlo de otras cosas padre fortalécenos llénanos con tu palabra Señor y sobre todas las cosas Señor permítenos no solamente hoy sino cada día vivir para tu gloria Señor no hay nada fuera de ti tú lo dijiste de una manera concreta en Juan 15.5 separados de mí nada podéis hacer pero tú nos has traído aquí Señor para reconciliar el enemigo que estaba lejano de ti que por vergüenza nos acercaba por culpa tú hoy has extendido y mostrado el camino que es Cristo Señor para ya no salir más como enemigo o avergonzado sino padre con un gozo terminado por tu amor y como creyente Señor ayúdanos a pelear también esta buena batalla Señor de derivar la paz de quien somos en ti Señor gracias por el regalo inmerecido de la salvación Señor y gracias porque no solamente nos salvaste y nos dejaste a la deriva Señor sino que tú estás con nosotros todos los días todos los días nos das gracia todos los días eres paciente todos los días nos das amor Señor bendito seas padre te damos toda la honra y toda la gloria en el nombre de Jesús Amén somos una iglesia que confía camina y comunica a Cristo acompáñanos domingo a domingo te esperamos