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EP-5 MIRIAM RAMIREZ

EP-5 MIRIAM RAMIREZ

MaykaMayka

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Gran conversación con Dra. Míriam Ramírez, científica con doctorado en bioingeniería que el día que ella quiera cambiará nuestras vidas. Nos cuenta por qué dejó de ser científica. Ella es gran persona y gran profesional y sobre todo una amiga mía. Grabamos con videollamada ya que ella vive en Huelva y yo estoy en Barcelona. Gracias por tu tiempo. Sígueme en audio.com/mayka, en iVoox; ASÍ LO VEO A PARTIR DE LOS 40 (https://go.ivoox.com/sq/1803019) y en Instagram; @asiloveoapartir_delos_40

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Transcription

The transcription is a conversation between two friends, one of whom is interviewing the other. They discuss various topics, including their friendship, their experiences living in different places, the guest's academic background in environmental science and bioengineering, her research on cell reprogramming, and her time working in Miami. The guest shares her experiences and challenges, including not being able to work with human embryonic stem cells in Spain due to government restrictions. She also mentions her adventures and the support she received from friends and colleagues. Overall, the conversation highlights the guest's diverse experiences and her passion for stem cell research. Hola, ¿qué tal? El nivel de la charla de hoy va a ser tan elevado que no sé si darle a grabar y que ya fuera hacia tu entrevista. Hoy tengo como invitada a alguien muy especial. Desde Huelva, la doctora Miriam Ramírez. Miriam, Miriam, ¿estás ahí? En videollamada, espero que se escuche bien. De fondo se escucha a mi perra pasearse. Le voy a quitar un peluche que tiene, espera. La doctora Miriam Ramírez, amiga que estudió conmigo en la EGB. Fuimos también al mismo instituto, pero ahí creo que no coincidimos, ¿no, Miriam? No, no, no, ahí no coincidimos, todavía estamos en la clase. Además hemos practicado taekwondo juntas durante muchos años en el parera. ¿Echas de menos el taekwondo o qué? ¿Tú qué crees? Pues claro. ¿Cuántos años estuviste haciendo taekwondo? Pues desde los 7 hasta los 15, o sea, bastantes años. Llegué a cinturón azul, ¿te acuerdas? Un día te voy a tener que entrevistar ya a ti, Maika. Eso lo pasaremos a otro podcast. Miriam, ahora vives en Huelva. ¿Qué tal por Huelva, aparte de mucho frío? Pues por Huelva muy bien. A ver, es una vida totalmente distinta. Ahora supongo que saldrá el tema de mi cambio de la ciencia a la educación secundaria, pero la verdad que bien, bien, aquí se vive bien. Además estoy con la familia, así que bien. Oye, Miriam, has estado viviendo por casi toda la geografía española. También has estado... Mundial, sí, mundial también. Has estado viviendo también en Miami, en Bruselas... Al final has quedado en Huelva, vamos. ¿Qué tal es eso de vivir en tantos sitios? ¿Habrás conocido a muchísima gente muy distinta? Pues la verdad que es una experiencia muy bonita, muy enriquecedora. No sé, se aprende muchísimo. Y no sé, como dicen en Barcelona, roda el monitor en Albornoz, ¿no? Hay que viajar por el mundo y al final vuelve a tu casa, vuelve a tu tierra. Tú sabes que mi tierra realmente no es esta, mi tierra es Barcelona. Yo soy andaluza de adopción. Pero, no sé, la verdad que me ha costado porque es una ciudad pequeñita, nada que ver con los sitios en los que he estado viviendo. Y me ha costado la adopción, sobre todo más de estar 14 años dando vueltas por el mundo, bandera científica, pero bueno, ya estoy integrada, ya tengo mi vida más o menos encarrilada y bien, bien. Miriam, estudiaste Ciencias Ambientales y te doctoraste en Bioingeniería en el 2007, no sé si lo estoy diciendo bien. Efectivamente, sí, sí, efectivamente. No tengo ni idea de todo lo que acabo de soltar, que... Explícamelo, por favor. Bueno, pues hice la carrera de Ciencias Ambientales. De eso supongo que sí que te sonará, ¿no? Es como una, es una carrera que aglutina distintas disciplinas, desde biología, química, economía, geografía, derecho administrativo, derecho penal, todo relacionado con el medio ambiente. La verdad que a mí me hubiera gustado más haber estudiado la rama sanitaria, la, digo, sí, pues bioquímica me gustaba muchísimo, farmacia también, pero el caso es por distintos motivos, decidí hacer Ambientales, pensé que tendría más futuro por ser una primera promoción y al final la vida me llevó a trabajar en Biomedicina. De hecho, me doctoré en Bioingeniería, como tú bien has dicho, y fui, hice la primera tesis en España en reprogramación celular. Esto es las madres, vamos. Y la verdad que, no sé, que era experiencia muy bonita. A mí la verdad que era un tema que me llamaba muchísimo la atención, por eso contacté con el doctor Bernal Soria y me aceptó en su laboratorio y allá que fui, a Alicante, y fue como realicé la tesis doctoral allí. Fue una tesis tionera. Los resultados no fueron los esperados, la verdad, pero es que era una tesis que era la primera vez que se realizaba en España y probablemente de las del mundo. Se tiene en cuenta que el premio Nobel que dieron, o sea, la persona a la que dieron el premio Nobel por la reprogramación, por el tema de reprogramación en células madres, fue Yamanaka por la CPS, que trabajé en células madres, que es una de las primeras tesis en España, en células madres embrionarias de ratón. En aquella época no se podía investigar en células madres embrionarias humanas porque había un gobierno aquí en España, el de Aznar, que era más conservador, estaban en contra de la extrusión de los embriones, que era la única manera que había en aquella época de conseguir las células madres trayendo los embriones humanos. Entonces, a mi director de tesis le prohibieron realizar investigaciones en España con las células madres embrionarias humanas. Tuvimos que hacer las tesis, o nuestras investigaciones, con células madres embrionarias de ratón. Tuvo que trabajar en Singapur en este tema para poder ir adelantando y ir haciendo trabajos pioneros con todas las madres embrionarias humanas. Y bueno, ya no me quiero enrayar más, porque no sé si la gente se va a perder que yo me pongo a divagar y divagar sobre mi tema que me encanta, las células madres, que me apasionaba trabajar en investigación, tú lo sabes, que yo de pequeñita apuntaba maneras. Oye, te voy a contar una cosa. Bueno, quiero decir aquí que si no es por ti, no apruebo física y química del cole, eso es para dejar claro mi nivel. Tía, te podrás creer... Bueno, me dejaste todos tus apuntes y en la mudanza te juro que me aparecieron tus apuntes, tía. ¿De verdad? Te lo juro, tía. Tengo muchísimas cosas guardadas del cole y tengo tus apuntes de física y química que me dejaste para probar. Te lo juro, tío. ¿Te acuerdas que la profesora afina? ¿La afina? Joder, tío, sí. Madre mía. Oye, Miriam, estuviste trabajando en Miami, que ahora quiero que me expliques, ¿cómo fue el irte allí? ¿Ya te fuiste con un contrato de trabajo? ¿Te fuiste porque te reclamaron? ¿Fuiste a la aventura? ¿Cómo fue el tema de Miami? Pues mira, fue un contrato y fue a la aventura. Yo creo que la entrevista se va a alargar porque si te cuento cómo fue todo, vas a confundir. No, un poquito. Mira, te cuento un poco cómo fue. Yo estaba buscando laboratorios en arterio y pólvora, ¿vale? Todavía no había leído la tesis, estaba pendiente de leerla y contacté con un laboratorio. Bueno, la historia es bien enigma, pero voy a abreviar porque es un poco increíble lo que me pasó. El caso es que contacté con un investigador de allí, de la Universidad de Miami, de la Radio Research Institute, ahí Juan Domínguez Vendana, y me dijo que... Dice, es que es increíble, me ha llegado tu currículum el mismo día en el que me han comunicado que no me dan un proyecto, pero es que tu currículum es perfecto para ese proyecto y me lo han denegado. Dice, mira, esto es una señal. Me dijo el hombre, yo no te puedo contratar, pero voy a hablar con una colega mía que seguro que está interesada en contratarte. Y así fue como acabé en Miami. Entonces me ofrecieron un contrato, querían que me incorporara allá. Eso fue para el 8 de diciembre, el Día del Inmaculado. Querían que me incorporara justo al pasar a Navidades y yo tenía que leer la tesis el 23 de febrero, perdón. Entonces yo dije, mira, para irme y volver al mes me quedo en España, leo mi tesis y ya me incorporo una vez que haya leído mi tesis y a doctora, me dijeron que sin problema. Total, que yo llego, esta es otra aventura, yo llego a Miami y yo no tenía sitio donde quedarme esa noche. Vale, yo fui a la aventura. Total, bueno, siempre he sido un poco inconsciente, ya no tanto, ¿no? Pero antes era un poco inconsciente. Y yo me planté en Estados Unidos, en Miami, sin tener un sitio donde dormir esa noche. Bien, bien. Y total, que bueno, me recogí una chica del aeropuerto de mi futuro grupo y resulta que la chica, yo no sabía ni que era una chica, pues llamaban ahí y digo, esto será un chico, pero me da vergüenza preguntarle a mi jefa que no le dije nada. Total, que me recoge la chica y me dice, mira, que en mi casa no te puedes quedar porque yo me voy ahora a Boston a correr una carrera. Me había contactado con una chica cubana, una señora cubana, que tenía una casa que alquilaba habitaciones a médicos residentes, gente que estaba haciendo rotaciones, en el hospital donde estaba la universidad, a mi facultad, cuarta de medicina. Y me dijo, mira, yo ahora mismo no tengo hueco. Ya había contactado con tiempo, pero había tardado en decidirme y cuando me quiso decidir ya no tenía hueco. Y me dijo, yo no tengo sitio, pero no te preocupes que tú en la calle no te quedas. Algún sitio apañaremos. Total, que yo llego allí, me buscó una habitación que era el espacio de la cama y poco más, es que no tenía ni un pasillo, o sea, el espacio de la cama. La habitación era un buchitril, hasta la noche, y fue buenísimo, porque el día que yo llegué, yo llegué y me pongo a llamar a todo el mundo, que decía a mis padres, que decía a mi jefa, oye, que ya he llegado. Vale, vale, mira, muy bien. Que ya veo una española, y me dice, española, genial, que ya has llegado. Vale, sin problema, mañana salimos de fiesta. Y yo, bien. Y total, lo primero es lo importante. Estaba ya integrada, y súper bien, súper bien, la verdad. Una experiencia maravillosa, y muchísimo, y luego a nivel personal, genial, la verdad que sí. La verdad que una experiencia muy bonita. ¿En qué estuviste trabajando allí? Una vez que ya estabas en el laboratorio, ¿qué es lo que hacías allí? ¿Allí descubriste algo? ¿Tu equipo descubrió algo? Te comento, yo llegué y tenía que trabajar con una nefróloga, la doctora Alexa Fornoni, ¿Qué es una nefróloga? Es una médico que trabaja en riñón. Vale, entonces ya estábamos en un instituto de investigación en diabetes. En la University Research Institute Instituto de Investigación en Diabetes. Y esa chica me puso a trabajar en un proyecto para ella, un proyecto que yo luego me enteré que todavía no lo habían financiado. Pero es que cuando me enteré, que me llamó a su despacho, me dijo que era para decirme a los tres meses de estar allí que no lo habían financiado. Bien. Y yo había ido desde España, había ido desde España a Miami para trabajar en ese proyecto. Durante esos tres meses, ¿tú estuviste cobrando un sueldo, una nómina? Sí, estuve cobrando un sueldo, pero de repente me dijo que había dinero para pagar mi sueldo, que por eso no me pude pagar, pero que no podía seguir trabajando en un proyecto que no había sido financiado. Y me enteré a los tres meses. Entonces la mujer, la verdad, que se puso a llorar. O sea, no le había hecho nada, solo que se había precipitado. Pero a mí me habían hecho una faena. Entonces al final me ubiqué en otro proyecto, en otro grupo, y empecé a trabajar con células madres del líquido amniótico. He estado trabajando con mesenquimales, con progenitores hepáticos, estuve trabajando con células madres del líquido amniótico, trabajé con células madres de la menstruación y alguna más, no sé, con un montón. Con las Miami Cells, que son similares a las mesenquimales. Estuve trabajando con muchísimas células madres, incluso de placenta. Hice algo, si no recuerdo mal, algo hice. Y la verdad que muy bien. La verdad que muy bien. Lo único que a ver, muy bien al principio. Muy bien al principio. No me quiero darte más detalles, pero a ver, luego al final, ¿cómo te diría yo? Las cosas no eran como yo esperaba, todo esto era muy interesante, pero no resultó como yo esperaba. Total que de repente me salió un trabajo en España y me volví. Sin esperarlo, me salió un trabajo en España y me volví. Una decisión muy difícil, pero como las cosas no estaban yendo como yo esperaba... ¿Pero qué significa que las cosas no estuvieran yendo como tú esperabas? Pues que a mí me habían ofrecido una cantidad cuando yo me fui a Miami, que me fui sin cobrar, es que fui, que no sabía, yo iba sin padrino, ¿vale? Bernat, Bernat Soria, era mi director de tesis, pero allí nadie me asesoró. Nadie se preocupó por mí, yo tampoco pedí ayuda, entonces pues yo fui a la aventura total, Maika, a la aventura total. Entonces a mí nadie me dijo que yo antes de cambiarme de país tenía que tenerlo todo atado. A mí nadie dijo nada, yo no lo sabía, me fui a la aventura confiando en que todo iba a ir bien. Y resultó que tardaron dos meses en pagarme, o sea, tuve que tirar de ahorros a punta pala, luego resultó que en caso de lo de mi jefa, que no le había financiado el proyecto y ya me había contratado, yo ya estaba trabajando en un proyecto que resultó que no le había financiado, yo ya estaba pendiente de una beca, de un contrato, perdón, de un proyecto que cuando se resolvió no se lo dieron. Entonces yo acabé en un grupo y resultó que a mí me habían ofrecido más cantidad de la que luego me pagaron, entonces a mí no me salían las cuentas. Yo lo pasaba mal, económicamente lo pasaba mal. Luego resultó que a mí había habido gente que me había aconsejado que no me fuera con ese ejemplo, porque ese hombre pues no estaba pendiente, el hombre era buena persona, pero era el subdirector del DIY, del centro en el que yo estaba y tenía muchas responsabilidades. Entonces pues no estaba muy pendiente de los productos. Entonces le venía yo genial, porque yo era experta en células madre, de las pocas expertas que había en aquella época, en células madre no había mucha gente de control allí en Miami, y yo le estaba sacando las castañas del fuego, pero es que no teníamos medios, no teníamos técnico, la historia de siempre, yo estaba tenía menos poder adquisitivo que en España. ¿Vale? Con ese sueldo. A mí me dijeron que me iban a revisar el sueldo al año, y no me lo revisaron. Y siguieron pagando lo mismo y a mí seguían siendo las cuentas. Entonces qué pasó, que cuando me ofrecieron un contrato en España que supuestamente era fijo, pues yo decidí volverme. Vale, o sea, el motivo por el cual tú te volviste de Miami fue un tema económico puro y duro. Bueno, yo a nivel personal estoy aquí muy contenta. Yo más bien en algún momento me planteé quedarme y todo. Pero eso, más que nada es que lo estaba pasando mal a nivel económico luego por temas personales también me tuve que volver, mis padres me dijeron no, que esto está siendo el tonto, lo típico. Lo típico, estáis haciendo el tonto porque tienes menos poder adquisitivo que durante la crisis en España que eso es difícil. Bueno, pues yo tenía menos poder adquisitivo porque Miami es una ciudad hipercara. Y antes que no me pagaba mucho, pues ahí blanco y en botella. ¿Podemos decir que en la ciencia no se gana dinero? Depende. Depende de la universidad, depende de tu centro de investigación, depende del proyecto, depende de muchas cosas. En España luego no es para hacerse rico. Yo creo que generalmente, incluso en Estados Unidos aunque lo pagan mejor que en España, no es una carrera para hacerse rico, pero bueno, siendo funcionario tampoco te hace rico. Lo que pasa es que cada carrera tiene sus compensaciones, ¿no? Son carreras gratificantes para la gente que le gusta investigar, que uno lo hace por el dinero pero hay veces que se abusa, el sistema abusa o los jefes abusan de eso. Mira, ¿hiciste algún descubrimiento importante en el tema que estás explicando de tus investigaciones? Descubrimiento no, porque yo estaba arrancando proyectos todo el tiempo. Proyectos que eran innovadores. Entonces eran proyectos muy arriesgados. De hecho, es mi tema de tesis cuando yo ya tuve un poco más de bagaje, me di cuenta de que no era el proyecto para un doctorando. Porque es un proyecto que no iba a rendir. Era muy, muy arriesgado. No iba a rendir publicaciones. Bueno, a ver si la rendía. Era demasiado pelotazo, pero era demasiado arriesgado para un doctorando que necesita publicaciones para luego enganchar con otros contratos u otras becas o doctorales, de hacer una carrera sólida. Entonces, al ser temas tan arriesgados, pues ya te digo, si luego salen los resultados, es el pelotazo. Pero si no los sacas, es un tema que no das con la tecla porque a ser nuevo nadie sabe muy bien cómo encarrilarlo. Si no tienes la suerte, pues no publicas. No publicas. Y así se me han ido muchos años. Cuando en Bilbao arranqué un laboratorio de cero, esto no es agradecido tampoco. Pero uno está montándolo y arrancando técnicas. Técnicas en las que yo no era experta. Es que yo también he sido muy arriesgada. Sabes que eso todo el mundo no lo hace. Yo me metí en Bilbao y me ofrecieron un puesto de Junior Group Leader en un tema que no era el mío. Era aislamiento y trasplante de islotes. Yo venía de células madre. No es lo mismo. Su línea es totalmente distinta. Entonces, yo allí, por ejemplo, estuve montando un laboratorio en algo que algunas técnicas sí las conocía, pero muchas no. Tuve que formarme sobre la marcha, que eso nadie lo hace. Entonces, fue muy arriesgado. Y cuando ya estaba el laboratorio funcionando yo estaba empezando a publicar que me dieron incluso un premio. Porque yo propuse un premio mundial, pero pequeñito. A nivel mundial, pequeñito. Bueno, un premio mundial. No, pero era un premio que era pequeño, que no es conocido. Y porque yo propuse que se aislaran los islotes pancreáticos a través de la filtración. Porque me di cuenta que aunque los islotes pancreáticos, los islotes pancreáticos son la parte del páncreas que contiene las células retas pancreáticas, que son las que secretan insulina. Tenemos una parte, para que nos entendamos, una parte del páncreas que funciona como hormona y secreta, una hormona endocrina y otra parte que funciona de otra manera. Es que no sé cómo explicarlo de manera clara. Pero una parte, la parte que tiene las células que producen insulina es el islote pancreático, que es como si fuera una isla de células. Pues le llaman islote, es un agregado de células. ¿Vale? Islote de isla. Entonces, pues yo propuse que para separar los islotes del páncreas y se pudieran trasplantar que se hiciera por filtración. Que actualmente no se hace así, porque yo vi que una cosa que tenían en común los islotes de ratón y los islotes de humanos era el tamaño. A pesar de las múltiples diferencias en densidad, en fisiología, en mides de características físicas y fisiológicas, tienen en común el tamaño. Entonces, si se hiciera por filtración, quizás podría ser una manera de optimizar el aislamiento. Que actualmente el aislamiento de islotes humanos no está optimizado. Se hace como terapia, el aislamiento y el trasplante de islotes, pero no está optimizado. Es un proceso que no es óptimo. Que nos viene de necesitar dos páncreas para poder trasplantar, por ejemplo, no uno solo. Entonces, pues yo propuse eso y me dieron un premio. Maravilloso, Miriam. De verdad, me quito el sombrero. Miriam, ¿la ciencia está regida por hombres? ¿Como todas las profesiones? ¿O crees que está más... ¿Cómo te lo diría? Yo creo que sigue... Vamos, yo hace años, ya te digo que yo ya no estoy haciendo ciencia. Yo ya hace años que estoy trabajando de profesora, de CP. Pero no creo que hayan cambiado mucho las cosas. De hecho... ¿Por qué dejaste la ciencia? Porque no tuve más remedio. ¿Por qué? ¿Qué te sucedió? ¿Te contrastas con algún techo de cristal? Pues... Sí y no. A ver, toda la culpa no se la vamos a echar al techo de cristal. Es cierto que... Que yo... ¿Cómo te diría? Es que es complicado de explicar, Maika. Es muy complicado. A mí se me dieron una serie de circunstancias que no me favorecieron. ¿Vale? Entre ellas estaba que... Que no... Que tuve un... Yo creo que un malentendido, por llamarlo de alguna manera, con mi jefe de Bruselas. Al poco de llegar. Y mi jefa directa pues no se llevaba bien conmigo. Que era china, además. Mi jefe era belga. Estaba en Bruselas. Y estaba en el hospital universitario de Bruselas. Y mi jefa era china. Y era la que llevaba todo el tema del banco de tejidos de allí. Del hospital de Bruselas. ¿Y entre vosotros? ¿Hablabais en inglés? Hablamos siempre en inglés. Yo escribía todos los emails en flamenco, en neerlandés. Y flipaban colores porque yo sabía un poquito de alemán pero yo en inglés neerlandés no tenía ni idea. Ya me pasaba la vida traduciendo con Google. Entonces... A mí me habían ofrecido un contrato cuando me fui allí, a Bruselas. Me habían ofrecido un contrato en el que yo iba a trabajar tanto en el hospital universitario como en la universidad. La universidad de Bruselas. La libre flamenca. Porque está la balona y la flamenca. La francesa y la flamenca. Yo estaba en la flamenca. Y supuestamente yo iba a trabajar en los dos sitios. Cuando llegué, yo sabía que no era mucha cantidad. Era algo más que lo que yo cobraba en Bilbao, que era lo de Bilbao. Y me pagaban muy bien en Bilbao. Y me pagaban muy bien, muy bien. De España es la región donde más pagan el País Vasco. A los investigadores. Me voy a Bruselas y yo sabía que la vida ya era más cara y lo que me habían ofrecido no era ninguna maravilla. Pero en aquel momento yo estaba en el par. Y digo, bueno, el contrato me interesa. Es como científico senior. Es un pasito más en mi carrera. Pues me voy a ir. Muy interesante. Trabajo entre los dos sitios. Entre la universidad haciendo investigación y en el hospital haciendo aislamiento. Bueno, aislamiento hacíamos nosotros. Total, que llego allí y me encuentro con que tenía dos trabajos y solo un sueldo. Me pagaban sobre el hospital y me dijeron que trabajara de voluntaria. Y yo he tenido que trabajar de voluntaria en la universidad. A regañadientes lo firmo. Y empecé a encontrarme uno tras otro. Un obstáculo tras otro, tras otro, tras otro. Al final acabamos de pasar. Y me fui. Y más que nada, porque mi jefa no me apoyó. Y yo creo que fue a raíz de un malentendido que hubo con mi jefe. Pues la mujer no estaba ni allí. Porque la madre murió y tuvo que volverse a China para el guerro. Y estuvo un mes en China. Y le pilló fuera. Yo no sé si fue por eso. O que le cae más. No tengo ni idea. No tengo ni idea. Pero el caso es que la cosa acabó como el rosario de la aurora. Acabó mal. Y ya a partir de ahí no me salía ningún contrato en ningún centro de investigación. ¿Pero no te salía ningún contrato porque ellos te pusieron algún tipo de traba? No lo sé. No sé si ni siquiera las trabas vienen de ellos o venían de antes. Porque este señor se lo pensó mucho antes de contratarme. Yo creo que las trabas venían de antes. ¿De antes de dónde? ¿De qué laboratorio? De el de Mipecis. Incluso antes. ¿De Alicante? De Alicante. Pero bueno, por hablar. A mí nadie ha venido y eso no sé. Que con el tiempo la gente de repente, gente con la que me llevaba señas, no me habla. Y nunca nadie me ha venido y me ha dicho Miriam, van diciendo esto de ti. Esto son elucubraciones. ¿Sabes? Esto más que, no sé. Es que son elucubraciones Maica. Porque yo sé que ha habido gente que ha mal metido. Yo lo sé porque los conozco. Pero sé que luego han pasado cosas inexplicables. Y yo no sé por qué. Nadie ha venido a explicarme nada. Si son amigos míos, ¿por qué no vienen y me lo explican? ¿Sabes? Es complicado, Maica. Eso y otras circunstancias que se dieron hizo que yo volviera a España y no ha vuelto a salir de ningún otro trabajo en ciencia. ¿Estabas a punto de lograr algo, de conseguir algo que alguien dijera no vas a ser tú quien lo consiga? No, no, no. No me consta. Miriam, te voy a hacer una pregunta muy directa. En la intensidad con la que hablas está claro que lo que te apasiona es la ciencia. Si tuvieras la opción, ¿volverías a la ciencia? Y además, ¿crees que si fueras hombre no la habrías dejado nunca o eso no tiene nada que ver? No se sabe. Nunca se va a saber. Nunca se va a saber. Es tu opinión. Si no sabes la verdad, ¿tú crees que si fueras hombre seguirías siendo científica? Bueno, te comento una cosa. A mí me han llegado a llamar para ir a una reunión de los líderes mundiales que son las de la diabetes. Te iba a preguntar que me lo explicaras. Me mandaron un e-mail. Me mandaron un e-mail. ¿Y por qué no fuiste? ¿Sabes por qué? Muy triste. Porque no me daban ningún permiso de mi trabajo para poder asistir. A mí me hubiera encantado ir. Era una reunión mundial de líderes. De líderes mundiales que yo nunca me había considerado líder mundial. Se llama a la jefa o al jefe y se le dice, Diarrea, no puedo que me cago. Diarrea en Estados Unidos 3 semanas, ¿no? 3 semanas con una gastroenteritis de carajo. ¿Qué hubiera sido de tu vida profesional si hubieras podido acudir a esa reunión de líderes mundiales? Probablemente se me hubieran abierto puertas. Porque luego he ido a algún congreso y no se me ha abierto ninguna. Pero yo quiero pensar que en una reunión de líderes con gente tan importante, algo se me hubiera abierto. Pero ya eso nunca lo sabremos. ¿Qué haría yo si me ofrecieran a mi trabajo? Yo siempre he dicho que yo estoy interesada en trabajar en algo proporcional, a mí siempre lo he dicho, cuando me han ofrecido trabajo digo, a mí solo me interesa en algo proporcional a mi experiencia. Yo no me voy a, yo no voy a trabajar de técnico, yo no voy a trabajar de postdoc, porque yo no lo soy. Porque ya hace muchos años que no lo soy. Ya hace muchos años que me doctoré y he tenido puestos de responsabilidad. Entonces, a mí o me vienen con una sombra roja y según qué condiciones o no me interesa. Pero ok, tengo ya mi vida aquí encarrilada, que no es decir, me pillaría en el paro desesperada. Miriam, además has escrito también dos libros, creo, no sé si más. Sí, dos libros. ¿Qué libros son? Pues mira, uno es de mi tesis, el de reprogramación celular desde las madres de mayas de ratón para obtención desde la próstora de insulina, que el coautor es el doctor Bernat Soria, y luego el otro libro, es un libro que escribí en colaboración con investigadores de todo el mundo sobre el aislamiento de islotes pancreáticos tanto en modelos animales como en humanos. Vamos, es una comparativa. Vamos, que no es apto para no bioingenieros, ¿no? No es apto para gente que no sea experta. Bueno, experta, mentira. Gente que no trabaje o quiera trabajar en el campo del aislamiento y trasplante de islotes, sobre todo aislamiento, porque sienta las bases, o sea, es como una introducción, aunque luego profundiza un poco, pero es más que nada para una toma de conciencia, para un reconocimiento de en qué consiste el aislamiento de islotes. Y es muy interesante para los que trabajan en aislamiento de islotes porque compara entre los distintos modelos animales y así vas viendo las diferencias en el procedimiento, en la fisiología, luego habla del trasplante de islotes en humanos, realmente es muy interesante este libro. Lo que pasa es que es para gente que vaya a trabajar en el campo. Entonces, de hecho, me han dicho algunos laboratorios que lo estaban comprando y se lo estaban regalando a nuevos investigadores que puedan trabajar en el tema, o técnicos que puedan trabajar en el tema. ¿Sabes? Que los laboratorios, por ejemplo, el de Miami, el colaborador que tengo en Australia, y se lo daban a gente que pudiera empezar a trabajar en el tema porque les venía genial su libro cabecera para todo el que vaya a trabajar en aislamiento de islotes pancreaticos. Miriam, ha sido un placer inmenso hablar contigo. Eres una de las pocas amigas que me quedan de la FB. Somos 4 o 5 que aún estamos en contacto. Creo que hace 10 años que no nos vemos ya, de aquella escena en el japonés. Sí, sí, sí, que estuvimos con Ingrid y con Gema, que también las quiero invitar aquí a mi podcast. La verdad es que la gente de la FB no tengo contacto con nadie. Tengo la sensación que no fuimos una clase muy unida, o es la impresión que tengo yo a estas alturas de mi vida. No sé si quieres añadir algo más, Miriam. Pues ahora mismo no se me ocurre nada. Me encantaría volver a estar en contacto. Bueno, tú y yo no es que nos hablemos todos los días, pero más o menos estamos en contacto. Pero me gustaría saber de otros compañeros y tal. Hay que montar algo. Miriam, ¿todos los episodios los acabo con un chiste? Venga, dispara. He buscado uno de nivel. Disparo con el chiste. ¿Arriba son las veredas de tiempo? No. ¿Y ahora? Sí. Ahora sí. ¿Y antes no? Antes también. Pues me has dicho que no. No has entendido algo. Porque yo lo he tenido que leer. Es muy malo, lo sé. Me he superado. Miriam, muchas gracias por la charla. De verdad, ha sido un placer. Muchas gracias, Maika, por haberme invitado a tu podcast. Muchas gracias por haberme permitido dar voz a toda la situación que puede vivir cualquier investigador que viva la ciencia, que la apasione, que lo apueste todo por la ciencia como yo. Muchas gracias de nuevo. Muchas gracias a ti, Miriam. No cambies nunca y sigue igual de apasionada. Un besito. Besitos.

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