Pr. Santiago Cascante Que está mirando Dios hoy en día

This transcription is a religious sermon that begins with a prayer and a worship song. The speaker encourages listeners to invite the Holy Spirit into their lives and to seek the presence of the Lord. They emphasize the importance of worship and offer prayers of gratitude and adoration. The sermon then shifts to a discussion about the current state of the world, highlighting the presence of evil and the lack of love and reverence for God. The speaker poses a question about what God sees in this generation and mentions various sinful activities happening in the world. They address the actions of both non-believers and the Church, acknowledging instances of murmuring, misuse of God's name, and spreading false teachings. The speaker emphasizes the need for repentance and righteousness. Muy buenas Pueblo del Señor, qué bendición un domingo más estar en sus hogares, compartir con ustedes una porción de la Palabra, un mensaje de parte de nuestro Señor Jesucristo. Me gustaría compartir una adoración, pidiéndole al Espíritu Santo que se acerque a nosotros. Vamos a escuchar un tema de adoración para preparar el ambiente, para transformar una atmósfera, una atmósfera de adoración, una atmósfera de búsqueda de la presencia del Señor. Que pueda verte en gloria y magia, acércame más a Ti, acércame más a Ti, que pueda oír Tu tierna voz, que pueda verte en gloria y majestad, acércame más a Ti. Que Tu trono se inunde con mi adoración, como un grato perfume, como incenso suave, es mi ofrenda de amor, darte mi adoración. Adórele con Tus propias palabras, invita al Espíritu Santo a que entre a Su vida. Déjese tocar por Su santa presencia, pídele que se manifieste en Tu vida, que te disfrute en su tarde. Acércame más a Ti, que Tu trono se inunde con mi adoración, como un grato perfume, como incenso suave, es mi ofrenda de amor, darte mi adoración. Ven Espíritu Santo, ven, ven Espíritu Santo, ven Señor de gloria, oh Dios bendito, de gloria y la honra Señor, Tuyo es el Señorío Padre, gracias Rey, gracias Señor, gracias Señor, Te adoramos Espíritu Santo, ven, ven Espíritu Santo, gracias Señor, ven, gracias Espíritu Santo, Toda la gloria a Tu nombre Señor, Tú eres santo Dios, gracias Rey, Te adoramos Señor, Te adoramos Padre, oh sí Señor, gracias Señor por este momento que nos has regalado, gracias Señor porque estás con nosotros, gracias Espíritu Santo porque no nos has abandonado, gracias porque aún en momentos de debilidad ha llegado el momento en que Tú nos muestras Tu presencia Señor, Tú nos muestras Tu infinita misericordia Padre, gracias, bendigo Señor cada una de las personas Señor, que se han desconectado, los que están conectados Señor, bendecimos Señor cada hogar Señor donde llegue esta señal, Padre bendecimos en el nombre de Jesús aquellas personas Señor que te buscan, que se humillan Señor en Tu presencia, que han hecho Señor en su hogar un altar de adoración Señor, oh Padre amado y santo, oh Dios bendito, para Ti la gloria, para Ti la honra Señor, Te pido en el nombre de Cristo Jesús Señor que llenes esos hogares de Tu luz, de Tu presencia Señor, que derribes todo muro y antemuro que el enemigo haya querido poner en estos días Señor, que haya una unidad en el Espíritu Señor en Tu iglesia Dios amado, Padre enséñanos a entender Dios de gloria Tu propósito, enséñanos a encaminarnos en Tu voluntad Padre Santo, Te pido en el nombre de Jesús Señor que guardes este momento Señor con un vallado de ángeles alrededor Señor nuestro, alrededor de las personas que se conecten, de los que comparten Señor, Te pido Señor que esta palabra lleve vida Señor, lleve esperanza, que cambie Señor y transforme almas mi Dios, Te pido Señor que te glorifique Señor en Tu creación hoy Padre, Tú eres bueno y maravilloso Señor, Tú eres santo y poderoso Señor, a Ti la gloria y la honra Señor, santo eres por toda la eternidad Señor, gracias Señor en el nombre de Jesús, gracias Dios amado. Buenas tardes pueblo amado del Señor, una bendición un día más estar aquí con ustedes, un domingo más en este culto dominical, en este nuevo formato que las circunstancias nos han hecho implementar, pero la palabra del Señor no se detiene, el mensaje del Señor no se detiene, la obra del Señor no se detiene, el Señor nos mandó a compartir Su palabra, compartir el Evangelio, el mensaje de salvación, no dijo que teníamos que estar estrictamente reunidos, aunque es hermoso y agradable como dice el Salmo, son hermosos y agradables estar los hermanos juntos en armonía, pero también tenemos que adaptarnos a las circunstancias, la iglesia primitiva se adaptaba y como no podían hacerlo abiertamente lo hacían en catacumbas, lo hacían en casas, lo hacían escondidas en los momentos de que había persecución, la iglesia siempre se ha tenido que adaptar a las necesidades, pero Su palabra no se detiene, ese mensaje me ha estado percomiendo la mente en estos días, no hallaba ni aún todavía podido darle la forma que yo quiero, no sé si voy a expresarlo como lo he sentido el mensaje de la forma en que ha estado en mi corazón durante varias madrugadas, ese mensaje ha estado en mi mente dando vueltas ahí y queremos compartir un mensaje porque se está orando mucho, gente que aún negaba del Señor ahora está orando, suena raro pero gracias a esta enfermedad mucha gente ha vuelto a su rostro a Dios y han estado orando, han estado clamando por sanidades, por milagros, por muchas cosas y lo interesante de esto es que yo pensando en este mensaje, en lo que está pasando a nivel mundial, me di cuenta que estamos viviendo en un tiempo de maldad y de falta de amor, el ser humano se ha olvidado de honrar a Dios, hemos dejado de temerle pero con un temor santo, porque a Dios no se le tiene temor, uy me va a castigar, no, es un temor reverente, ese temor se ha perdido, y a veces clamamos Señor ven, Señor escúchanos, Señor visítanos, Señor, Señor, Señor, Señor, y yo quiero hacerles una pregunta, ¿Qué es lo que Dios está viendo en esta época, en esta generación, en estos tiempos? El Salmo 33.13 dice en la versión Dios Habla Hoy, el Señor mira desde el cielo y ve a todos los hombres, Salmo 33.13 versión Dios Habla Hoy, el Señor mira desde el cielo y ve a todos los hombres, ¿Pero qué es lo que Él ve? Esa es mi pregunta, quiero dejarles esa pregunta ahí, en este momento, no la pudieras comentar ahí, ¿Qué cree usted que ve el Señor en este momento? Yo te voy a pedir que compartas este mensaje, me gustaría saber si estás conectado, lo que pasa es que por ejemplo a mí no me llegan los contactos del en vivo o de la transmisión que hace mi esposa, o de las personas que lo comparten, a mí me salen pocas personas conectadas, pero en realidad hay muchas personas conectadas, gracias a Dios, y me gustaría saber de ti, y tratar de que entendamos este mensaje de esta tarde, Cuando yo leo este versículo, el Señor mira desde el cielo y ve a todos los hombres, Él no solo está mirando a su iglesia, Él no solo está mirando a los buenos, Él no solo está mirando a los que están de rodillas, Está mirando a todos, toda su creación, Y yo le pregunto, ¿Qué ve Él que esté pasando ahora, ahora en este momento? En este preciso momento, mientras nosotros estamos conectados, mientras la iglesia del Señor predica, mientras usted está tal vez con su teléfono, con su tablet, en fin, viendo este mensaje, Por eso me gustaría que más gente lo viera, porque parece increíble, en este momento voy a decirle un poco de cosas que estoy seguro que están pasando en el mundo, porque Él no solo te está mirando, Él no solo está mirando a Costa Rica, Él mira toda su creación, En este momento alguien está cometiendo adulterio, en este momento alguien está planeando un robo, en este momento otro planea un asesinato, ancianos y niños indefensos están siendo maltratados, mujeres están siendo violadas o secuestradas o asesinadas, Políticos están planeando formas de estafar y robarle al pueblo, alguien prepara drogas que matarán a muchos, otros están gastando el dinero de la comida de su familia en alcohol, aunque los bares están cerrados, van y compran en los supermercados, y ese dinero que tanto necesita su familia, lo están gastando en alcohol, En este momento muchas mujeres están prostituyendo, mientras sucede este mensaje, hay en hoteles parejas que están en fornicación, muchos están viendo pornografía, otros practican brujería, personas están robando en sus trabajos, alguien está consultando brujos y hechiceros para que los sanen, En este momento mucha gente está haciendo el mal, Dios está viendo a toda su creación, Él está viendo como se cometen crímenes en este momento, mientras estamos conectados, mientras estamos transmitiendo, en el mundo se están haciendo atrocidades delante de la presencia del Señor, En este momento la creación que Dios hizo con tanto amor, muchos que le han negado y le han dado la espalda, están cometiendo pecados indecibles, en este momento de pandemia, en este momento de dolor, de muerte, muchos, muchos están haciendo cosas terribles delante de los ojos del Señor, Se habla tanto del Señor, se habla tanto de Dios en este momento, yo le estoy hablando amado, no en el pasado, no en el futuro, en este momento en el que estamos compartiendo este mensaje, en este momento en que estamos transmitiendo en vivo, todo esto está sucediendo, hay hombres que están agrediendo a su familia, hombres que están pegándole salvajemente a sus mujeres, a sus hijos, hombres que están haciendo cosas terribles, en este momento, en este momento hay gente que se está drogando, gente que está haciendo, como le dije, lo malo delante del Señor, Como le digo, aquí estamos hablando de aquellos que no conocen del Señor, pero que está haciendo la Iglesia del Señor, la Iglesia de Dios, que está haciendo su pueblo, los que dicen hablar en su nombre, es terrible si nosotros nos ponemos a pensar, es terrible si nosotros, bendiciones tía desde Nicaragua, Dios te guarde, Dios te bendiga, Elisa Jesús Valverde, la tía desde Nicaragua, y yo le decía, que hace la Iglesia, cosas que la Iglesia hace, y que uno se ha dado cuenta, hay hermanos murmurando unos contra otros, hay quienes están usando el nombre de Dios en vano, esto es un pecado muy común, aunque usted no lo crea, no es religiosidad lo que le voy a decir, el nombre de Dios es santo, nosotros no tenemos que estar usando el nombre de Dios para todo, lo usamos como cualquier cosa, Santiago dice, sea tu sí, sí, tu no, no, no tienes por qué estar jurando por el nombre de Dios, esta gente lo está usando en vano, hasta ahora se están preparando palabra engañosa y falsa doctrina, en este momento en que estás conectado, otros están mintiendo para sacar provecho, para alcanzar un ministerio, están chismurriándole a los pastores, a los líderes, en contra de aquel otro siervo, Dios está viendo eso, en este momento Dios está viendo como miembros de la Iglesia del Señor se pelean unos con otros, el tema de este día, es que está viendo Dios, está viendo que está haciendo la Iglesia del Señor en este momento, hablamos de lo que está haciendo el impío, lo que está haciendo el que no le conoce, lo que no tiene a Dios en su corazón, los que le dan libertad a la carne, yo le pregunto que está haciendo la Iglesia, y muchos de la Iglesia están haciendo cosas parecidas a las que está haciendo el mundo, hay quienes están dejando entrar a sus casas cosas que no edifican, no sé si me estoy explicando hermanos, no sé si me estoy dando a entender amados, que está viendo Dios en este momento, en que todo el mundo le clama, en que todo el mundo le pide su presencia, que está pidiendo, que está viendo Dios, que está viendo Dios hoy en este momento, en el mundo entero, algunos vuelven su cara para no ver la necesidad del hermano, y ahora si estoy hablando de la Iglesia amados, ahora si estoy hablando del pueblo de Dios, ahora si estoy hablando de los que le buscan, ahora si estoy hablando de los que muchos se levantan en la madrugada, se está viendo Dios, se está viendo Dios ahora, es triste ver como personas hacen lo malo delante de los ojos del Señor, llamándose el pueblo de Dios, la parte que más me duele, es esta donde los que le dan la espalda a la necesidad de otros, los que llamándose hijos de Dios, no tienen misericordia de otros, cuando los fariseos le preguntaron a Jesús sobre los mandamientos, el primer mandamiento es amarás a Dios sobre todas las cosas, y el segundo es amarás a tu prójimo como a ti mismo, como estamos amando a nuestro prójimo, Dios está viendo eso, el pueblo amado de Dios, muchos de los cuales se dicen ser nacidos de nuevo, están haciendo lo mismo que hacen aquellos que no conocen a Dios, hay gente en el mundo, hay gente que no tiene a Dios, hay gente inconversa que está asesinando, y la palabra de Dios me dice, que si yo aborrezco a mi hermano, soy homicida, tal vez hago así, y no veo a mi hermano lleno de sangre, pero la Biblia me dice, que el aborrecer a mi hermano, es cometer homicidio, yo no tengo misericordia del hermano, estoy pecando también, los pecadores no van a entrar al reino de los cielos, los pecadores no van a entrar en la presencia de Dios, los pecadores no van a gozarse de la vida eterna, recuerda que por decirte cristiano, no eres salvo, el que nosotros nos reunamos en una cochera, no nos hace carros, tenemos que hacer la voluntad de Dios, Dios está viendo en su pueblo, si está haciendo su voluntad o si no la está haciendo, cuando clamamos a Dios, cuando oramos, cuando le pedimos que nos visite, el vuelve a ver que estamos haciendo, Proverbios 15.3 dice, los ojos de Jehová están en todo lugar, mirando a los malos y a los buenos, recordemos que Dios está en todo lugar y tiene misericordia de su creación, el nos ama y el quiere lo mejor para nosotros, por eso le digo, imagínese usted lo que es la misericordia de Dios, pueblo hermoso de Dios, imagínese usted lo que es el amor infinito de Dios, que el ve todo el mal que se está haciendo en este momento, el ve todas las cosas terribles que están pasando en este momento, aquella creación que hizo con tanto amor, aquella creación que hizo con tanta esperanza, que nos hizo para que señoreáramos sobre la creación, el hizo al hombre, que hizo para que señoreara sobre la creación, y el está viendo y ve todas las cosas espantosas que se están haciendo hoy en día, ve como hay leyes de muerte, ve como políticos quieren sacar a la iglesia de todo, tienen pruebas duras amados, tienen pruebas duras en este país, apúntelo ahí el día que se lo digo, el domingo 29 de abril, o 25 o 26 de abril, vienen pruebas, lo que el gobierno de Costa Rica está planeando para las iglesias de Costa Rica, es cosa tremenda, va a haber un montón de moveres para que la iglesia se desaparezca, el gobierno y las autoridades están planeando cosas para que la iglesia sea quitada, les van a poner muchas trabas, hermanos y hermanas, se los estoy diciendo, hoy 25, son las 4 y 35 de la tarde del 25 de abril del 2020, les estoy diciendo, se están planeando cosas y vienen cosas, apenas se empiece a dar una nueva normalidad y pruebas para que las iglesias sabrán que van a ser un montón de trabas para poder ir cerrándolas. Se los estamos diciendo, la iglesia del Señor tiene que estar firme, la iglesia del Señor tiene que estar parada en la brecha, no es la primera vez que quieren quitar la obra del Señor, no es la primera vez que quieren sacar a Dios de todo lado. Goza dura es darse goces con el aguijón, dice la palabra, esta gente no sabe lo que está haciendo, esta gente no sabe con quien se está metiendo, va a llegar el momento en que van a tener que darle cuenta al Señor. Pero Dios todo lo ve y sigue teniendo misericordia y como les estaba diciendo, con todo lo malo que está pasando en el mundo, Dios sigue teniendo amor por su creación, como no nos ha destruido acordándose de las promesas que ha hecho. Recuerden que a Moisés le dijo nueve veces me ha tentado este pueblo para que les destruya. Se cree que el pueblo de Israel hacía las atrocidades que se están cometiendo hoy en día. El Salmo 110 dice, no ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados, por misericordia, gracias, que no nos ha pagado conforme a nuestras obras, ni conforme a nuestras iniquidades, por amor, por amor infinito, por todo ese amor que nos tiene, no nos ha pagado conforme a nuestras obras. Hermanos, póngase usted a pensar, si Dios le pagara a usted conforme lo que usted le está dando a él, cuando clamamos a Dios, venga a tu reino a nosotros, cuando nosotros le decimos Señor, míranos con amor, cuando nosotros le pedimos eso, y que él diga, bueno, yo le voy a pagar conforme lo que usted me da a mí, conforme lo que yo veo que usted está haciendo, yo le voy a retribuir. Por dicha está ese Salmo que nos dice, no ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados, con todo esto que él ve, es suficiente para que estuviera destruyéndonos, para que ya no existiéramos. Pero él tiene mistericordia eterna, él tiene amor eterno, saludes Leti, Graciela, bendiciones, Jesús, bendiciones, Héctor, bendiciones, las bendecimos en el nombre de Jesús, nos alegra que se conecten, nos alegra, déjanos un mensaje, queremos orar por ti, queremos unirnos como iglesia, hay necesidades, la iglesia del Señor tiene que estar unida. Con lo que viene, tenemos que estar más unidos que nunca, amados. El Salmo 113 dice, como el Padre se complace de los hijos, se compadece Jehová de los que le temen, y ahí es donde está el secreto, Jehová se compadece de los que le temen, de los que le buscan, de los que le honran, de los que se arrepienten, de los que cambian, no de los que juegan a la iglesita. De los que hacen su voluntad. Pero en todo esto malo que Dios ve, también está habiendo aquellos verdaderos hijos de Dios, aquellos que saben hacerlo bueno, porque amados, no todo es malo en la vida, en este momento hay gente, hay gente que está haciéndolo bueno, hay gente que está haciendo lo correcto. Hay gente que está en la presencia de Dios, hablamos como hay gente en este preciso momento mientras estamos transmitiendo, que están cometiendo pecados, pero también hay gente que está buscando la presencia, también hay gente que está buscando hacer lo que le agrada a Dios, le están buscando de verdad, con un corazón constricto y humillado. Yo le voy a decir querer a Dios en este momento de lo bueno. Veo una iglesia que se está uniendo, como revolución juvenil, muchas iglesias uniéndose con un mismo propósito, predicar el evangelio, predicar su palabra. Iglesias que se están uniendo para llevar un mensaje, iglesias que se están uniendo para llevar una palabra de esperanza, que están buscando llevar la sana doctrina. Muchas iglesias ahora han cambiado su doctrina y le voy a decir por qué. Porque están transmitiendo en vivo. Muchas de las iglesias que antes no transmitían en vivo y que optaron por hacer este tipo de misiones, han cambiado su doctrina. ¿Por qué? Porque hay gente que les puede cuestionar. Hay iglesias que todo lo siguen haciendo en privado, en grupos privados, por Zoom, por las plataformas que tengan. También, Dios, la palabra tiene que predicarse. Pero hay iglesias que han salido del confort y han visto y han cuestionado aquel mensaje de prosperidad. Y ahora han empezado a dar mensajes de vida, de esperanza. Pastores que volvieron a la senda antigua de su llamado, ese llamado de amor y de misericordia por las almas, ese llamado que los hizo levantarse con poder y fuego. Dios está viendo esos cambios también. Dios está viendo cómo las personas se están siendo transformadas. ¿Por qué? Por el mensaje de una iglesia que tuvo que salir de las cuatro paredes. Ya no está encajonada en ese grupo que era el que entraba a la iglesia. Ahora se han tirado al mundo entero porque las redes sociales nos permiten abarcar el mundo entero. A nosotros nos siguen de Estados Unidos, de Nicaragua, de varios países. Y eso es lo que ha pasado. Gloria a Dios por las tecnologías. Dios está viendo cómo hemos usado los recursos que tenemos para predicar. Él está viendo con agrado todas estas cosas que la iglesia está haciendo unidas. También Él está viendo cómo en este momento hay gente intercediendo, llorando, no solo para que esta pandemia se acabe, porque va a llegar el momento en que se va a terminar, sino para que la gente esté fortalecida, para que la familia tenga comida, para que haya sanidad, para que se vaya la violencia, para que venga un verdadero amor. Dios está viendo a estas personas que oran, que interceden. Aquellos intercesores que estaban encajonados en la iglesia, donde no podían levantar su ministerio. En estos días han levantado su ministerio, orando en sus casas. Se unen a través de las plataformas y de las redes sociales a orar, a interceder en grupos de madrugada. A mí me hace gracia, porque yo a veces en la madrugada veo un versículo que me llama la atención y lo posteo. Y veo cómo a alguien al momentito le da me gusta. Quiere decir que hay alguien que también está a estas horas levantado, de los pastores que conozco. Me imagino que haciendo lo mismo. Estamos en un mismo espíritu, orando y clamando. Dios está viendo cómo el pueblo de Dios está orando y está clamando y está ansioso, provocando el avivamiento, provocando la venida de su presencia. También Dios está viendo cómo en este momento muchos cristianos están teniendo misericordia y están ayudando al necesitado. Antes me dolía decir, bueno no, es que yo no ayudo, porque yo lo doy a mi iglesia. Y se quitaban esa carga de encima. Yo doy lo que tengo que dar y que mi iglesia termine de hacer lo que tiene que hacer. Ahora no, ahora lo están haciendo ellos mismos. Están llevando la ayuda al necesitado, como la Biblia nos manda. Nos hemos vuelto buenos samaritanos. Dios está viendo, porque en este momento hay gente repartiendo alimentos. ¡Emily, bendiciones! Dios está viendo cómo el pueblo del Señor se ha unido para recoger recursos y llevar a aquellas personas, muchos que no conocen del Señor, muchos que no visitan su iglesia. Esto es lo que Dios nos ha mandado hacer. Dios está viendo, porque en este momento es lo que la iglesia está haciendo. Millones que han creído en su Palabra se mantienen firmes, predicando el Evangelio y dando aliento. Muchos a través de WhatsApp están orando por las personas, están orando por los vecinos, están intercediendo por familias de otras comunidades. Millones están compartiendo la Palabra de Dios. Antes quedaba encerrado en la iglesia para que el pastor y los que predicaban lo hicieran. Ahora se han abierto puertas de oportunidad para que los ministerios se levanten. Dios está viendo eso también con agrado. Recuerda que empezamos viendo que Dios ve a los que hacen el bien y a los que hacen el mal. Dios ve cómo usted se está levantando, pastores evangelistas predicando la sana doctrina y llamando a la santidad. Santidad sin la cual nadie verá a Dios. Dios ve con agrado un pueblo humillado ante su presencia. Segunda Eclónica 7.14 Si mi pueblo se humillara y buscara mi rostro y se apartara del mal, yo iré de los cielos y sanaré su tierra. Él ve cómo millones se han vuelto a él, se han postrado, han clamado. Eso es lo que Dios quiere ver en su pueblo, un pueblo unido, humillado, clamando. Eso es lo que miles de personas están haciendo ahora, en este preciso momento, mientras usted está viendo este mensaje. A través del mundo, millones están orando, clamando. ¿Para qué? Para que su mano se levante en favor de su pueblo. Es de cómo muchos han dejado el pecado. Muchos se han alejado del pecado en estos días, han visto a su mano poderosa. Dios permitió esto para que muchos llegaran hasta el fondo y tuvieran que alzar su mirada a los cielos donde está Dios y decir, Padre, ahora me doy cuenta, ahora sé quien manda. Oh Santo Dios de gloria, gracias. Gracias Padre, gracias Dios, gracias Señor, porque aun de lo que parece malo, Tú sacas cosas buenas. Tu palabra dice que todas las cosas ayudan a bien a los que te aman. Tú eres bueno Dios mío, Tú eres santo y poderoso. Dios está viendo todas esas personas que han entregado su vida, no en un momento de emoción, en una calambrina, en una campaña. No, sino ahora ellos solos en la intimidad de su cuarto, que han dado cuenta que el único que tiene autoridad se llama Jesucristo. Y han vuelto su mirada a Él. No todo es malo hermanos. Esto es lo bueno que Dios ve. Él ve como un remanente, aun sigue haciendo lo bueno. Muchos están haciendo su voluntad, muchos están firmes en la palabra, firmes, firmes en la palabra, predicando. Dios viene pronto, arrepiéntete. Este es un tiempo de cambio, este es un tiempo de presencia, este es un tiempo de vida. Dios viene pronto, arrepiéntete. Este es un tiempo de cambio, este es un tiempo de presencia, este es un tiempo de búsqueda. Predicando que la santidad es lo único que nos va a llevar a la presencia de Dios. Y sin santidad nadie verá a Dios. Gente que está predicando ese mensaje. Ahora se acabaron los mensajes de vienen tiempos de cosecha, de vienen tiempos de caza, de vienen tiempos... Todos esos mensajes han desaparecido extrañamente. Siguen cayendo falsas doctrinas, falsos mensajes. Ustedes vieron el mensaje que se publicó tanto en las redes, de una niña diciendo que el Señor me dijo que no salieran el 21 de abril porque pasaba el ángel de la muerte y empezaron... Todos esos mensajes falsos están saliendo a la luz ahora. Falsos profetas. Amado, la palabra nos dice tengan cuidado porque en los tiempos finales se levantarán falsos profetas, falsas doctrinas. Esto está pasando ahora, pero sigue el remanente que Dios está viendo, clamando. Clamando como clamaba Abraham por los justos de la tierra. Sigue ese remanente, haciendo la voluntad. No tengas temor, pueblo de Dios. No tengas temor, esfuérzate y sé valiente. No tengas temor. Eso es lo que Dios quiere que prediquemos. Cristo es el camino, la verdad y la vida. Eso es la palabra que tenemos que mandar. Él está viendo tu fe y Él sabe que aunque en ocasiones dudes, te mantienes firme. Él te está viendo. Tú que estás conectado en este momento. No tengas temor. Siga adelante. Dios te está viendo con agrado lo que tú estás haciendo. No tengas temor. Él te está viendo. Él está viendo tu esfuerzo. Él está viendo como tú te mantienes en la brecha. Tú eres de los buenos. Tú eres de los escogidos. Tú eres de los que no doblan rodillas a Baal. Tú eres de aquellos escogidos, hegeónicos. Él está viendo lo que tú haces. No temas. No desmayes. Mantente firme. Senda fuerza al cansado. Vení a mí el que está cansado y trabajado. Yo te haré descansar. Acérrate a la palabra que Dios ha dado. Hoy es un tiempo de bendición para los que creen. Usted va a decir, pero ¿cómo? Si hay crisis, si hay escasez, si hay... Siervo de Dios, yo no he visto la escasez. Los que me conocen, los que tenemos el círculo cercano de personas con las que compartimos sinceramente, saben que no miento. Nosotros no hemos visto la escasez. Hemos visto la mano sobrenatural de Dios. Hemos visto a Anette realizando testimonio. Saludes a la pastora Carmen. Bendiciones, pastora. Hemos visto cómo Dios ha sido proveedora sobreabundantemente. Lo hemos dicho en las otras transmisiones. Dios es bueno. Dios es fiel. Mantente firme. Sigue predicando la gran doctrina. Dios está viendo lo que haces y lo está viendo con agrado. Dios se agrada de lo que haces. Dios se agrada de tu fe. Hay fe que agrada a Dios. Dice una canción. En este momento Él está viendo a las personas que como la mujer de flujo de sangre, se arrima por detrás, se arrima y le toca con una mano cargada de sangre. De fe. Nosotros estamos con una palabra cargada de fe, sabiendo que pronto pasaremos esta prueba. Pero que en tanto y cuanto estemos en este momento firmes en su palabra, también tenemos de bendición para muchos. Hijo santo de la gloria. Mira lo que dice el libro en la segunda de Pedro, capítulo 3, versículo 9. Segunda de Pedro, capítulo 3, versículo 9. El Señor no retarda su promesa, según algunos lo tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. Él sabe que tú eres el instrumento que Él va a usar para que muchos lleguen a sus pies. Tú eres el instrumento que Dios quiere usar para que muchos le conozcan. Él sabe que su venida está pronta, pero quiere usar al pueblo de Dios, quiere usar a los guerreros valientes, quiere usar a aquella gente que le ha creído para que muchos le conozcan. Y cuando tú haces la voluntad de Dios, un galardón te espera. Dios te está viendo, te está viendo con agrado, te está viendo con gozo. Cuando tú haces su voluntad, Él se deleita. Tú eres un instrumento que Dios va a usar. ¿Para qué? Para que esa salvación llegue. Él no quiere que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. Tú eres el instrumento que lleva a esas personas al arrepentimiento. Tú eres su iglesia. Tú eres parte del cuerpo de Cristo. Alabado sea tu nombre, Señor Jesús. Por eso es que te digo que aunque no veamos fruto ahora, lo que estamos haciendo es agradable ante sus ojos. Vendrán tiempos de regocijo y con ellos el pago según nuestras obras. Porque Dios sabe pagarle a quien le sirve. Saludos, ingres, bendiciones. Pues así me explico, pueblo del Señor. Dios ve lo que tú estás haciendo en este momento. ¿Qué estás haciendo con lo que Él te dio? Tú estás haciendo su voluntad, Él se agrada. Tú estás siendo un instrumento para que muchos vengan a sus pies, para que le conozcan. Él te quiere bendecir para que tú seas ejemplo, para que tú puedas testificar de las cosas maravillosas que Él hace. Mientras muchos están clamando porque no tienen que comer, porque están enfermos, porque el pueblo del Señor tiene que tener para compartir. Porque eso es lo que Dios quiere, darte para que tú seas testimonio. Y estas señales seguirán a los que creen. Bueno es Dios y su misericordia es para siempre. No te desanimes, tu semilla dará fruto. Lo que tú estás haciendo dará fruto. Dios es fiel. Dios da semilla al que siembra. Él te va a levantar en tus dones, Él te va a levantar en tu llamamiento. No creas que porque no estás en la iglesia no vas a crecer ministerialmente. Ahora es cuando el Señor va a empezar a honcharte. Ahora es cuando el Señor te va a decir, aquí es donde yo quiero que te muevas. Aquí es donde yo quiero que fluyas. Aquí es donde yo quiero que empieces a levantar tu ministerio. ¿Cuántos que estaban estancados en las cuatro paredes de su iglesia? Porque había una estructura encajonada y ellos no podían levantarse. Ahora se están levantando ministerialmente. Dios les está levantando, ¿para qué? Para que en este tiempo de dificultad y de prueba, tú seas el instrumento que Dios use para ese arrepentimiento de aquel hermano. Ahora que has tenido tanto tiempo sin congregarte, vuelves tu mirada al vecindario. Vuelves tu mirada y te das más cuenta de lo que pasa en tu comunidad. Y empiezas a orar, y empiezas a interceder. Ahí es donde Dios te levanta. Muchos intercesores y guerreros espirituales se han estado levantando en estos días. Otros pastores siguen dando discipulados. Discipulados por la web o por la forma que sea. Es tiempo de que empieces a poner en práctica lo que tu pastor te ha enseñado. Busca a quien discipular. Empieza a mandar mensajes de WhatsApp. Aquella persona que tal vez no podías visitar, pero mándale un mensaje de esperanza. Empieza a abrir puertas. Empieza a preparar el terreno para que cuando podamos llegar de nuevo a congregarnos, puedas visitarle. ¿Qué estás haciendo con los discipulados? ¿Qué estás haciendo con la enseñanza? ¿Qué estás haciendo con lo que estás aprendiendo? Es para compartir, amado, lo que tú recibes. Es para compartir. De verdad que en ocasiones hemos dicho que Jesucristo le enseñaba a los discípulos porque él necesitaba que estos discípulos aprendieran para que luego fueran ellos los que hicieran la obra. Tu ejemplo va a hablar más que mil palabras. Muchos van a conocer de la iglesia de Cristo por sí. No sé si lo estás creyendo. Recíbelo, en el nombre de Jesús. Recíbelo, di amén. Pero muchos van a conocer de Cristo porque Dios te va a usar, te quiere usar. En el nombre de Cristo Jesús es el tiempo de que muchos estén aprendiendo. Hoy es el tiempo de Dios para levantar su remanente, para darle poder. Recibe en el nombre de Jesús lo que te digo. Porque lo digo en el amor de Cristo. Muchos van a venir a Cristo porque tú te estás dejando usar por el Señor. Tú eres la iglesia, tú eres el cuerpo. Tú eres la obra hecha por el Señor. Tú eres la obra hecha por el Señor. Tú eres la obra hecha por el Señor. Tú eres la obra hecha por el Señor. Tú eres la iglesia, tú eres el cuerpo. Tú eres la obra hecha realidad. Juntos vamos a traer lo sobrenatural del reino a esta tierra. Juntos. Tú quieres que el Señor te use. Entrégate, entrégate. No nades contra corriente. No quieras hacer algo que no es para ti. Cuando la gente va al mar y hay un lugar donde hay olas de resaca. Los salvadores le dicen, no nades contra ella. Déjate llevar. Va a llegar el momento en que la fuerza se va a acabar y vas a estar libre. No trates de ir en contra de tu llamado. Déjate llevar por lo que Cristo te ha dado. Déjate llevar por ese ministerio. Déjate llevar por el Espíritu Santo. Y vas a ver cómo los dones van a empezar a fluir en ti. Cómo tu llamamiento va a empezar a crecer. Cómo todas esas pruebas y manifestaciones de poder y gloria van a empezar a fluir. Porque la palabra de Dios que lo promete no soy yo, sino que es que está escrito. Saludos Eduardo Araya. Bendecimos en el nombre de Jesús. Déjate usar por el Espíritu de Dios. No tengas temor. No eres tú el que va a hablar. Es el Espíritu Santo a través de ti. Abre tu boca que yo la llenaré. Dice la palabra. Dios ve lo que tú haces. Dios ve el esfuerzo. Ve cómo te preparas. Ve cómo oras. Antes de hacer una palabra. Antes de hacer un en vivo. Tú oras y tú clamas. Y tú le dices Señor, quiero ser un instrumento que tú uses. Señor yo quiero buscar, dar la palabra. Pero que sea la palabra que tú pones en mi boca. Gloria a Dios por eso. Gloria a Dios por lo maravilloso. Joshua 1.9 dice. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente. No temas ni desmayes porque Jehová tu Dios estará contigo. Donde quiera que vayas. Donde quiera que estés. En el lugar donde tú estés. Ahí va a estar Dios contigo. En el lugar donde tú estés. Ahí va a estar la presencia de Dios contigo. En el lugar donde tú estés. El Espíritu Santo va a estar contigo. Dándote fuerza. Dándote valor. Dándote palabra. Dándote autoridad. Es la promesa de Dios. ¿Para quiénes? Para los que creen. Para los que arrebatan. Para los que poseen. Para la iglesia del Señor. Como les dije al principio. Hay gente que está haciendo lo malo. Pero tú estás haciendo lo bueno. Hay gente que está haciendo lo que no le agrada a Dios. Pero tú estás haciendo lo que sí le agrada. Saludos José Alberto. Te bendecimos. Gente que hace lo malo. Pero también estamos los que hacemos lo bueno. Los que buscamos esa presencia. Y los que buscamos la presencia. Tenemos el poder de Dios para transformar las circunstancias. Porque la palabra de Dios es la que tiene poder. Aquel hermano, aquel familiar que no conoce de Dios. Va a empezar a creer por lo que está bien de en ti. Por la forma en que el Espíritu Santo te está usando. Porque tú te estás dejando usar. ¿Tú crees que Pedro empezó a tener esas manifestaciones de poder de un momento a otro? Aquel hombre que se hundió en las aguas. Tuvo que empezar con momentos de duda. A fluir y a crecer en lo espiritual. Lo que Dios quiere que haces es hacer contigo. ¿Por qué? Porque Él es como la luz de la aurora. Dice que va de aumento en aumento. Hasta que ya es perfecto. Tal vez hoy no veas los resultados que quieras. Pero Dios te está usando. Te está transformando. Él te quiere dar poder. Él te quiere dar autoridad. ¿Pero qué quiere? Que domines lo que te va a dar. ¿Recuerdas lo que pasó con los discípulos que vinieron? Conocidos del trueno que dijeron. Si quieres oramos para que caiga fuego sobre esta gente. Y Él les dijo, no sabéis de qué espíritu sois. Ellos no sabían dominar lo que tenían. Dios te quiere preparar para que te muevas en el nivel sobrenatural que han preparado para su iglesia. Y tú eres parte de la iglesia. Él te está viendo con agrado. Si tú eres de los que estás haciendo su voluntad. Si tú eres de los que estás apartado del mal. Si tú eres de los que están buscando su presencia. Si buscas la santidad. Si buscas agradarle con todo. Él te va a empezar a levantar. Y Él va a empezar a moverse a favor tuyo. Y de tu casa. ¿Qué pasó con Obededón? Cuando Obededón dejó entrar a Dios a su hogar. Fue bendecido él y su casa. Todas las cosas empezaron a ser bendecidas. Hizo lo que Dios quiere hacer con su iglesia hoy en día. Mientras el mundo veía. Mientras Egipto veía plagas. El pueblo del Señor veía protección. Tú eres el pueblo del Señor. Y el mundo verá plagas. Pero tú verás la mano poderosa de Dios. Tú verás la mano de Dios guardando tu casa. Guardando tu salud. Guardando tu alacena. Guardando tu familia. ¿Por qué? Porque Dios es fiel. Y cumple su palabra. Tú has sido llamado para brillar en este mundo de oscuridad. Camina confiado hacia la victoria. Camina confiado hacia la victoria que Dios le ha dado a su pueblo. Tú eres luz. Recuerda, tú eres luz. El mundo, la pandemia, el enemigo, lo que sea. Te quiere apagar. Pero no podrá apagar la llama que Dios ha prendido en ti. La llama que ha puesto en ti. En el templo que eres tú. La llama del Espíritu Santo que sale de ti. El enemigo no la puede apagar. Porque eso es inapagable. Porque es poder de Dios. Sigue adelante. No tengas miedo. No temas ni fallezcas. Porque Jehová, tu Dios, te hará victorioso. Y al final de esta pandemia, muchos dirán. Alabado este nombre de Jehová. Porque yo vi cómo mantuvo a esa familia. Aquellos cristianos, aquellos que predicaban. Ellos nunca estuvieron en necesidad. Ellos le compartieron alimento. Ellos le compartieron no solo alimento espiritual. También alimento material. Ellos supieron y tuvieron para compartir. Estas son las cosas maravillosas que Dios hace. Si tú crees. Empezarás a moverte en la sobrenatural. ¿Por qué? La palabra de Dios. Para el que cree, todo le es posible. Nosotros esperamos la venida de Jesucristo. Si en este momento viniese Jesucristo. Como preguntó aquel día. ¿Hallará fe en la tierra? ¿Hallará fe en ti? Si en este momento suenan las trompetas. ¿Qué te encontrarás siendo? ¿Qué está haciendo el mundo? ¿Pecado, abominación, anatema? O lo que tiene que estar haciendo la iglesia. Orando, intercediendo, clamando. Arrebatando. Dios está viendo lo que tú haces. En este preciso momento. Dios te está viendo. Estás haciendo su voluntad. Te está viendo con agrado. Estás diciendo. Yo quiero usar. Yo quiero usar a José Alberto. Yo quiero usar a Ingrid. Yo quiero usar a Rigoberto. A Leti. A Marlen. Yo quiero usar a Carmen. A Ingrid. A Eduardo. Yo quiero usarlos. A todos ellos. Yo quiero llevarlos de gloria en gloria. De poder en poder. Yo quiero usarlos. Si él te está viendo en este momento con agrado. No tengas temor. Y levántate. Y camina hacia la victoria. Hay gente que está esperando que tú abras su boca. Hay gente que está esperando que tú les des un mensaje. Tú eres el ángel que Dios va a mandar. Para que esa persona le conozca. Dedícale tiempo a Dios. Yo estaba pensando un día de estos en eso. Y nosotros. Bendiciones a Erita Sancho. Dios te bendiga. Y veía como nosotros le quitamos tiempo al mundo para entregárselo a Dios. Y debería ser al revés. Si es que tenemos que coger tiempo de Dios para ir a hacer las cosas del mundo. Del mundo no al pecado, aclaro. Y no ir a trabajar, ir a hacer muchas cosas. Que no son de Dios. Pablo hacía tiendas. Pero Pablo hacía tiendas cuando era estrictamente necesario. Pero su mayor obra era predicar el Evangelio. Y yo sabía sostenerle. Pero nosotros no queremos darle tiempo a Dios. Dios te ve con agrado, amado y amada. Dios tiene grandes planes para ti. Yo quiero orar en este momento por ti. Quiero orar para que el Señor te use con poder y gloria. Quiero orar para que tu ministerio sea levantado. Quiero orar para que empieces a fluir en los dones del Espíritu Santo. Quiero orar para que el Señor siga viéndote con agrado. Y se vaya todo espíritu inmundo de engaño, de letalgo y de confusión. Toda mentira de Satanás. Toda mentira de que yo no puedo. Toda mentira de que yo no soy, nunca voy a ser usado por el Señor. Yo no tengo llamamiento. Yo no sirvo para servir. Vamos a orar. Me gustaría que oraras ahí conmigo. Ora, creyendo. Porque para el que cree, todo lo es posible. Todo lo que pidieras, leyendo, lo recibiréis. Yo creo que Dios nos oye. Yo estoy seguro y convencido de que Dios nos oye. Padre, en el nombre de tu Hijo Jesús. Señor Dios de la gloria. A ti la gloria y la honra, la exaltación, el señorío. Todo tu Dios eres bueno y eres maravilloso. Solo ti, Señor, tienes autoridad sobre todas las cosas. Le agradezco, Señor, por cada una de las personas que se han conectado, que han oído el mensaje, que lo han recibido y que han guardado las palabras, Señor. Yo te pido por esos ministerios, Señor, que tú estás usando, que quieres usar y que vas a usar, Señor. Llénalos de tu presencia, llénalos de tu visión. Llénalos de ti, Dios de gloria. Padre, en el nombre de Cristo Jesús, Señor. Padre, en el nombre de Cristo Jesús, Señor. Ya llena esta tierra, Señor, de tu visión. Para esas personas que se han atrevido a creer, que se han mantenido firmes en tu palabra, Señor, orando y clamando, que se han alejado del pecado, Señor. Que han dicho, Señor, yo quiero ser instrumento tuyo, Padre. Muéstrales tu mano, Señor. Llénalos, Señor, de este poder que transforma, de este poder que hace descender lo sobrenatural del cielo, Señor, aquí a la tierra. Esas personas que tal vez en la iglesia no podían, Señor, fluir, ahora tú los estás usando, Dios. Úsalos más con poder, Señor. Que ellos vean, Señor, que tú tienes un plan perfecto. Que tu luz no se apague, Señor, en este tiempo. Que nosotros podemos llevar esa palabra, Señor, ese don de sanidad, Señor, que tanta falta hace en este momento, Dios. Se han preguntado, Señor, ¿dónde están los que tienen el don de sanidad, Señor, en este momento, Padre? Levántalos, dalos salir, Señor. Quizás, Dios mío, muchos estén en la cueva como Elías y David. Sácalos, Señor, para que cumplan su llamamiento. Sácalos, Señor, para que fluyan, Señor, en el don que tú les has dado, Señor. Multiplícales, Señor, Dios mío, las fuerzas. Quita el temor, Señor. Muéstrale que tú vas delante de ellos como poderoso gigante. Oh, Padre Santo y Padre Amado, trazí la gloria y la honra, Señor. Desata, Señor, el don de ciencia, el don de sabiduría, el don de palabras, Señor. Trae, Señor, revelación que venga de lo alto. Padre, levántase. El don de dar, Señor, ¿qué tanto, Señor, se necesita hoy en día? Muchos no quieren ese don. Todos quieren ser profetas, Señor. Todos quieren ser apóstoles. Todos quieren, Señor, palabras de ciencia. Pero dale el don de dar, Señor, porque tú, Señor, das semilla al que siembra, Señor. No permitas que tu pueblo se siga comiendo la semilla. Tu obra tiene que seguir, Señor. Dale el don de dar, Señor, Padre, porque cuando el pueblo da, Señor, tú multiplicas, Señor. Porque es como el aceite de la viuda, que no escasea, Señor. Levanta a esas personas. Yo te ruego en el nombre de Jesús, Señor. Toca corazones para que nos ayuden, Señor, a seguir preparando alimento para aquellos que no tienen, Padre Santo. Toca los corazones de empresas, Señor. Personas que tienen su buen salario, sus buenos recursos, Señor. Padre, empresarios que nos donen, Señor. Insumos que nos donen, Señor. Padre, materiales. Queremos hacer tu voluntad. Guíanos, Señor. Te lo pedimos en el nombre de Cristo Jesús, Señor. Creyendo que hecho está porque tu palabra así lo dice, Padre. Creemos y estamos en la ley del acuerdo. Yo te pido, Señor, que visites el hogar de cada uno de los hermanos, Señor. Y donde haya temor, Señor, se ha echado fuera ahora en el nombre de Cristo Jesús, Señor. Donde haya enfermedad, Padre Santo, se va por el poder de la palabra. Padre, que tú viniste a traer sanidad, Señor, a tus hijos, Dios. En el nombre de Jesús, por tu llaga, fuimos nosotros sanos, Señor. Tú venciste, Señor, toda enfermedad en la cruz del Calvario. Para ti la gloria, para ti la honra, Señor. Padre, que tu iglesia se levante en un mismo sentir, en un mismo espíritu. Y que te honremos, Señor, con lo que hacemos, Padre. Te lo pedimos, Señor, en el nombre poderoso de Jesucristo, Señor. Que la iglesia del Señor sepa unirse. Que las iglesias se unan para adorarte. Que la iglesia se una, Señor, con ministerios que oren, que clamen, que intercedan. Porque donde está la unidad, está la presencia. Tu palabra dice que donde dos o tres estén en tu nombre, ahí estás tú, Señor. Yo te agradezco por lo que has hecho. Yo sé que hay milagros que se han realizado. Así como tú nos ves, nos has escuchado. En este momento, gente ha sido tocada. Gente ha sido apartada del pecado. Gente ha sido transformada, Señor. Ministerios han sido activados. En el nombre de Jesús, ministerios que estaban dormidos y aletargados, se levantan ahora para que tu palabra sea predicada, Padre. Lo creemos y lo declaramos, Señor, porque tu palabra es fiel y eficaz. Padre, te lo agradecemos y declaramos que hecho está en el nombre de Cristo Jesús. Amén y Amén. Saludes, pastoradores, que Dios te bendiga. Ha sido un placer, hermanos, poder compartir este momento con ustedes. Te bendecimos en el nombre de Jesús. Te pedimos que te mantengas firme en la voluntad de Dios. Haz lo que Dios quiere. Haz lo que Dios tiene planeado para ti. Como te dije antes, Dios tiene pensamientos de bien y no de mal. Déjate usar por el Espíritu Santo. Dios te guarde. Dios te bendiga. Nos vemos pronto. Mantente firme. Levántate, Iglesia del Señor. Y como te lo he estado diciendo estos días, sonríe, porque el diablo se enferma. Ver cómo él quiere atacarte en la Iglesia del Señor, está contenta. Bendiciones, Dios te lo guarde. Amén.