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The transcription is about a conversation between two women discussing the topic of competition among women. They talk about how women have historically been pitted against each other and how it still exists today. They mention the TV series Bridgerton as an example of women competing for attention and the best partner. They also discuss the idea of envy versus admiration and the importance of supporting and uplifting each other. They mention that competition can be healthy and motivating, but it should be done in a positive and supportive way. They conclude by mentioning that women of different generations agree that competition among women still exists, but it can be transformed into a supportive network. grabando, grabando, grabando, ahí, ahí funciona viste que se queda encuadradito, así está este, justo ahorita porque la línea la cuadré perfecto con esto de abajo, está perfecto, ¿necesitas ver algo aquí? o, no, yo volví a pedir más de unos teléfonos porque así tengo también lo que, lo que me daste, exacto, perfecto, ¿estamos? estamos, meto para abajo, por la luz, por el sol, se ve bien mi color porque yo dije coño rojo con fucsia, igual este es más fuerte, todavía, se ve bien, si, o sea no te confundes con la pared, exacto, y ves que hasta primero te ves, yo siempre me pongo la sequeta de jeans con el azul, con el azul, si, tiene que ser contraste pero, ahí, aquí, coño, coño la madre, ¿estamos? estamos, listas, bueno comadre vamos a competir, vamos a ver quien es más mujer, quien es hacer el mejor podcast, coño, está difícil, la mejor, quien no se traba con la dislexia, quien no dice por ejemplo cada rato, quien no hace la lengua la traba, total, no, en la dislexia ganamos las dos, totalmente, estamos como 50 y 50, 50 y 50, si, si, pero bueno, bienvenidos así de una, este episodio vamos a estar de una, bienvenidos a un episodio nuevo de super copadas podcast, una vez más mi comadre Rosana Navas y mi comadre Valeria González, para ustedes un domingo más, antes de comenzar comadre yo le quería decir a la gente que vaya y se suscriba, que le de like, que comparta este episodio porque si tú se lo dices al principio, se lo dices a la mitad y se lo dices al final, le gusta, hay más posibilidades de que lo hagan porque siempre lo decimos al final y a veces hay personas que evidentemente no llegan hasta el final del episodio, no y también jalando, pidiendo favor, es un regaño, se sale ahorita, denle pausa, no, no hace falta ni siquiera, vaya a suscribirse de una vez, exactamente, porque este episodio va a estar bueno, no, las huevonas, las comadres, y ya les dijimos, nos falta poco para los 3000 suscriptores, así que si quieres ser parte de ese número redondito 3000, ven y suscríbete, que lindo, no, o sea yo no estaba pendiente de eso y cuando tú me lo mencionaste dije, ay mira, me sorprendí, por ahí hay una persona que se suscribe, se desuscribe, se suscribe, se desuscribe, no sé, pero a veces veo los números y como que subimos y después uno menos, en serio, digo coño, hay una gente que está jugando con nuestros sentimientos, que se suscribe y luego se desuscribe, la comadre los tiene mirando, dije nada, hola, cuentas cuántos hay, ahorita creo que son 2908 o 2909, vamos a ver, le ponemos acá el cosito, hay que poner la cosa esa de, 2911, ahora baja 8, no, es que habían 2910 y después bajó a 2909, bueno, eso fue que uno se desuscribió, mira, yo creo que yo nunca me he desuscrito, de una cosa, yo lo vi, me suscribí, probablemente no lo vuelva a ver, pero si me suscribí, me quedo suscrita, no voy a buscar otra vez para desuscribirme, yo tampoco, es raro, dejar de seguir si he hecho, ah no, claro, pero esto es como más personal, sí, exacto, porque aquí es como medio contenido como la nueva televisión, tal cual, y está raro como que buscar otra vez el canal para desuscribir, sí, yo nunca lo había pensado, nunca, es raro, bueno, comadre, cuéntale a nuestros bellos suscriptores, a los compadres, a las comadres, de qué tema vamos a hablar el día de hoy, mira, el día de hoy, tremendo tema, tremendo tema, y nosotras somos dos mujeres, así que está bueno esta charla, este debate, de la competencia entre mujeres, realmente existe la competencia entre mujeres, yo tengo una pregunta, que en lo que estuve investigando, es una pregunta como que bastante fuerte, ¿cuál será? ¿Has escuchado esa frase que dice que el peor enemigo de una mujer es otra mujer? Yo sí lo he escuchado, yo lo he escuchado mucho, yo lo he escuchado mucho, también lo he escuchado como que el peor enemigo de un venezolano es otro venezolano, con el mismo gremio, el peor enemigo cuando está en Perú, el peor enemigo lo decían los peruanos, de un peruano es el peruano, claro, pero esa frase de lo de la mujer, yo lo he escuchado mucho de mujeres, y creo que también lo he escuchado mucho de hombres, de mismos hombres que llegan como a esta premisa, sí, pero bueno, como para darle inicio, darle contexto a este episodio, creo que todas, si no me equivoco, ustedes díganme, las que están viendo este episodio mujeres, creo que hemos sentido eso alguna vez, o hemos vivido, hemos experimentado ese tema de la competencia tan fuerte y real que existe entre las mujeres, y yo como para darle medio contexto a esto, el otro día me puse a pensar, y ahora que decidimos tocar este tema, uní como esos dos cabos, y esto tiene completamente todo el sentido, porque yo creo que viene, y es algo histórico, literalmente es algo histórico, porque vieron ahora que está la serie, está Bridgerton, no sé si tú la ves, ay comadre, no la he visto, venga ya, pero a todo el mundo es como que Bridgerton, marica, Bridgerton, es que tú no entiendes por qué, porque yo el otro día compartí un clip del chat y lo vi, uno no entiende por qué, pero uno se engancha y se queda, escúchame, yo soy de las personas que no he visto Harry Potter, no he visto Juego de Tronos, no he visto una vaina de los anillos, no he visto esas vainas así que la gente se muere, yo no las he visto, tengo entendido, esa serie es vieja, o sea ya es la primera temporada desde hace tiempo, y es una serie nueva, o sea fue hace 3 años, y puede ser, y ahora salió una nueva temporada, porque tuvo pocos episodios, tipo yo me la vi, una sentada me eché y me terminé la última temporada, la puse, pero me, claro, sí pasa a veces que uno no, como en la primera oportunidad uno no se engancha, no me enganchó, solo que no la volví a poner más, claro, así que a veces también uno tiene que tener como tiempo a ver si, sí, porque tu mente a lo mejor estaba en cualquier otra casa probablemente, sí, siempre pasa con muchas cosas, pero bueno, a lo que iba, es que la serie está muy popular, todo lo que tú quieras y demás, pero en la serie era lo que hice, quedate cabos, te muestra completamente lo competitivo y lo absurdo que era poner a competir mujeres en ese momento, para ver quién era el diamante de la temporada, porque así le llaman, que se iba a quedar con el mejor hombre, ah, bueno, el primer capítulo que sí los llegué a ver, salía eso, que se presentaban como entre una mujer, se presentaban a la reina, a la reina, te autorizabas, o como que te da la afirmación de que, sí, eres tú la más linda, la más reja, la más arrecha y todo eso, totalmente, para, exacto, para eso, para luego buscar el príncipe, el hombre perfecto, totalmente, eso lo dije, y claro, muestran cómo sufre la que no es el diamante de la temporada, la que no tiene chance, la que ni siquiera le ha ido un pretendiente a la casa, o sea, un tema realmente que a mí me parece absurdo y creo que al día de hoy, obviamente es mucho menor, pero sigue habiendo ese tipo de competencias, ya sea por atención de los hombres, por un trabajo, o sí, yo creo que como mujeres hemos tenido muy pocas, de la historia hasta acá, pocas oportunidades, me parece a mí, entonces, es como que, claro, entre nosotras mismas, como hemos tenido pocas oportunidades, tendemos a meternos el pie o a competir, necesariamente, como por llegar a esas oportunidades, yo sé que piensas tú, sí, sí, definitivamente que sí, o sea, existió, existe ahora y también seguirá existiendo, porque también es algo natural del ser humano, o sea, de hombre, de mujer, es como algo natural, ¿no? Estaba yo también leyendo como una parte de un artículo y algunos psicólogos lo, como que lo, lo puedo hablar así, estaba leyendo un artículo y hay algunos psicólogos que también lo relacionan como a la psicología evolutiva, que es como tratar de también tú sobrevivir, dices como los animales, tratas de sobrevivir, tratas de destacarte, era la palabra, de destacarte, para eso, para resaltar, para sobrevivir, para lograr algo, para, sí, para llegar a un lugar, a una meta, a un objetivo en específico, ¿sí? Entonces, nada, es como que bastante normal, yo, por ejemplo, como son las cosas de la vida, ¿no? Y vamos a hablar de ese tema hoy y una amiga, una compañera de calistenia, puso un estado relacionado a esto, el estado decía algo así como que en vez de envidia, siente admiración, y hay como una pequeña línea allí entre la envidia y la admiración que está heavy, está heavy y hay que como que saber controlar, hay que saber tú también identificar las necesidades de la persona que lo recibe como la otra, ¿no? Entonces, nada, están como que esas dos cositas allí, esos dos aspectos que las divide una línea muy delgadita. Totalmente. Yo le pregunté a ella, quería hacerle la pregunta como a mujeres de distintas generaciones, bueno, no pude, solo le pregunté a mi tía y a ella, ella tendrá no sé unos 30 años por ahí, y mi tía tendrá 60 y tanto, y ella me dijo que sí, que definitivamente existía y que ella creía que eso pasa actualmente. Claro. Que ella tenía, por ejemplo, como un círculo de amigas bastante cercanas en los que prácticamente ellas se apoyaban y si había una competencia también era una competencia sana, se aplauden los logros, se apoyan, si una tiene un plan de algo le dices dale, dale para adelante, y eso es como una red de apoyo que tienen ellas con sus amigas para eso, ¿no? Para todo el mundo y para arriba en un mismo tiempo, o cada quien a su nivel, o cada quien a su tiempo, pero sintiendo esa red de apoyo. Claro. Y por ejemplo mi tía me dijo que ella también creía que definitivamente existe y ella ponía la llave también con sus amigas, ella dice, por ejemplo, yo cuando era joven, cuando estudiaba con mis amigas hacíamos competencias para ver quién salía mejor al finalizar el año escolar o al finalizar el año de la universidad y quién iba a ser la mejor, pero viste ahí entra una competitividad sana. Claro. Que te está ayudando a tener un mejor resultado, a destacarte, a impulsar o a subir o a sacar esa mejor versión de ti, pero no toda esa competencia suele ser sana. Exactamente. Eso porque probablemente estabas con tu núcleo, estabas con personas que aparte de eso te querían y nada, tenías como que confianza y además todas a veces dicen, en realidad la mayoría de las veces, que eres el porcentaje de las personas con las que te rodeas. También. Y a veces es así porque o te impulsan o te hunden las personas con las que te juntas, ¿no? Bueno, según lo que me estás diciendo, regalame a colección algo que me dijo mi compañera, saludes a Domen, que seguro va a ver este episodio porque siempre los ve, ella me decía como que ya cuando yo veo que una mujer cercana a mí tiene actitudes raras, sí, me levantan como las alarmitas, las reflex, no entra en mi círculo de amigos. Bueno, la puedes conocer, la tratas todo, pero ya tú sabes qué tipo de relación tienes que tener con esa persona. Claro. Y es así. Bueno, agregando a eso que tú dijiste, o sea, dentro de lo que investigué, dice que para muchas mujeres es muy normal sentir este tipo de sentimientos que tienen que protegerse del resto de las mujeres. Y para mí eso me parece un montón, la verdad, porque es realmente agotador tener ese sentimiento de que a donde tú llegues, sea por trabajo, sea por amistad, o sea, por lo que sea, te hagas estar como en modo de defensa con otra mujer, ¿sabes? Es como medio raro. Claro, pero eso también como que no es tan normal, ¿no? Claro, a mí me pasó, por ejemplo, o me pasaba en el bachillerato, no me pasó tanto en la universidad sino en el bachillerato, que siempre tuve amigos hombres, porque siempre me pareció mucho más fácil tener amigos hombres y es por esto que dices, o sea, porque si dices que te tienes que proteger del resto de mujeres, hay excepciones, hay de verdad mujeres que te brindan una amistad que no están pendientes de que te pones para criticarte o ver si tú eres más linda o menos linda, si tienes más plata o menos plata, porque literalmente está eso, ¿no? De que te encuentras con gente que todo es un chisme, todo es una posesión, porque entonces, ah, eres mi amiga pero no te juntes con la otra. Ay, no, eso es horrible. Entonces es como que tú dices, no, prefiero ser amiga de un hombre que tiene muchos menos problemas, literalmente. Son más sencillos. No se complican por nada, cuando las otras mujeres están simplemente pendientes de tener malas intenciones entre mujeres. Sí, eso es raro. A mí me pasó exactamente lo mismo que tú dices, o sea, yo fui criado con niños, porque siempre estaba con mis primos y cuando fui creciendo siempre estaba rodeada más de hombres que de mujeres y tengo muchos amigos hombres. En la universidad estudié solo con hombres y con la única mujer que estudié tuvimos problemas. Fue muy fuerte, o sea, ella, no sé si capaz le llegará este episodio o capaz alguno de mis compañeros de la universidad, pero el tema fue fuerte, o sea, pudiera yo ponerme aquí a explicar y van a quedar locos. Total. Pero, o sea, yo la verdad con ella específicamente no tenía ningún inconveniente, o sea, en verdad puedo jurar que el problema no venía de mí. No quiere decir que yo no he pasado por este sentimiento, capaz, no, no, porque de hecho que sí, o sea, capaz en el liceo no me acuerdo muy bien, o sea, porque si no fue una persona perfecta. De hecho que capaz sí lo he experimentado, pero en este caso puntual la verdad el problema no venía de mí. Claro. Y yo por ejemplo en ese momento corté de raíz, o sea, yo te dejo de hablar y ya, o sea, yo soy así y literal me voy y no sabes más nada de mí y así resolví por ejemplo en ese momento, ¿no? Claro. ¿Qué pasa cuando tú tienes este tipo de experiencias en el trabajo, en otros grupos, o sea, cómo lo manejas? Es difícil. Es difícil, es difícil y también ya está en ti ser más inteligente y saber cómo ayudar la cosa básicamente, o sea. Y sí, no, hay personas que literalmente no lo entienden, ni siquiera han tenido esta misma conversación interna de será que soy yo la que tiene el problema, o será que es la otra persona, o X. Entonces es como muy complicado de verdad forzar relaciones. Sí. Entonces es como que simplemente bueno, no las llevamos bien, hay un tema de malas intenciones, hay un tema de ya sea envidia, rabia, no sé, entre mujeres es mejor como que tomemos distancia. Sí. Es una relación laboral genial, bueno, solo hablamos de trabajo y nada más, no nos extendemos hasta otra cosa, ¿no? A mí escucharlo me hace demasiado ruido porque es como que no puedo, no puedo con eso. Yo lo he vivido mucho. O sea, no puedo. Es que yo siento que lo he vivido mucho. Entre una de las cosas que tú comentaste era el tema de que como que eras selección natural, ¿no? Y en realidad dice que existen dos teorías y voy a leer lo que dice, ¿no? Ok. Existen dos teorías de por qué las mujeres son competitivas de manera agresiva, ¿no? Le llama que es agresiva por indirecta, porque son como medio indirectas, porque no terminas siendo totalmente frontal, es como que metes la pullita. Es como pasivo-agresivo. Exactamente. Entonces dice que bueno, la psicología evolutiva recurre a la selección natural para explicar nuestro comportamiento. Dice que las mujeres necesitan protegerse de daño físico, así que la agresión indirecta, perdón, nos mantiene a salvo al reducir el número de mujeres disponibles como en nuestro entorno. Es como un tema literal, como hablan a veces de los hombres, que es algo biológico. Sí, literalmente, ¿no? Por un lado, después habla de que las mujeres al considerarse ser valoradas por los hombres, ¿no? Que se supone que es su máxima fortaleza, valor, logro, identidad, que esto también es algo que trasciende el tema del patriarcado y todo eso. Dice que se sienten obligadas a luchar contra otras mujeres por el premio, que fue más o menos ligado a lo que te dije de Bridgerton. Es como que lo que nos enseñaron es que nosotros teníamos que luchar a ver quién se casaba primero, quién conseguía ese premio primero. Entonces eso como que quedó en nosotras, digamos. En resumen, cuando nuestro valor se vincula con quienes pueden fecundarnos, estamos hablando de algo biológico, o sea, los hombres, nos damos la espalda entre nosotras. Eso está fuerte. Está horrible. Está fuerte. Está espantoso. Está todo mal. Pero, ahora hay tipo un movimiento, o sea, no quiere decir que netamente hoy en día estemos en ese nivel. Sí, exacto. ¿Por qué no? Pero es como las dos teorías que existen de por qué eso viene pasando de hace mucho tiempo. Ahora hay todo este movimiento con el tema del feminismo, de tener sororidad, que eso es lo que significa apoyarse entre mujeres, que si somos unidas somos mucho más fuertes que estando en contra. Claro. Porque literalmente esto tiene todo un tema de patriarcado que era como que el enemigo, que es el patriarcado, quiere separarnos literalmente para que seamos más débiles. O sea, hay como varias posturas en relación a esto. Creo que todas pueden tener como su verdad, por decirlo así, su drama que aporta a este tema. Sí, efectivamente, aparte de lo que tú dices, que creo que sí, puede ser así, hay un tema, como lo comentamos al principio, de cultura, de experiencias personales. Sí, de cultura en general. Y tenemos un tema de estereotipos, porque también crecemos un montón. Entonces yo veo en la calle y digo, el estereotipo que me pintaron a mí es una chica flaca, alta, rubia, que se vista divina, no sé qué. Entonces yo no soy eso, ya me estoy comparando, la estoy viendo como rival. Por eso te digo, un tema de experiencias personales, como cultural, los valores que tú tengas también influyen muchísimo. Porque hay personas, y esto es hombres y mujeres, nosotros le enfocamos más a la mujer. Pero hay personas que se sienten también como superiores y siempre están disminuyendo las otras personas. Haciéndolas menos, creyendo que esa persona no puede, criticando, hablando mal, y en realidad eso lo que demuestra es como la falta de confianza, y falta de evolución, falta de florecimiento que tienes tú interiormente, y que por eso estás exteriorizando ese tipo de sentimientos. Estoy jugando, bueno, ya hablamos del tema de la competitividad como negativa, no lo llevamos al lado malo, que ahí ya pasa la línea de la envidia, como hablamos. Pero sí he estado, creo yo, en entornos de competitividad sana, me parece. Por ejemplo, el tema del deporte me ha ayudado mucho eso. O sea, yo me he juntado con personas, o con mujeres también, y es por eso, porque uno elige el tipo de personas con las que en realidad puedes hacer una amistad, puedes compartir, puedes hacer cosas. Y, por ejemplo, antes de yo venir acá, tenía unas amigas en Perú, o sea, dos compañeras, me gusta decir amigas porque yo siento que tengo como una relación extraña con la palabra amiga. Me pasa mucho eso. ¿Pero puede ser por eso mismo que estamos hablando? No sé, no me alienta. ¿Que lo sientes raro? Lo siento muy raro. O sea, yo siento ya que es como una persona que yo quiero mucho, sí es, es una amiga, ese es el nombre, pero yo siento que me ha costado apropiarme y como adquirir ese significado. Y bueno, ellas son Rocío y Gaby, que un beso, las quiero y las adoro. Con ellas empecé como a ser funcional, a hacer calistenia. Rocío era como que la capitana del equipo porque ella era entrenadora, nos ayudamos. Pero entre la estrecha me hicimos un grupo tan brutal. Primero, siempre existió el espacio de cada una. Claro. Lo que tú dices, no, que no eres amiga de esta, que no, o sea, no. Cada quien hacía lo que le daba la gana. O sea, nadie es tu dueño. Nadie, exacto. Cada quien respetaba los espacios de las otras. Cada quien decidía qué contarle y hasta dónde contarle a la otra. A veces me pasaba que una me contaba una cosa y la otra me contaba otra. En el medio. Y capaz lo mismo le pasaba a ellas. Yo decido a ti contarte algo y a ti contarte algo porque simplemente se da, porque simplemente tengo el mood, porque simplemente siento que tú en ese momento me puedes escuchar. Y si no decido contártelo es porque, bueno, no tiene que ser por algo negativo, tampoco. Entonces, nada, yo como que creé ese grupo con ellas. Y creo que lo que nos fortalecía, de lo que estamos hablando, es por el tema del deporte. O sea, la competitividad que teníamos, no teníamos ninguna competitividad, era simplemente apoyarnos. Decirle, sí, tú puedes, chale, pichón. Cuando una se dormía, bueno, ¿y qué pasa? Sí, más que competitividad, era como ver, como ejemplo, qué cosas positivas puedo tomar de cada una para adaptarlas para mí. Sí, sí, sí. Total, pero en cuanto a cuando tú dijiste lo del liceo, me acordé de una chica que no estudiaba conmigo, pero si era en esa época del liceo había pasado con ella, yo decía, me gusta este muchacho. Ella le gustaba, no solo que le gustaba, le buscaba. Y decía, no, que me escribió y ya tú la habías, chaval, era increíble. Después, no, bueno, ya no me gusta este, me gusta este. Ah, no, ella iba con ese también, chaval, que es fuerte. Es muy fuerte. Todavía sé quién es, no es que se me ha olvidado. Claro. Es más, llegó un punto que me pasó con mi novia actual. ¿Qué? Cuando yo le monté el ojo. Ella también se lo montó. Ángel, ella es como una vaina, como una chateadera por fin. Yo le dije a Ángel, mira, habla claro, mira qué está pasando ahí, tú habla claro. ¿Qué vas a hacer? Porque yo ya estoy cansada. Todo el que yo le pongo el ojo, a este le pone el ojo. Y si no, que yo era súper, como, yo no era lanzada. O sea, a mí me gustaba el lince, yo lo estuve escribiendo. Entonces, cuando me atreví con este, este me lo tenía que quitar. Claro. Y el hombre hizo caso, hasta el soteo, y 10 años juntos, 11, no sé cuántos años. Amarrado quedó. No, eso va, lo que acabas de decir, en relación a esto. Las mujeres somos muy buenas para estar en las malas, cuando alguien está pasando como por un mal momento. Somos como medio empáticas, ¿sabes? Tú estás ahí, si alguien quiere llorar, para darle una mano, para darle un abrazo, entre mujeres. Ahí es como que tú a veces entiendes, te pones en la situación de esa persona y eso. Pero dicen que en los buenos momentos, donde te estás yendo mejor que a otra persona, ahí no les gusta tanto. O sea, entre mujeres hay ese problema, que va relacionado a lo que tú dices. Porque quieren verte bien, pero no mejor que ellas. Entonces siento que eso sí pasa mucho entre mujeres. Que es un tema de, es una envidia no sana. Porque tú puedes decir, coño, yo quisiera, esta persona se fue de viaje, yo quisiera irme de viaje. No porque esta persona no se lo merezca, sino porque, coño, yo también en algún momento quiero tener la posibilidad. Pero no desde un tema de odio, no desde un tema de que voy a hacerte comentarios pasivo-agresivos, de que tú estás mejor que yo, o de que por tu culpa yo no tengo algo. A mí me parece que eso abunda un montón. Que encontrar ese tipo de amistad, que realmente, entre mujeres, esto lo digo todo entre mujeres, que realmente te impulsa, que realmente tú dices, coño, esta vaina me suma, ¿vale? Yo estoy mal y esa jeva me levanta, o me escucha, o me va a prestar una ropa, o me tira un piropo de cómo me veo, y no está pendiente de, no, no, yo le voy a decir que eso le queda lindo porque se ve horrible y para que haga el ridículo. ¿Sabes la cantidad de gente que tiene esa maldad por dentro? Sí, sí. Y te quechimo. Realmente, ¿no? Eso es lo que tú dices, por eso, es porque existe la comparación. Es porque existe la comparación y porque simplemente tú eres una persona que no ha florecido, simplemente. No eres una persona que no tiene confianza de ti misma, que todavía tienes sentimientos negativos, resentimientos, y eso se da, como he venido diciendo, por temas culturales, experiencias que tú has tenido, los valores con los que te formaron. Sí, es un cúmulo de todo, porque a ti tus padres te pudieron enseñar a tener unos muy buenos valores, pero las experiencias fueron distintas. Y por otro lado, también, si tú no sabes esta realidad, si no sabes este contexto, si realmente no quieres investigar o buscar para ser mejor, puedes caer fácilmente también en la sociedad, porque la sociedad te lleva a competir también como mujer. El otro día vi un tiktok, no sé si tú lo viste, de que Paris Jackson, que es la hija de Michael Jackson, fue a un desfile donde la sentaron junto con Esther Espósito, no sé si sabes cuál es. Sí, la de Élite. Élite, que es la tiktok de Élite. Coño, ni siquiera me imaginé nada de Esther Espósito. Perico, y la sentaron a las dos, y se volvió un video super viral, y la gente despotricando y diciendo que se odian, que ni siquiera se miraban, ni siquiera se dirigían la cara, porque las carajas estaban al lado del perico, y era como que no se veían, una estaba al lado de la otra, había una pared, ve tú a saber por qué, a lo mejor ellas detrás de cámaras estaban, uno no lo sabe. A lo mejor fue ese momentito. Pero la gente las enfrentó, simplemente las enfrentó como que, que le hizo esta a la otra, que la otra estaba recha y no la miró. Y es como que, no sabemos, no tenemos ni idea, pero sí o sí, vamos a enfrentar a las mujeres. Y lo que tú estás diciendo yo no lo vi, y te puedo asegurar que Esther Espósito se veía mejor que la otra, o sea, físicamente es mucho más linda, eso también tenemos que tenerlo claro, o sea, existe la gente fea y existe la gente linda. Perico, no, las dos, unas vainas bellísimas, hermosas, carajos, las dos. No, fue porque, no, mira cómo la miró, de horrible, que no sé qué, que eso es envidia, que le... Y es como que... Ah, yo lo que iba a decir, Bessida, yo lo que iba a decir era que aparentemente si una se veía mejor que la otra, que para mí... No, no, no, yo lo vi las dos. En como un desfile de moda, las dos estaban vestidas por la marca, arrecísimas, ¿qué puede pasar ahí? Estaban concentradas viendo el puto desfile, probablemente... Claro. Quieres poner a pelear. A pelear, no vale, no vale, y bueno. Bueno, pero yo sí creo fielmente de que esto está cambiando, sí, estamos evolucionando, estaba leyendo también como una... Ay, ¿qué es esto? Me tiene como de algo, no entiendo. Es como, o mayonesa, o cremita, o algo, a ver. Ay, creo que... Crema. Ay, es como una mantequilla, me huele el dedo a mantequilla. ¿Por qué lo huele? Bueno, no, ya estoy enferma con la olida. Bueno, disculpen el declive del episodio de este momento, por favor, pero lo que iba a decir se me olvidó. Ah, que está cambiando y que leí, como que, ¿cuáles son las posibilidades o cómo nosotros cambiamos esto? Y bueno, una de esas formas es crear este tipo de espacios, así como lo estamos haciendo tú y yo, de poder poner el tema... Sobre la mesa. Sobre la mesa, de exponerlo, de debatirlo, de hacer consciente, porque muchas personas, o muchas mujeres que están actuando de esta mala manera, o que tienen esa competitividad rara allí, capaz no están conscientes. Ni siquiera lo hacen conscientes. Y nunca se han puesto a pensar. Y nunca existen. Exactamente. Para cambiarlo o mejorarlo. Y nunca han dicho, ay, bueno, ¿yo por qué me siento así cuando yo veo a mi amiga? Cuando yo veo a la que viene con un suéter rosado, yo digo, ¿por qué yo no tengo un suéter rosado? Entonces decirme, qué lindo es un suéter rosado, te queda bonito, y por qué no decir, me voy a comprar uno. Claro. No es porque esté competiendo, es que me gustó, mira. Esta me sé rosado para vestir, a mí es rosado, me va a caer. Me queda lindo. Yo me compré uno azul. Exactamente. Y yo capaz, ¿sabes qué me pasó? Yo creo que me conté en el podcast una vez que le dije a una chica que me encantaba la chaqueta que tenía de jean, y al día siguiente me la regaló. Ah, sí, lo dijiste. Lo dije, ¿no? Y que una vieja, después cuando lo usé, me dijo, eso te queda grande, que no sé qué, o sea, eso te diste. Los dos. Los dos. Es que es lo perfecto. Yo creo que como el mejor consejo o la manera de hacer que esto disminuya o que acabe en algún momento, es que, o sea, esto lo saqué también de medio de internet, dice, cuando cada una de nosotras se concentra en ser la fuerza dominante de su propio universo, en lugar de invadir otros universos, o sea, en estar pensando en otra gente, en otras mujeres, creo que todas ganamos. Sí, definitivamente. Porque literalmente tú te desarrollas, eres tu máximo potencial, estás como rozagante, brillante, todo lo que tú quieras, y si las demás, todas están en lo mismo, vamos a ser todas inspiración para todas. Exactamente. Pero nadie anda pendiente de envidiar o de tener malas intenciones con alguien simplemente por estar pendiente de esa persona. Sí, es que entra el tema de la comparación, o sea, en resumidas cuentas, tenemos que enfocarnos en nosotros, dejemos la comparación porque es lo peor que existe, cada quien tiene una visión distinta, unas creencias distintas, un entorno distinto, una vida distinta, mire, es que hasta dos personas que vivan juntas, dos hermanas que vivan juntas, cada una va a tener una realidad distinta. Claro, totalmente. Porque es así, porque cada persona es única y es especial, linda, como nació. Claro, yo creo que... Tenemos que hacernos cargo. Creo yo. Y tú, que nos estás viendo, ¿en algún momento has sentido ese sentimiento de querer lo que alguien más tiene o molestarte porque a alguien le queda bien algo, porque le está yendo bien? Creo que lo que tenemos que hacer es mirar hacia adentro y decir, ¿por qué esto me molesta? ¿Por qué me molesta? ¿Por qué me molesta que a tal persona le vaya bien? ¿Por qué me molesta esto si yo debería estar enfocada en buscar la manera de que a mí me vaya bien o de yo verme de cierta o tal manera? Exactamente. En vez de... Porque es completamente normal que en algún momento te haya pasado por la cabeza eso, porque uno no es un enfermo ni un aberrado por eso, todo el mundo creo que en un momento de su vida le ha pasado, pero creo que lo más importante es eso, preguntarnos a nosotros mismos y decir, reconocer que no está bien y cómo podemos hacer para mejorarlo, ¿no? Claro, y si tú eres la otra persona a la que capaz estás sintiendo ese sentimiento, esas cosas, nada, seguir enfocándote en ti. Claro. No hay otra manera, o sea, ignorar... Si te tienes que alejar de las personas... Exactamente. Hazlo sin dudarlo. Si te tienes que alejar, te alejas. Si eres en un entorno laboral y tienes que ir, ni modo, no vas a dejar el trabajo por otra persona, nada, yo creo que lo mejor es ignorar eso y siempre tú ir con tu buena energía porque también eso se contagia. O sea, el amor, la energía, la actitud, la buena onda, se contagia. Y yo creo que esa es la mejor manera de tú poder combatir... Esas situaciones. Esas paredes, esas situaciones y todo... Total, ¿no? Todo lo que estamos prácticamente... Sí, hablamos ahora. Exactamente. Yo creo que nos pudimos haber hecho una mejor conclusión el día de hoy, así que nada... Ay, no le recordamos a la mitad del que se suscribiera. Bueno, eso lo recordamos ahora. Suscríbanse. Suscríbanse. Denle like. Comenta. Comparte. ¿Qué más quieres que me diga? ¿Qué más quieres? Síguenos. Ve el episodio anterior porque no lo han visto. Estoy molesta. Estoy molesta porque yo comparo los episodios. Claro. Y el anterior fue tan bueno. Así que nada, vayan a verse los otros episodios, espero hayan disfrutado este y como siempre, darle las gracias por estar aquí y por estar ahí en la comunidad, ¿no? Sí. Y el otro episodio se viene invitado. Se viene invitado. Se viene invitado, así que espérenos porque eso nos encanta. Hasta la próxima. Gracias. Chao. Creo que quedó.