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Paulo Balcarcel
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This morning, the speaker introduces Pablo, a respected person in the church. Pablo is a theologian and evangelist, dedicated to studying the Bible and building leadership and evangelization in Guatemala. They discuss controversial topics like abortion, gender ideology, politics, and religion. They emphasize the importance of being prepared to respond to these controversies and distinguishing between useful discussions and pointless arguments. They also mention the need to avoid unnecessary debates and focus on topics of faith and doctrine. The speaker gives an example of an opinion-based topic in Corinthians 7, where Paul expresses his opinion that it is better not to marry. They encourage the audience to approach controversial topics with understanding and discernment. Bueno, esta mañana tengo el privilegio de presentar para mí una persona a quien respeto muchísimo, lo conozco ya hace varios añitos y hemos tenido la oportunidad también de tener algunas pláticas de temas muy interesantes, verdad, con Pablo. Me anima, realmente me anima muchísimo tener hermanos como él en la iglesia. Yo realmente me recuerdo de la iglesia y quizá no tengo un recuerdo de una enseñanza bíblica como tal en el principio, pero me siento muy alegre, muy bendecido de que tanto Pablo como otros hermanos se han dedicado y han preparado parte de su vida para el estudio de la Biblia. Entonces eso nos alimenta muchísimo, nos ayuda muchísimo en nuestras convicciones, en nuestras bases y en nuestros fundamentos, verdad. Entonces de verdad para mí es un enorme privilegio poder presentar hoy a Pablo. Voy a leer algunos de los estudios que Pablo ha realizado. Él es licenciado en teología, con énfasis en exposición bíblica, actualmente es evangelista, líder de una región en Guatemala y pues su visión es construir un liderazgo en Guatemala y evangelización en ese país y dentro de sus sueños está seguir desarrollando el Ministerio de Enseñanza Bíblica en las iglesias de Centroamérica. Me anima muchísimo, conozco a Pablo, conozco, él ha estado casado por 21 años, ¿verdad? 21 años, tiene dos hijas ya grandes, así que de verdad los dejo con ustedes, es un honor para mí presentárselos y recibámoslo con un caluroso aplauso, por favor. Ok, yo di una clase acá y oía que como gritaban, qué será, qué sé que estaban ustedes. Bueno, buen día, buenos días, qué bueno poder compartir con ustedes este tiempo, qué privilegio por estar con la nueva generación y bueno, qué bueno que también estos temas podemos tratarlos acá con ustedes y me da pues mucha alegría, me siento muy identificado también, no por la edad obviamente, pero sí porque cuando yo llegué a la iglesia, pues el ministerio en el que yo me bauticé y empecé mi liderazgo fue el Ministerio de Universitarios y pues amamos mucho el ministerio, tenemos el privilegio también de tener a nuestras hijas en acción estudiantil, de tener también la relación de discipulado con Diego y Jiré allá en los universitarios de Guatemala, así que hay muchas cosas que nos conectan y nos da mucha alegría poder estar acá con ustedes. Así que vamos a hablar sobre temas controversiales y vamos a hablar, les parece, y vamos a la palabra de Dios. Gracias, te damos, Señor, por la oportunidad, Dios, de estar juntos, gracias, porque nos das el privilegio, Dios, de poder compartir este tiempo de aprendizaje juntos, poder crecer, poder prepararnos cada vez más para estudiar Tu Palabra, para poder ayudar personas, para poder cuidar a otros, Señor, y amarles, amarles a través de una sana enseñanza. Gracias, te damos y quiero orarte en nombre de Jesús, amén. Que bueno, antes de ir a la clase propiamente dicha, quiero leerles una escritura que está en la Carta de Judas, versículo 22, dice, tenga misericordia de algunos que dudan, a otros sálvenlos arrebatándolos del fuego, a otros tenga misericordia con temor, aborreciendo aún la ropa contaminada por la carne. En la Carta de Judas, Él está ayudando a las iglesias a entender que hay que tratar los temas controversiales, que hay que ayudar, que hay que salvar, que hay que rescatar y cuidar a las personas. Y una manera de cuidar y amarles es ayudar a entender el Evangelio, ayudarles a entender la verdad. Así que, en algunas cosas que vamos a ver hoy, obviamente no vamos a tratar el tema controversial como tal, no es lo que se me ha designado, pero bueno, ¿qué es una controversia? Controversia es que es objeto de discusión y da lugar a opiniones contrapuestas, ¿verdad? Eso es una controversia y ustedes están en una línea de mucho fuego con respecto a la controversia, a las ideas y a las cosas que ustedes están escuchando constantemente. Hace, en la primera clase hablábamos sobre el posmodernismo y ver cómo ha influenciado nuestra cultura y cómo podemos contrarrestarla. Y aunque son teorías, ideas y cosas que se pueden hablar, identificar, ustedes las están viviendo, ¿verdad? Muchas de ellas ustedes las están viviendo y están de frente a esto. Entonces, bueno, eso es una controversia, algo que choca, que tienen opiniones contrapuestas. ¿Qué temas controversiales son más comunes? ¿Qué piensan? Ayúdenme. El aborto es un tema controversial. Ideología de género es otro tema controversial. ¿Qué otro tema? La política también es un tema controversial. Feminismo es un tema controversial. La Biblia como tal es un tema controversial. ¿Qué otro tema? El fútbol, muy controversial, bastante, bastante controversial. Perdón, la religión, la pena de muerte, muy bien, ¿verdad? Es un tema bien controversial. ¿Algún otro? La eutanasia, planificación familiar, el noviazgo, ¿verdad? Es un tema controversial. El matrimonio, ahí viven en controversia. Sí, ok, gracias. Bueno, hay muchos temas, ¿verdad? Hay muchos temas controversiales, algunos los podemos vivir. Un ejemplo de biología de género, es un tema controversial que algunos ven de lejos y un ejemplo en mi caso, como alguien que trabaja para la iglesia y vive en la iglesia, digámoslo así, todos los días y convivo con hermanos y evangelizamos personas y todo, pero a veces no convivo tan de cerca con personas que están viviendo la ideología de género, y ustedes sí, en la escuela. Pueden tener compañeros, maestros, amigos y lo ven ahí. Entonces ya no es un tema nada más controversial, sino es algo que te toca el corazón, porque tú dices, bueno, tal vez este amigo, ¿verdad? Que es homosexual, yo lo aprecio, ¿verdad? Yo lo quiero y yo no quiero que él se vaya al infierno, tampoco quiero perder su amistad, ¿verdad? Tampoco quiero perder su amistad, entonces si le digo que está mal, vamos, voy a perder su amistad, pero tampoco quiero quedar mal con Dios. Entonces no es tan fácil, no es tan sencillo, pareciera como bueno, vamos a definir, vamos a categorizar, no, esto es algo que tiene que irse desarrollando, pero nace de una convicción profunda, y a través de eso podemos crecer y mejorar. Bueno, con respecto a los temas controversiales, hay esas escrituras, no vamos a leer, voy a poner muchas escrituras para que las anoten, ¿verdad? Y nos va a ayudar para poder ir avanzando en cómo poder tratar los temas controversiales. Uno, siempre tenemos que estar dispuestos a responder, ¿verdad? Primera de Pedro 3.15 dice que hay que estar dispuestos, preparados, pero la palabra, muchas versiones dicen estén preparados, pero en el original es estar dispuesto. Tú puedes tener todo el conocimiento, la convicción, pero a veces no tenemos la disposición, ¿verdad? No queremos meternos a problemas o discutir, entonces no estamos dispuestos, pero la Biblia nos llama a estar dispuestos. Número dos, también hay que diferenciar entre un tema controversial de una discusión inútil, ¿verdad? Hay que aprender a diferenciar, como bueno, este sí es un tema, yo amo a esta persona y yo aprecio a esta persona y yo quiero controversia, quiero entrar al choque porque quiero ayudar, ¿verdad? Porque quiero amarle, ¿verdad? Pero a veces hay discusiones inútiles, ¿verdad? Que no tiene ningún, no va a llegar a nada bueno y no tiene ninguna profundidad, entonces hay que aprender a diferenciar entre esto. Hay mucho que se pierde de tiempo con temas que no tienen más que inutilidad. Número tres, primer tema, tres, seis, cuatro, nos dice que el resultado de una discusión es inútil, pero hay discusiones cuando discutimos por temas inútiles que no valen la pena o por razones inútiles, muchas veces el resultado va a ser una discusión que no lleva a nada. Y también número cuatro, evitar a toda costa esas discusiones, identificarlas, entender el resultado y evitarlas, ¿verdad? Entonces ustedes tienen que aprender a diferenciar de qué peleas escojo, qué batallas elijo y cuáles no. Entonces, bueno, ¿qué es lo que vamos a ver? Hay dos temas importantes en cuanto a las controversias, unos son temas de opinión, ¿sí? Y otros son temas de fe o de doctrina, ¿verdad? Temas bíblicos, son como dos grupos, ¿verdad? Algunos son muy de opinión y otros son bastante profundos, atentan contra la verdad y tienen la salvación ahí, ¿verdad? Como algo importante, ¿verdad? Como algo, un resultado. Entonces hay dos, dos, ¿verdad? Hay que entrarle a los dos, pero hay que aprender a diferenciar. Esto es un tema bíblico, eso es un tema de profundidad bíblica, donde la palabra de Dios es contundente respecto a esto, pero esta es una línea delgada donde hay también muchos temas que sólo son de opinión y que la Biblia tiene de esos temas, y la Biblia trata de esos temas. Y esos temas de opinión también hay que tratarlos de una manera diferente, porque al final es una opinión, ¿verdad? No es una, este, más que una opinión. Entonces lo primero que vamos a ver, rápidamente identificando estos son los temas de opinión, ¿ok? Los temas de opinión, cómo tratar un tema de opinión. Yo voy a dar dos ejemplos, este, de temas de opinión. La mayoría de los ejemplos que ustedes dieron no son de opinión, ¿verdad? Pero voy a dar dos. Uno, aquí hay un tema de opinión en primera de Corintios 7.1, y el tema aquí de opinión es, es mejor no casarse, ¿sí? Ese es el tema, ¿verdad? Es un, una, este, alentando la soltería, ¿no? ¿verdad? Entonces el tema central aquí del capítulo 7 es el matrimonio cristiano, pero el tema número, lo que dice Pablo, su opinión es, es mejor no casarse, ¿verdad? Y tiene su opinión bastante firme con respecto a ello, ¿sí? Con respecto a ello, es bastante firme en eso. Entonces aquí vemos un tema que es claro, que no, aunque está en la Biblia y está bastante desarrollado en el capítulo 7, es un tema de opinión. Entonces, a grandes rasgos Pablo dice, lo mejor para el hombre y para la mujer es no casarse, ¿sí? ¿Verdad? En la edad de ustedes está como ese Pablo está loco, ¿verdad? ¿Cómo va a ser eso, verdad? No, si yo quiero tener novia, quiero tener novio, ¿verdad? Ya voy listo para la fiesta de mañana, voy con todo, ¿verdad? A ver qué onda, ¿verdad? Mañana tiro mensajes con claridad, ¿verdad? Mañana saco los pasos prohibidos, ¿verdad? Para que ahí a ver qué pasa, ¿no? Entonces, ¿qué le pasa a Pablo? ¿Por qué está hablando? Pero él tiene algo que es importante, es él define este asunto controversial y él lo define claramente como un asunto de opinión, ¿sí? Él argumenta, él dice, yo opino que lo mejor para el hombre es no casarse porque el matrimonio trae muchos problemas, desvía a las personas del entendimiento, a veces de las cosas de la fe, complica la vida, ¿verdad? Y en una perspectiva bastante escatológica que Pablo tenía, como el fin del mundo ya viene aquí nomás, ¿para qué te complicas casándote? Mejor entrega de tu vida al Señor, ¿verdad? Y vas a dar lo mejor al Señor, como lo estoy dando yo, como lo está dando Timoteo y otros hermanos. Entonces, él tiene un argumento que es válido, o sea, muy válido, pero al final es un argumento. Entonces, él da espacio a las opiniones en los versículos 6, versículo 10, versículo 12 y el versículo 40, que es muy contundente, Pablo dice, hagan lo que quieran, ¿sí? Pero yo opino que lo mejor es no casarse, ¿ok? Entonces, él da su opinión, al final lo deja abierto, ¿sí o no? Lo deja abierto, pero él es como muy claro en su argumento, muy claro en su argumento. Entonces, nosotros tenemos temas de opinión, temas donde decimos, no, esto debería de ser de esta manera, tengo mi argumento, pero si él lo hace, eso no lo aleja de Dios, ¿sí? Si él lo hace, eso no lo aparta de Dios, eso lo convierte en un tema de opinión, ¿ok? Pero hay un argumento, él desarrolla su argumento, él lo defiende, pero él deja con claridad, esto es mi opinión, nada más, ¿ok? Eso es muy importante. Hay otro tema, tal vez que es un poquito más, ¿qué tal los tatuajes? ¿Sí? Tal vez en ustedes hay un poquito de más ahí con este tema, ¿no? Más que están como de moda, ¿verdad? Los tatuajes. Entonces, ahorita los hermanos que tienen tatuajes empezaron así a bajarse la playera, ¿verdad? A cubrirse así los brazos, ¿no? Pero es un tema, los tatuajes, ¿sí o no? A mí me han llegado, de verdad, muchas preguntas sobre esto. En los últimos, ¿qué? Tal vez dos años, ¿qué pensar de los tatuajes? Y en todo tipo de edad, no sólo en su edad, ya adultos, ya personas mayores. Hace poco una hermana escribe, mira, ¿qué pensás sobre los tatuajes? ¿Verdad? ¿Qué opinás sobre los tatuajes? Un hermano hace un año puso algo en el Facebook, yo creo que fue el más comentado, ¿verdad? En sus posts, desde la vida, creo yo, ¿verdad? Y le escribían y que yo no creo y un montón de cosas, ¿ok? Porque hay posturas con respecto a los tatuajes, pero aunque no lo crean, es un tema de opinión, ¿verdad? Es un tema de opinión y pues obviamente yo también tengo mi opinión, pero algunas cosas importantes que podemos ver. Levítico 19.28 dice que no hay que hacerse tatuajes, ¿sí? Lo dice con claridad, ¿verdad? No se hagan, este, heridas en la piel ni se hagan ningún tipo de tatuajes, ¿verdad? Entonces uno dice, ahí está, ahí está, ya para qué le buscas, ¿verdad? Ahí está el Levítico, es clara la escritura, es real, ahí dice que no hay tatuajes ya para que le buscan, ahí está con claridad. Pero si hacemos un estudio del contexto cultural e histórico, ¿verdad? Los tatuajes de ellos no son en nada o los tatuajes que ellos hacían no eran nada que ver con los tatuajes que se hacen hoy en día. Los motivos por los cuales ellos se tatuaban eran totalmente distintos a los tatuajes que se hacen hoy en día. Entonces en muchos sentidos no tiene ninguna aplicación la escritura, porque estamos hablando de dos cosas completamente diferentes y los tatuajes en esa época muy probablemente estaban muy enfocados a la adoración de ídolos, ¿verdad? A la adoración de ídolos, entonces no tiene nada que ver la escritura. Pero obviamente, como decimos, a letra muerta, pues dice, no hay que tatuarse. Pero cuando se hace el estudio, ¿verdad? del contexto histórico, del contexto cultural, aún de las palabras, dice, bueno, no, viéndolo bien no es exactamente lo que son los tatuajes para nosotros. Otro argumento podría ser Romanos 7.6, porque Romanos 7.6 dice que nosotros ya no vivimos en la ley, ¿verdad? Entonces tampoco aplicaría a nuestra vida. Entonces, vámonos a tatuar todos a salir de aquí, ¿verdad? Aquí en un centro comercial a dos cuadras tatúan, ¿verdad? Moldeados por Dios aquí, ¿verdad? Moldeados por Dios, todos aquí, ¿verdad? Es más, trajimos un tatuador aquí que va a venir aquí en el salón de atrás, ¿verdad? Pero, está Primera de Timoteo, capítulo 2, versículo 9 y 10, que no habla de tatuajes, ¿verdad? Que no habla de tatuajes. La voy a leer para que para que veamos de qué está hablando. Primera de Timoteo 2, 9, 10, dice, así mismo que las mujeres se vistan con ropa decorosa, con pudor y modestia, no con peinados ostentosos, no con oro o perlas o vestidos costosos, sino con buenas obras, como corresponde a las mujeres que profesan la piedad, que la mujer aprenda calladamente con toda obediencia. Yo no permito, bah, bah, bah, bah, versículo 13, porque Adán fue creado primero y Eva después, ¿verdad? Pero principalmente el versículo 9 habla de una situación cultural y es la situación externa, ¿verdad? Como las mujeres, pues que era, digamos, en esa cultura quienes más invertían en el arreglo personal eran vistas de una manera que no debían de ser ostentosas, ¿verdad? Sino que más debían de preocuparse por ese adorno interno, ¿verdad? Por el corazón. Yo sé que las hermanas han recibido muchas clases sobre esto. Entonces dices, Pablo, pues eso no tiene nada que ver con él, los tatuajes, pero si volvemos a hacer un estudio de la escritura en su contexto cultural, en su contexto social y también en la etimología de las palabras, podemos sacar principios y podemos obtener principios. Entonces recuerden que estamos hablando de un tema de opinión. Aquí nadie se va al infierno por tatuarse o no, ¿verdad? Ni nadie se va al cielo por no hacerlo. Pero hay algunos argumentos que podemos tomar. Entonces si yo aconsejo, si yo le quiero decir a mis hijas que están aquí, ¿verdad? Que no se pueden tatuar mientras vivan en mi casa, ¿verdad? Mucho menos con mi dinero, ¿verdad? Entonces, algunos argumentos que podemos ver. Los tatuajes es una preocupación principalmente por la apariencia, ¿verdad? O sea, hay una preocupación principal por la apariencia, es algo total y completamente superficial, ¿verdad? Totalmente superficial. Eso podría ser un principio. Otra cosa que podemos ver es que los tatuajes son permanentes. Entonces aquí yo mi opinión puede ser, mira para qué te vas a tatuar algo permanente cuando todos cambiamos, todos los que estamos aquí cambiamos, todos. Entonces algo que hoy te haces, mañana no te va a gustar, en cinco años no te va a gustar, en diez años dices, ¿qué me hice aquí? ¿verdad? Si comenzó como una serpiente, ahorita ya es un enjambre de no sé qué, porque le he tenido que ir aumentando, porque me he ido aburriendo, ¿verdad? El tatuaje. Entonces, porque son permanentes y cómo vas a sellar tu cuerpo con algo permanente sabiendo que todos cambiamos, que todos tenemos cambios en nuestros gustos y preferencias, sobre todo en ámbitos personales. Lo que te decía, las personas cambian, tú y yo cambiamos. Los tatuajes no añaden belleza, ¿verdad? No añaden belleza. Hermanas, tú eres bella así como eres, no necesitas un tatuaje para decir, me veo más bella, no, para nada, ¿verdad? Y los hombres nos vemos bellos sin tatuajes, ¿verdad? Entonces, no necesitamos ahí, ¿verdad? Tatuajes, ¿verdad? Y si somos feos, un tatuaje no va a hacer nada por nosotros, la verdad, no nos va a ayudar en mucho, ¿ok? Entonces un tatuaje no añade belleza, ¿verdad? Y la marca es una vida, es una vida, no una imagen, ¿verdad? La marca que nosotros debemos de tener es nuestra vida, no una imagen, ¿verdad? No algo que está marcado en nuestra vida. Entonces, pero bueno, hay variantes y dices, bueno, pero me voy a tatuar una cruz, pero me voy a tatuar una escritura, ¿verdad? Me voy a tatuar a Jesús, pero si ni conocemos a Jesús, pues este es Jesús. El de Chosen, que está de moda, a ese me voy a tatuar. No, no está mal si lo quieres hacer, pero lo que estoy dando un ejemplo acá, porque no es una clase sobre tatuajes, es que yo puedo argumentar, ¿sí? Entonces si alguien viene a mí y me pregunta sobre este tema, que es un tema controversial, yo puedo tener mi argumentación, pero al final, como veíamos en el tema anterior, es mi opinión, es una opinión. Entonces tú y yo debemos de aprender a argumentar. Bueno, como esto no tiene que ver con la fe, yo no le digo nada. No, yo tengo que argumentar. Nosotros algo que debemos de aprender es a no evadir los temas controversiales. Si yo tengo mi postura, tengo que tener mi argumentación con amor, con respeto, ¿verdad? Venir y exponerlo, más no enojarme si no hacen lo que yo digo, o lo que yo opino. Pero esta es un ejemplo de un tema controversial, ¿verdad? Y bueno, algo que tienen los tatuajes es que son limitantes en la vida y también aún en la misión. ¿Por qué? Porque es un limitante. Yo, como líder de la iglesia, muchas veces hermanos me ponen de referencia. Me dice, Pablo, te escribí como referencia. Si te llaman, les decís que voy a la iglesia, ¿verdad? Entonces, y les decís que soy buena onda y todo. Y me ponen mucho los hermanos ahí como referencia, sobre todo los hermanos de mi región. Y muchas veces me llaman y me preguntan, ¿sabe si tiene tatuajes? Es una pregunta casi de cajón que yo he recibido. ¿Sabe si tiene tatuajes? ¿Por qué? Porque se asocia con grupos delictivos y cosas así, ¿verdad? Obviamente no es lo que aplica a nosotros, pero te puede limitar de por vida. Aún si un día eres un misionero, te puede limitar en tu misión. Entonces digo, bueno, viendo todo esto yo puedo analizar. ¿Vale la pena? ¿No vale la pena? ¿Verdad? Pero puedo argumentar y es un asunto de opinión, ¿ok? Nadie ofende a Dios por hacerlo o no, pero hay muchos asuntos prácticos que considerar. Lo que decía Pablo con respecto al casarse o no, ¿verdad? No es malo casarse, decía Pablo. No, no es malo casarse, pero yo quiero que consideren estos asuntos, ¿verdad? Y dar todo su argumento. Entonces eso es con respecto a estos temas de opinión, pero hay temas de doctrina. Y estos temas de doctrina son la otra gama, como las que ustedes han mencionado en el inicio de la clase. Cómo poder nosotros tratar estos temas controversiales con respecto a la doctrina, ¿verdad? Cosas que son bastante, bastante doctrinales, o sea, que tienen que ver con la palabra de Dios, que tienen que ver con la salvación, con la suficiencia de las escrituras, ¿verdad? Que tienen que ver con nuestras convicciones, cómo tratarlo. Entonces la Biblia nos da algunos ejemplos, pero vamos a ver uno, que está en Mateo 22, versículo del 23 al 33. Jesús está aquí hablando, ¿verdad? En el maravilloso libro de Mateo, y Jesús está siendo asediado, ¿verdad? Con preguntas, ¿verdad? Con preguntas y circunstancias ahí que le están pidiendo. Entonces, viene un grupo de personas muy influyentes en la época. Estas personas vienen con una pregunta sobre la resurrección, ¿verdad? Y es una pregunta bastante importante, bastante doctrinal, ¿verdad? Entonces vamos a leer la pregunta, está desarrollada en varios versículos. Versículo 23, Ese día se acercaron a Jesús algunos saduceos, los que dicen que no hay resurrección. Y le dijeron, Maestro, Moisés dijo, si alguien muere sin tener hijos, su hermano, como pariente más cercano, se casará con su mujer, y levantará descendencia a su hermano. Ahora bien, había entre nosotros siete hermanos, ¿verdad? El primero se casó y murió, pero no teniendo descendencia, dejó a la mujer a su hermano. De igual manera, también el segundo y el tercero, hasta el séptimo, y después de todos, murió la mujer. Por tanto, en la resurrección, ¿de cuál de los siete será mujer? Porque todos ellos la tuvieron. O sea, ellos están argumentando, ellos ni creen en la resurrección, ellos no creen en la resurrección, o no creían en la resurrección, los saduceos. Pero quieren preguntarle a Jesús, bueno tú, él cree en la resurrección, pero aquí le vamos, como dijo Héctor, aquí te tengo esta, espérate, mira, aquí te tengo este ejemplo, a ver si lo puedes contestar. Y ya da el desarrollo, y dice, no puede haber resurrección, porque en el cielo no puede estar casado con siete. Entonces, ese era su argumento, pero aunque parecía algo tan, como digámoslo, este, inocente, como la historia bastante, este, poco probable, el punto principal, era que ellos no creían en la resurrección. Y este no es un tema de opinión, este era un tema muy profundo, porque como Pablo dijo en Corinto, si no existe la resurrección, devalde, devalde somos cristianos, devalde creemos en Jesús, no sirve de nada lo que hacemos, si no existe la resurrección. Entonces, era un tema demasiado potente, demasiado fuerte, pero que los juda, los judíos, ya habían tolerado. Había un grupo que creía en la resurrección, que eran los fariseos, y había un grupo, una secta, que no creía en la resurrección, que eran los saduceos. Usted elija el que quiera, y los dos están bien, pero vemos a Jesús cómo trata este tema tan controversial. Yo creo que de las preguntas que reciben el 22, esta es una que la audiencia, a la gente que estaba alrededor, estaba bastante atenta a la respuesta, porque sabían que Jesús iba a meter a problemas serios, muy serios, con su respuesta, porque los líderes, aunque siempre vemos como los fariseos, los malos, los malos, los malos, la cúpula de poder eran los saduceos. Ellos eran los más poderosos, los más ricos, los más estrictos, y la cúpula de poder estaba ahí en los saduceos. Así que la pregunta iba con trampa, la pregunta era importante, pero era un asunto doctrinal. Entonces, Jesús viene y primero da el origen, la raíz de la duda. Versículo 29, pero Jesús le respondió, están equivocados por no comprender las Escrituras, ni el poder de Dios. ¿Cuál es el origen de las controversias? ¿Cuál es el origen de tener malas posturas con respecto a temas doctrinales? Lo dice Jesús, el desconocimiento, la falta de comprensión de las Escrituras. Entonces, hermanos, si nosotros queremos responder a temas controversiales, pues debemos de conocer las Escrituras. Si no conocemos las Escrituras, vamos a dar sólo opiniones, pero no vamos a poder ayudar a las personas, ni tratar este tema o estos temas controversiales, que son muy importantes. Entonces dice, están equivocados por no comprender las Escrituras. Le está hablando a la cúpula de poder, a la cúpula religiosa, a los líderes religiosos. Dice, ustedes no comprenden las Escrituras. Siguiente, da la respuesta. Versículo 30, Jesús también sabe argumentar. Dice, porque en la resurrección ni se casan, ni son dados en matrimonio, sino que son como los ángeles en el cielo. Él da ahí su argumento. No, no se preocupen por eso. En el cielo nadie se casa, ¿verdad? Me recordé ahorita de un chiste, de una señora que se casó, ¿verdad? Con un señor, y murió la señora, ¿verdad? Y se fue al cielo. Después murió el señor. Entonces, él llega también al cielo, y la señora lo mira de lejos, y lo ve, y corre a su encuentro, ¿no? Y va corriendo la señora a abrazar al que era su esposo, y lo abraza, y le dice, mi amor, ya estás aquí. Tranquilita, tranquilita, que era que hasta que la muerte no se pare, le dijo. O sea, el negocio se acabó cuando nos morimos, ¿verdad? Entonces, pero bueno, aquí también Jesús dice, no, en el cielo no va a haber, nadie se va a casar, ¿verdad? Pero luego viene que Jesús da argumentos bíblicos. Versículos 31 y 32. Y en cuanto a la resurrección de los muertos, no han leído, dice. Mira pues, cómo Jesús responde. En cuanto a la resurrección de los muertos, no, es una pregunta retórica la que Él hace. No han leído lo que les fue dicho por Dios, les fue dicho por Dios cuando dijo, yo soy el padre de Abraham, el Dios, perdón, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob. Ahí va la pregunta, ahí termina los signos de interrogación. Jesús dice, a ver, ¿no han leído que la escritura dice el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob? ¿Qué respondieron los Saduceos? Sí, hemos leído. Entonces Jesús les dice, Él no es Dios de muertos, sino Dios de vijos. Poche. ¿Ok? Les da su argumento bíblico. ¿Viste cómo lo hizo Jesús? Jesús no le dijo, usted obviamente los desafía y todo, pero les hace una pregunta, ellos responden la pregunta, y en la respuesta de la pregunta, está la razón por la cual sí hay resurrección. Jesús obviamente es el maestro de maestros, ¿verdad? O sea, vemos el argumento, cómo Jesús lo hizo, el uso de las preguntas, cómo ellos al responder, ellos mismos se respondieron, ¿verdad? Terminaron humillados honestamente, pero me imagino que entre ese grupo también hubieron personas convencidas con lo que dijo Jesús. No sólo la humillación de quienes traían la pregunta, sino la audiencia, que también tenía dudas, que también estaba creyendo en la controversia al escuchar a Jesús, puede entender, es cierto, es cierto, eso se nos ha leído durante toda la vida, el Dios de Abraham, el Dios de Jacob, el Dios de Isaac, y Dios no es un Dios de muertos, significa que ellos están vivos, ¿verdad? Los patriarcas. ¿Cuál fue la reacción? Versículo 33, al oír esto las multitudes que se admiraban de su enseñanza. En esta ocasión no hubo, tal vez hubo rechazo de quienes pudieron traer la pregunta, pero la gente que estaba a su alrededor, la multitud, la audiencia, se asombró, admiró la respuesta de Jesús, y entre líneas podemos ver, entendieron y comprendieron. Hermanos, sinceramente nosotros tenemos que prepararnos más en la palabra de Dios, tenemos que prepararnos de una mejor manera, crecer, pero nuestro propósito no es ser personas que debaten, personas que pelean, personas que tienen la razón siempre, sino cómo podemos ayudar a otros. Porque esas personas que están en controversia, muchos de ellos son personas que nosotros apreciamos, que nosotros queremos, que nosotros deseamos que se salven. Yo he cometido grandes errores con mi familia, porque a veces he argumentado, les he dicho y he terminado más peleándome con ellos. Yo no veo a un Jesús que está peleando, yo veo a un Jesús que está argumentando, que está respondiendo, que es astuto, ¿verdad? Que es sabio, pero que está viendo, no sólo a quien trae la pregunta, sino a todos los que están ahí viendo, a todos. Y debemos de aprovechar, como vimos en las primeras escrituras, estar dispuestos, porque no solamente vamos a poder ayudar a quien tiene la controversia, sino a quienes están alrededor, a quienes saben, a quienes están viendo, a quienes comentamos, a quienes pueden también beneficiarse y podemos ayudar a estas personas. Nuestra generación, hay un estudio que se hizo hace dos años, tres años, por dos fundaciones y ministerios en Estados Unidos sobre el conocimiento que los jóvenes tienen de Dios. Y es abrumador la falta de conocimiento que los jóvenes tienen de Dios. Es abrumador. Con algunos que están en profundiza, lo vimos ese video hace unas semanas, y es el 71% de jóvenes no creen en el infierno, no creen en el infierno, ¿verdad? Más del 70% de jóvenes no entienden ni siquiera quién es Jesús, sino piensan que es un ser creado por Dios y ni siquiera qué es Dios mismo, ¿verdad? O sea, el porcentaje es altísimo en muchos temas de la ignorancia que podemos tener y también las nuevas generaciones pueden tener. Hermanos, yo les quiero animar a que podamos entender, y concluyo con esto, como jóvenes y universitarios, las dudas en temas controversiales son una constante. Ustedes las van a tener, porque ustedes mismos van a tener que responder a sus propias controversias. Ustedes pueden tener esa duda, ni siquiera tienen que ir a pelear con ningún saduceo. Ustedes mismos pueden tener esas controversias, ustedes mismos pueden tener esas dudas, y tienen que aprender a contestarse, ¿verdad? Tienen que aprender a contestarse. Por tal razón hay que estar preparados, es decir, dispuestos para contestar, capacitándose bíblicamente, teniendo amor y valor al contestar, siendo simples pero profundos en responder. Sí, esa parte es muy buena, ¿no? Porque Jesús fue simple en responder, no le dio un estudio de dos horas, ¿verdad? Y habla y habla. Sencillo, una pregunta, una respuesta, ¿verdad? Y nosotros podemos, pero nuestra raíz, nuestra motivación debe ser amar. Eso debe ser, no ser los todólogos los que tenemos monopolizada la verdad, no para nada, sino es un acto de amor, estar preparados para poder ayudar, para poder salvar, como vimos en la primera escritura de Judas, salvarlos del fuego, del fuego. Si es un tema de opinión, pues tal vez los puedes rescatar de algunas cositas terrenales, pero si es una cuestión de doctrina, puede ser que los rescates, o muy probablemente, del fuego del infierno. Qué bueno que están aquí, en esta conferencia. Los solicito, que hayan invertido. Yo sé que se la están pasando súper bien, ¿verdad? Y que no se van a acordar de ninguna clase, más que de todo lo que hicieron, ¿verdad? Pero luego repásenlas, ¿verdad? Repasen sus notas, están grabando las clases, vuelvan a escucharlas, aprovechen el conocimiento que estamos recibiendo durante todo este tiempo, para que podamos estar dispuestos y preparados para ayudar a una generación que está vagando, de verdad, vagando, que está a la deriva y que ustedes pueden ayudar y que pueden rescatar, ¿verdad? Dios les bendiga, hermanos, y que la pasen, sigan pasando bien.