This is a conversation between friends where they talk about various topics. They discuss turning 40, having a large family, growing up in bars, a cooking competition, and being part of a religious brotherhood. They share anecdotes and opinions about these subjects. It is mentioned that being in a brotherhood requires sacrifice and dedication.
Hola, ¿qué tal? ¿Qué tal, Kiko? Muy buenas, ¿qué tal? Buenas tardes. Hoy estamos muy contentos porque nos acompañan Sergio y Laura. Laura y Sergio. Hola, chicos, ¿qué tal? Hola, ¿qué tal? Muy bien. Hola, hola. Aquí tenemos a unos primos postitos, amigos, bebiendo erujo. Este podcast se llama Sí lo veo a partir de los 40. Laura, tú este año cumples 40. ¿Cómo lo llevas, el cambio de dígito? Pues la verdad es que no lo llevo mal. Los 40 tampoco creo que sea una edad mala.
Para mí es la mejor edad que hay, los 40. Mejor que los 30. Yo no sé por qué no he llegado aún, pero tampoco creo que algo… ¿Cuántos años tienes? No sé. Yo me voy a la vida a los 20. A los 20 eres un gilipollas. Vamos a ser realistas, vamos a ser realistas. Claro, también un poco gilipollas si quedamos. Laura, tu familia es muy grande. ¿Cuántos hermanos sois? 11. Laura, ¿alguna vez tus padres os han explicado por qué han tenido tantos hijos? Pues no, la verdad es que nunca me han explicado por qué tuvieron tantos hijos.
La gente dice que porque no había tele. ¿Qué se pone sola pequeña de 11 hermanos? ¿Te has criado sola, tus padres, tus hermanos? Pues mira, la verdad es que me han criado mis hermanas las mayores, más que mi madre, porque mi madre no paraba de trabajar y hacer cosas de casa y cuidar a los otros hermanos. Y mis hermanas, cada una de las grandes cuidaba a uno de los pequeños. Donde ellas iban, íbamos los pequeños. ¿Y cómo os lo organizabais para las Navidades o los cumpleaños, siendo tanta gente? Pues mi casa era una casa pequeña, que teníamos un patio, teníamos tres habitaciones.
Tres habitaciones para 11 hermanos. Tres habitaciones para 11 hermanos. Y el comedor no era muy grande, pero aun así siempre cuando había un amigo de la familia que no tenía familiares para comer de Navidad con ellos o algo, a mi casa se venía, siempre. Y la puerta de mi casa siempre estaba abierta. Eso es, si se quiere se puede, ¿no? Si se quiere se puede. Sergio, tú eres el primo hermano de José Manuel, que quedó subcampeón en el concurso York de cartas, el restaurante ganador fue Fusion, pero el restaurante de tu primo, La Valadonesa, ¿lo has dicho bien? La Valadonesa.
Vale, quedó en segunda posición, pero el plato estrella fue su paella. Tú te has criado siempre entre bares, ¿qué tal? ¿Qué es eso de que irías entre bares? ¿Qué significa? Aparte de la pedazo de comida que hemos comido hoy aquí en tu casa. Ir a hacer entre bares es vivir otra vida. Eso es la universidad. La universidad de la vida. Totalmente. Te puedes encontrar desde la persona más espléndida, la más rácana, a la más lista, a la más enterada, y bueno, uno aprende, aprende mucho, la verdad.
Kiko, tú te has criado con Sergio en los bares de vuestra familia. Venga, explícalos alguna anécdota. Bueno, mi padre y su padre han sido socios desde que, no sé, hace 40 años. Y para mí es, bueno, como un hermano posticto prácticamente. Los bares, por lo que dice él. Los bares es la universidad de la vida porque ahí lo ves todo. Ahí el trato con la gente es el esencial. Y ves desde la gente más mierdosa hasta la gente más preciosa, como digo yo, ¿no? Pero muy bien.
Y el José Manuel, el machaca, el primo de Sergio, que para nosotros le tenemos, bueno, él es su primo, está claro que se quiere un montón, pero yo le tengo mucho cariño y cuando vi el programa se me saltaban las lágrimas porque él empezó con su padre y con mi padre. Pero escúchame, si es su primo, es tu primo, ¿no? ¿Vosotros sois primos o no sois primos? No, no somos primos. ¡Ah, no sois primos! Vale. Laura, ¿tú sabías que no eran primos? No somos primos.
Bueno, la verdad es que yo creo que un año más tarde. Bueno, antes estiraba mucho que los padres, los amigos, cuando tenían hijos otra vez, me decían, pues no, no, sois primos, sois primos. Y al final, cuando somos primos... ¿Cómo se estiraba o era la familia Fernández, que a todo el mundo era la misma familia? También, también. La familia Fernández, que es la familia de aquí, mi primo, todos sus allegados eran o los titos o los primos o...
Tito Peña. Tito Peña. Y lo que te quería comentar de mi primo, mi primo empezó pelando patatas. Es que claro, yo la vida de mi primo... Yo iba al colegio y tal, y él dejó el colegio muy pronto y... ¿Pelando patatas? Con aquellas máquinas que trajeron los viejos que no funcionaba. O sea, nos trajeron las máquinas... ¡Esta máquina va a pelar patatas, que va! Al final la pelaba él. A cuchillo, a cuchillo, sí. Y bueno, él empezó...
Yo he visto crecer a mi primo desde cero hasta lo que es hoy en día. Un gran cocinero. Un gran cocinero, pero muy bueno. A mí el programa que salió, me encantó. Él como persona en Deute Cartas fue increíble. Me gustó muchísimo. Él como persona... No, no, no. No actuó, es así, es muy romántico. Claro, por eso es que... Y además es que en el programa se ve y ves quién es él. Bueno, yo creo que fue el pasado.
Mira, una opinión... Porque claro, yo soy su primo. Él lo conoce toda la vida. Una opinión así un poco de fuera te la puede dar Laura, de mi primo. ¿Cómo es mi primo? Es un cascarrabias. A ver quién lo va a mandar aquí. La madre honesta. Lo que pasa es que la gente, yo creo que cuando... Se creía que él estaba haciendo un papel para desmerecer a los otros concursantes. Sí, porque nada. El cabrón es así.
Esto está malo, esto es una mierda. Hostia, mira este tío. Es como tu tío Paco. Es como Paco. Paco es, en teoría, su... Él dice, mi tío... En teoría no, es su tío. Es su maestro. El padre de Sergio, que es el crack número uno. Es su maestro, es su maestro. El tío más gordo del mundo. De la capa a la tierra es mi tío falso Paco. Pero... El más carioso. Bueno, su padre Sergio me dijo cuando mi hija número uno cumplió unos 5 o 6 años, me dijo...
Empieza a ponerte guapilla. Y yo... ¿Perdona? ¿Perdona? La hacía hermosísima. Sí, sí, los comentarios, sí. Oye, vosotros pertenecéis a la hermandad de Santa Coloma, a la hermandad rociera. ¿En qué momento decidís entrer una hermandad? ¿Cómo funciona esto? Laura, tú estabas en la de Mataró. ¿Cómo entrasteis en la de Mataró? ¿Por qué te metes en una hermandad? Bueno, pues yo por mis hermanos mayores. Ellas fundaron esa hermandad junto a otra gente, ¿no? Otros amigos. O sea, juntaban siempre en un local y decidieron hacer una hermandad rociera porque les gustaba mucho el mundo, ¿no? La seriana rociera, todo lo que tenía que ver con el tema rocío.
Y claro, como te digo, mis hermanas mayores tenían que ir siempre cargando con las pequeñas. Entonces, a mí me llevó un día mi hermana al local ese, que se pusieron ahí a cantar. Y yo de ir cada día, cada día, pues al final me supe todas las canciones. Me metieron ahí en el coro también a cantar. Me llevaban a la Feria de Abril, al Rocío, a todas las actuaciones que tenía. Y así entre yo. Sí, sí, sí.
Yo para ti tengo una sorpresa. Tengo una sorpresa para el final. Por el silencio del móvil, primo. ¿Te agio? Saben que me estás grabando un poco y la gente ya me pregunta. ¿Te agio? Y tú, ¿por qué entras a esa hermandad de Santa Coloma? ¿Cómo decides entrar? Bueno, yo no... Igual que ella no decidió nada, yo tampoco. Yo me hice amigo de una familia muy rociera y el hecho de... Bueno, nuestros padres, tanto de Kiko como los míos, iban a salas de sevillanas.
Ahí conocimos una familia, la familia Díaz. Y el hijo pequeño, que es mi amigo hoy en día, mi gran amigo, Ángel. Pues a partir de ahí empecé a ir con ellos y fue como me fui metiendo en la hermandad. Yo de hecho siempre he estado en la hermandad sin mi familia. Yo... La familia mía allí era la Díaz, la familia Díaz Pérez. Y nada, así. Y como me gustó y tenía allí todas las amistades, estuve haciendo muchos amigos, pues ahí me metí.
¿Queréis a las diez con vosotros? Sí. Sí, a ver, es una manera de... También de juntarte con tus amigos, de... A ver, yo no te puedo decir que seas creyente de 100% de que me vas a solucionar la vida, porque yo lo tengo más como una forma de juntarnos con la gente, con... Sabes que siempre van a estar ahí. El primer domingo de mes, por ejemplo, sabemos que nos vamos a ver. O si vas... Según qué época del año, rocío, feria, el evento que toque, sabes que nos vas a ver.
Y para mí eso es... Bueno, quizá es lo más sagrado. Es más sagrado que lo que hay detrás de todo esto. Laura, tú has afirmado con la cabeza así muy efusiva que tú sí crees en la Virgen. Bueno... De manera más efusiva que la que dice Sergio, digo. O como él. Sí. Pero bueno, al final yo creo que... Que tienen que creer en algo para... Para tirar la vida, ¿no? Sí. Sí. No sé. Y como lo he vivido desde pequeña, yo es lo que he visto en mis hermanas.
Si tengo que pedirle algo, se lo pido. Claro. ¿Qué significa? ¿Cuál es el estilo de vida que implica el estar en una hermandad? ¿Vuestras reuniones o implica algo más? Sacrificio. ¿Sacrificio? ¿Por qué? 100%. Aunque se diga que no, son muchas horas de tu vida. Que dedicas tal día a trabajar... Son muchas. Porque si no, eso no va adelante. Yo, de hecho, ya hace tiempo que estoy un poco separado. Sobre todo cuando salió el segundo. El disco número dos.
Me aparté un poco porque... Claro, yo llevo ahí desde los 14 años. Tengo 47. Hace una semana más o menos. Es que me lo ha dicho mi mujer porque no sabía cuándo salía. Y bueno, es mucho sacrificio. Tienes que estar... Es mucho trabajo para momentos muy concretos. Cuando eres joven y no tienes responsabilidades, lo haces con todo el cariño del mundo y con toda la ilusión. Pero bueno, poco a poco... Hay gente de mi edad que sigue y sigue.
Y los amigos... Y no se os va el... Y no se os va el... El estar ahí y divertir horas. Pero bueno, cada uno al final toma un poco el camino donde más a gusto está. Hay gente que tiene sus hobbies y hay gente por aquí que no tiene nada que ver. Que les gustan las motos y tienen 50 años y los tíos están... Pues es todo lo mismo. ¿Hablas de ti, cariño? Por poner un ejemplo a alguien que le guste las motos.
Bueno, el fútbol... Hay un montón de hobbies. Esto es un hobby que cada uno lo toma como quiere. Y al final hay gente que lo toma más fuerte, más flojo... Yo fui con vosotros a hacer aquel camino. Y la verdad es que me emocioné muchísimo. Yo... Yo soy agnóstica, ¿vale? Yo me quedo ahí. Pero sí que esto de cuando llegamos a la Virgen y empezamos a cantar a la Virgen, la verdad es que me emocioné muchísimo y se me cayeron lágrimas.
Es el momento, mamá. Sí, la verdad es que me emocioné mucho. Y yo también... Tengo una amiga que siempre me decía, ¿Te vienes conmigo a hacer el camino? Y ella no había hecho el camino. Joder, pues cuando al final se vino y encima un camino que llovía mares... ¿De qué fui yo? ¿El que nos ponte el ojo? Claro, pero tú... Yo estaba en la manda de Macarón. Entonces, tú fuiste y yo no estaba en ese camino.
La raica fue con el espadrillo agitando. Pensé que era por los dedos. Se llevó el ojo de ese gato. Y pues desde entonces... Ella siempre viene a hacer el camino. Porque le encantó, le gustó el ambiente. Y es lo que tú dices. A lo mejor no cree mucho en la... Pero es todo lo que te rodea. El sentimiento que te hace... El sentimiento yo lo vi muy fuerte. Cuanto más duro es el camino, más bonita es la llegada.
Es que cuando llega... La verdad, Maica, cuando llegamos ahí y que se pusieron a cantar a la Virgen en el escenario, aquello... Todo el silencio... Bueno, yo no creo en Dios, ¿vale? Yo no... Pero, perdona, pero creo en el momento que yo vi aquello, gente creyendo a muerte. Digo, es que al final da lo mismo. Es el sentimiento de todas aquellas personas. Haces un camino durante una noche entera y parte de un día durmiendo en el suelo y si llueve o la climatología es mala o se te pincha la rueda de un camión, como nos ha pasado a veces, o el buey...
El mulo no quiere tirar y de manera... Y tienes que, bueno, buscarte la vida para llegar. Cuando llegas, joder... Aunque no creas, es que da igual. Da igual, da igual, da igual. ¿Pero crees en tus compañeros que lloraban? ¿En el que te abraza? ¿En el que te abraza? ¿Este por qué me abraza? Gente llorando, abuelas ahí, niños... No pasa nada. No, ya no son abuelas ni niños. Es muy brutal, muy brutal. Sí, sí. Yo, lo he visto acá, y me refiero con la lagrimilla...
Bueno, yo hice el camino porque mi sogro me lo dijo y Kiko, venga, va, vente, tal... Y bueno, después del camino, mientras hicimos el camino que cayó en diluvio universal... Te estarías cagando, eh... Bueno, yo me estaba parando de ver porque yo fui al lado del camión de la cerveza, pero la verdad es que cuando llegué allí me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada.
Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Me quedé muy alucinada. Sergio, tú dices hermano mayor. ¿Qué significado tiene ser hermano mayor? ¿Cuáles son las funciones? ¿Qué significa eso? Bueno, eso depende de cada hermandad. En la tuya. En la mía, por ejemplo... Que es la de Santa Coloma, no sé si lo hemos dicho.
Sí, la hermandad rostrida, nuestra señora del rostrido de Santa Coloma. Gracias. En el caso nuestro es cabeza visible, por así decirlo, pero realmente las decisiones de la Junta de Gobierno, que llevan muchísimos años, que son los que, en teoría, deciden según qué. Porque si tú dices, quiero una noria en el rocío... O sea, hermano mayor, en teoría, se le da todo lo que... ¿Es simbólico? No es simbólico. A ver, por ejemplo, el acto más importante, el rocío, se hace a gusto del hermano mayor.
Pero claro, si yo le digo, quiero una noria en el... ¿Entiendes? Te tienen que ir marcando un poquito. Hay hermandades que no, hay hermandades que lo que diga el hermano mayor... Aquí hermano mayor, no, de eso nada, tío. Quiero noria, me pones noria. Hermano mayor es un año, pero luego te vas, luego dejas el cargo. Hermano mayor, para que la gente lo entienda, es cargo de un año, de rocío a rocío, o de enero a enero, eso ya depende de la hermandad.
Tú estás un año ahí, y pues mira, el camino, quiero que en vez de bocadillos haya... gambas. Bueno, vale, gambas. ¿Cuánto vas a poner tú? Pues claro, aquí siempre se trata de bocadillos. Eso es decir, ¿no? O quiero que el camino se haga en vez de por aquí, se haga por allí. Bueno, vas a hablar con el ayuntamiento. ¿Se puede? ¿Nos dejan? ¿Es viable? ¿La Junta de Gobierno lo estudia? Sí. Pues venga, lo que quiera el hermano mayor.
Pero si pides cosas imposibles... También se supone que tiene que tener un poco de cabeza. Sí, pero hay hermandades que el hermano mayor es como el que manda. No, no, pero al final Dios... Y Laura, ¿tú has sido hermana mayor? ¿Pueden las chicas ser también de hermana mayor? Sí, yo fui hermana mayor de mi hermandad. Fuimos el mismo año. Ah, ¿sí? El mismo año. Sí, sí. Que había guerra de poder aquí en casa. No, no, no.
No estábamos casados, no. Sí, sí, sí, sí. No estábamos novios todavía. Yo he sido un poco CMG maneje, para que todos los hermanos lo saben. Sí, si es un poco de trampa. Y Laura, ¿crees que hay machismo en las hermandades? Bueno, a ver, machismo no, pero sí que hay hombres que están trías como la vieja usanza y se nota, se nota. El hecho de... cuando ponen la mesa, los primeros que se sientan son los hombres. Eso sí que lo veo ya.
Bueno, pero eso lo estás cambiando ya, ¿no? Sí, sí. Poco a poco, sí, poco a poco. No, mucho. No, no, no. Oye, los viejos al final, si salen al final todos. Quiero hablar de mi hermandad, que es la que yo conozco. Se monta feria. Antiguamente, la fachada de la feria, que es para 10 días, se hacía de tocho, de obra. Andamios, tal, cual, cual. Los hombres, ¿qué están? Trabajando la obra, tal. Llega la hora de comer.
¿Quién ha hecho la comida? Pues las mujeres, ¿no? Que no están en la obra, porque... Sí, hasta aquí es un trabajo de equipo. ¿Me entiendes? Sí, sí. Luego, sí, sí que... Claro que sí, sí que lo habíos. A mí lo que más me sorprendió desde fuera, que yo nunca había estado dentro, fue la primera vez que fui allí al hermandad, en plan en el local y tal, y yo me quiero sentar con mi novio. No, no, las chicas van aquí y las chicas van allí, dije, ¿vale? Sí, sí, pues eso es lo que te digo.
Pero eso era antes, ¿no? Ahora ya no tanto. Es verdad que ahora eso va a acabar. No, ahora se ponen separadas porque ellas quieren, porque les gusta estar a su rollo, para que... No, pero ahora también hay una cosa que también éramos nosotras las tontas. En vez de, yo qué sé, cuando llega a misa el primer plato está a mi marido. Y cuando llegan ellos se los pongan. Bueno, perdona, porque tú a mí se los pones tú.
Que yo, ojo, que yo eso no lo hago. No, no, no. Es verdad, pero sí que lo he visto en la hermandad. No, muchas veces. Y mi marido, y mi marido. Es que, ay, ay, que nos está poniendo mi marido. Pero ¿de quién estamos hablando? De personas ya más mayores que nosotros. Claro, de nuestras madres para arriba. Vosotras ya no sois así. Bueno, que miren... Y cuando fuisteis hermanos mayores queréis como el mandamás de la hermandad, el delegado de la clase vuestras familias que estaban orgullosos en plan, pues mi niño, mi niña, es hermano mayor.
O la familia vuestra no la vive. Bueno, yo mi familia sí porque mi familia somos muchas de la hermandad. O sea, de 11 hermanos a lo mejor ¿cuántos somos de la hermandad? Seis o siete somos de la hermandad. Y ninguna ha sido hermana mayor, solo yo. Ajá. También tienes otra oportunidad, claro. Si eres hermano mayor, es una responsabilidad, es un año. Yo, por ejemplo, ese rocío, pues no me emborraché. Allí donde me ves. Pero es que todo tiene que salir bien.
Pero no me emborraché, ojo, porque no quise. ¿Por qué eres hermano mayor? Bueno, el año siguiente fue el angelito y si quieres te lo cuento. No, no, no. Porque no tuve un día sereno. O sea, todo de repente... El calor me puso contigo. Yo me lo puedo creer. Acababa de ser el año anterior y me llegó este rocío borracho. Y dije, hijo de puta. Y lo he tenido vencido. Pero bueno, cada uno le da su manera.
¿Y cómo funciona esto del hermano mayor? ¿Se bota? ¿Va dedo? ¿Tú dices, oye, yo quiero? ¿Cómo funciona? Bueno, también depende de cada hermandad. En la vuestra, ¿no? En la nuestra, por ejemplo, se intenta evitar la votación. ¿Por qué? Porque si caen dos, o sea, si se presentan dos, el que sale, o sea, el que no sale, por dedad general se rebota y ya no se presenta. Porque, que joder, han querido a este, entonces siempre hay un poquito ahí de...
de conducir, ¿no? Venga, va, este año va a ser este, este año va a ser este. Vale, o sea, a uno se propone a sí mismo en plan, oye, pues a mí me gustaría, bueno, venga, pues tal. Por ejemplo, mira, por ejemplo, por ejemplo, por ahí uno, su padre de presidente, su madre directora del coro y, bueno, y sabían que se presentaba Laura, oye, pues vamos a dejar a Sergio y tal. Vale, es un poco de negociación ahí.
Que pueda haber votación, que no pasa nada. Ya, ya. Pero por verdad general que no sabes cómo que te duele, ¿no? Imagínate que te presentan y no sabes para qué. No sé si habéis escuchado alguna de mis podcasts, pero yo siempre los acabo con un chiste. Pero en esta ocasión yo quiero acabarlo cantándolo ahora porque canta muy bien. Se están aquí descojonando. Ríete, ríete, ríete. Venga, va. Un trocito. Yo no puedo, yo no puedo. Pero va, cántate un poquito.
No puedo porque yo ya no tengo. Y luego te echa bronca. Luego te echa bronca. Venga. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca.
Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca. Y luego te echa bronca.
Y luego te echa bronca.