Elena Dragotto welcomes listeners to her podcast, where she encourages them to view their daily lives as a teacher guiding them towards discovering their true essence. She answers common questions about personal growth and relationships. In an interview, Elena discusses the concept of personal growth versus dismantling. She believes that personal growth is not about adding more, but about removing what hinders us from finding our essence. This process involves patience and letting go of our identifications. Elena explains that the goal is to reach the essence of being human and find unity rather than separation. She emphasizes that this journey requires removing layers and fears that block our true selves. Elena challenges the conventional ideas of consumerism and action-oriented solutions, instead advocating for a path of discovery and detachment. The interview explores the concept of polarity and the importance of embracing all aspects of oneself. Elena concludes by saying that our e
Hola, soy Elena Dragotto. Bienvenida, bienvenido. Si estás hoy aquí, significa que estás eligiendo mirar tu vida con otros ojos y con otros objetivos. En estos podcasts te propongo que mires tu día a día como un maestro que te acompaña con la benevolencia en un camino evolutivo hacia el descubrimiento de tu verdadera esencia como ser humano. En cada episodio respondo a las preguntas más habituales sobre el crecimiento personal y las relaciones contigo mismo y con los demás.
Acompañándote en un camino que, de muchas maneras diferentes, estamos recorriendo juntos. Disfruta escuchándome. Bueno, pues buenas tardes a todos y a todas y muy bienvenidos tantos a los que estáis en directo como a los que nos vais a escuchar en diferido. Mi nombre es Noria Baldric Mora y voy a entrevistar, como sabéis, a nuestra querida Elena Dragotto. Hoy, como ya dije en la anterior entrevista, vamos a entrevistarla sobre un tema muy sugerente. La entrevista se titula ¿Crecimiento personal o desmantelamiento? Entonces, seguro que todos o muchos conocéis a Elena pero voy a hacer una breve presentación.
Elena Dragotto es doctora en psicología y conseule y se formó de la mano de sus creadores en dos diálogos de psicología de los dioses, sus creadores Hall y Sidreston, y se encuentra entre las pocas personas que está enseñando este enfoque tanto en España como en Italia. Para los que no conozcáis este enfoque, este enfoque es una filosofía, en realidad es una forma de experienciar la vida que es muy sencilla y amable pero a la vez profunda y eficaz que nos permite como ampliar nuestra identidad para tener más opciones para afrontarnos los retos de la vida y a lo que es lo sugerente en el espacio abierto de la vida.
Así que muy bienvenidos y muy bienvenida Elena. Gracias, bienvenidos a todas y todos a quien está aquí esta tarde y como decía Nuria, ¿quién va a escuchar o a ver esta grabación? Bueno, pues a mí cuando vi el título me resultó muy sugerente, Elena, no sé si tú lo habías dicho, pero en particular me ha gustado un montón la pregunta que asocias con el título, que dices algo así como ¿y si resulta que de lo que se trata es de encontrar en nosotros mismos el coraje para quitar capas de lo que siempre ha estado ahí mientras estamos esperando pacientemente desde el inicio? Y me parece una pregunta realmente muy provocativa porque tiene como dos premisas muy contraculturales.
Por un lado estamos inversos en una cultura con una narrativa muy consumista que basa su consumo en añadir cosas para hacer felices. Tú estás hablando de quitarse cosas. Y por otro lado, la otra premisa también me parece muy contracultural porque también la cultura en la que estamos inversos como que nos empuja a actuar para encontrar soluciones y tú estás hablando esperar pacientemente. Entonces, en este marco, como estás desafiando tanto estos mandatos del status quo, me gustaría, te voy a pedir que nos digas los argumentos que hay detrás de estas premisas, ¿no? ¿Qué argumentaciones hay detrás de estas premisas que nos traes? Bien, sí, gracias por estas preguntas, Nuria, porque es verdad, digamos, mi título, mi contenido de esta tarde es contracorriente con el pensamiento general, ¿no? Como dices tú, que tenemos que añadir.
En este caso en particular, ¿no? No me gusta más esta palabra que es crecimiento personal, como que tenemos que crecer. ¿Crecer qué? No tenemos que crecer porque de cualquier manera ya todo está, ya está todo. El viaje es inverso, no es poniendo cosas, sino quitando cosas, quitando lo que no nos permite de encontrar nuestra esencia. Así que la esencia es, digamos, el objetivo final de cada camino personal más que crecimiento, ¿no? Porque todos estamos en un camino, camino hasta, ¿hacia dónde? Hacia casa, la casa.
Podemos llamarlo el paraíso, Dios, como queráis, pero este es el camino. Y el camino es deshacer algo, no es poner más cosas, es quitar, quitar nuestra, por ejemplo, en la psicología de los yoes que se puede entender con quitar, es separarse, desidentificarse de los yoes en que estamos identificados para dejar un espacio al ego consciente y desde allí hacer elecciones de libertad. Así que es, sí, vamos a ampliarnos porque vamos a conocer más nosotros mismos a través de la psicología de los yoes, pero el objetivo es de, ¿cómo? Poner al lado nuestra personalidad que está hecha de todos los yoes.
Y ir con esta desidentificación más y más, vamos a desidentificar este desmantelamiento y más llegamos a la esencia, ¿pero la esencia de quién? La esencia del ser humano, no de Elena Dragotto, no de Nuria Valdrig, no, del ser humano. Esto es el único camino que tiene sentido, si no, otras cosas no tienen sentido, son, digamos, inútiles. Puedes tener un sentido si la dirección es esta, pero con esta intención, si no, no tiene sentido. No tenemos que añadir nada porque ya está, ya está todo.
Está allí la palabra paciencia, no se refiere a nosotros mismos. Nosotros tenemos que aprender a ser pacientes con nosotros mismos. La paciencia es la de la existencia del universo, que tiene mucha paciencia porque está esperando a nosotros desde la noche de los tiempos. ¿Se dice así? En castellano no sé, porque en italiano se dice la notte dei tempi, la noche de los tiempos, desde siempre. Allí que nos espera, nos espera que llegamos a descubrir de nuevo, así que es una descubierta de algo que ya está.
No es añadir para conseguir algo, es quitar, quitar, quitar, quitar, hasta llegar a esta esencia, hasta llegar a la esencia del ser humano, que es una esencia divina, esto es. Hay muchos caminos que pueden ayudarnos en esto, caminos espirituales como caminos psicológicos y espirituales, porque la psicología de los dioses es un camino espiritual y psicológico. Y espiritual porque tiene como objetivo esto también, rendirse a este proceso que nos guía hacia esta esencia. ¿Y por qué es fundamental esta esencia? Porque desde allí, antes de todo, me reconozco por lo que de verdad soy.
No soy Elena D'Arbotto, soy un ser que está aquí para hacer este camino de vuelta a casa. También esto me permite, cuando voy a encontrar esta esencia, que no es personal, que no es única, sino que la encuentro en todos los seres humanos, esto me permite este camino de unidad y no de separación. Así que, claro, sí, dime, dime Nuria. Y bueno, quiero marcar también, porque lo has dicho, y es lo que sostiene la psicología de los dioses, que tiene este enfoque de las polaridades, que nos identificamos con una polaridad, rechazamos al mirar el mundo desde esta posibilidad a aquel otro lado, que no somos nuestras identificaciones.
Pero fíjate que has hablado de quitarse, cuando yo estoy identificada hay todo un conjunto de juicios hacia la otra, la polaridad, y por lo tanto no puedo aprovechar su don. Y esto es lo que veo también un contraste en relación a otros enfoques o metodologías o disciplinas de crecimiento personal. Es como aquello que no me gusta, lo tengo que arreglar, lo tengo que pulir las aristas. Ese enfoque nos está diciendo cómo aquí hay dones y aquí también hay dones.
Encontrar este lugar de esencia, lo que estabas buscando. Esto, este es el camino, esta es la dirección. Y la dirección es la unidad, la dirección en este caso es encontrar esta esencia. Así que tengo que quitar, porque la esencia ya está allí, no tengo que construirla. Ya está, ya está. Así que tengo, como que hay tantas mantas arriba del tesoro, del cristal. Así que el trabajo es este, con paciencia, porque cada vez que yo quito una manta, hay el miedo.
No parece, pero es así. El miedo de me voy a deshacer, voy a perder mi especialidad, que es una palabra, una mala palabra en italiano también. Así que la digo con conciencia. Pero para explicar este tema, que nuestra personalidad nos hace especial. Así que cuando vamos en este trabajo de desmantelamiento, estamos andando en una dirección que no es la especialidad, pero es la unidad, que es el opuesto. De una parte soy único como persona, pero de verdad la esencia es que soy como los demás.
Entonces estás diciendo que ya somos en realidad, no es esta esencia que tenemos que quitar estas capas, que realmente ya somos, ¿no? Y que hay este flujo energético que muchas veces está bloqueado por las piedras que ponemos. No se trata, por lo que dices, de quitar estas piedras para encontrar lo que ya está. Vuestras mantas, vuestras capas, por ahí abajo, para que nos entienda nuestra audiencia. Eso, ya está allí, ya lo somos. Por eso que no es un crecimiento personal.
No me suena esta palabra, ¿no? No tenemos que crecer. Tenemos que, antes de todo, darse cuenta que ya está esto, pero ¿cómo me doy cuenta? Descubriéndolo, un paso después de otro paso, quitando lo que me impide de encontrar esto. Y normalmente es el miedo, el miedo que tiene la forma de, no sé, de un crítico interior, por ejemplo, ¿no? Que me dice que no soy capaz de hacer cosas o que no soy suficiente. Esto me impide de encontrar a esta esencia, ¿no? Porque estaré muy, muy preocupada de hacer algo para ser mejor.
Ya lo soy. Yo creo que lo estás explicando muy bien, Helena, y que se entiende muy bien, pero seguro que vuestra audiencia, y de hecho, yo misma me podría poner como ejemplo. Sí, claro. Las personas que estamos interesadas en el crecimiento personal. Yo fui, aquí, como me veis, una maricita. Yo he venido a hacer cursos, ¿no? Como, cuando haga este curso, ya podré hacer tal, o ya seré suficiente, que muchas veces también hay esto, ¿no? Y, claro, lo podemos entender porque lo estás explicando muy bien, pero el patrón, yo, primero, me lo entendí cognitivamente, pero justamente esta entrevista es estupenda porque estoy en un momento que estoy como encarnando mucho esto, ¿no? Lo entendí cognitivamente, pero ahora lo estoy experimentando en propia.
Claro, entonces, me gustaría también, porque puede servir, te ayuda nuestra audiencia, ¿no? Vale, lo entiendo, pero ¿cómo lo hago, no? ¿Cómo lo llevo a la práctica? Quizás podrías darnos algunos consejos de cómo sería esto de quitarse las gafas y esperar pacientemente. Así como unos ejemplos tranquiles que puedan ayudar a haberlo dado a nuestra audiencia. Como, repito esto, necesitamos buscar la paciencia en nosotros porque no la tenemos, porque tenemos el crítico. Esto es, ¿no? En lugar de la paciencia tenemos el crítico interior.
Y es horrible porque el crítico nos empuja a mejorar, ¿no? Como se decía antes. Así que antes de todo, por ejemplo, podemos empezar a observar a nuestro crítico, a reconocerlo a nuestro crítico. Y esto ya nos ayuda a quitar unas capas, ¿no? Capas, se dice capas, ¿no? Mantas. Capas, mantas. Para mí está bien. Sí. Y esto puede ser una manera, ¿no? Porque para el crítico nunca somos suficientes. Empezar a pensar, bueno, el tema es que yo tengo ya, ya lo tengo, un valor, ya está.
Así que el camino es descubrirlo. Que no es mejorarme. Es empezar un proceso. Tomarme responsabilidad de mí mismo. Y estas también son malas palabras en nuestra sociedad porque siempre es la culpa del otro, de la sociedad, del gobierno, del COVID, de la guerra, del Israel, del Palestinos. Siempre, ¿no? La culpa está afuera. Aquí nadie tiene culpa, pero sí responsabilidad. Esto es diferente. Así que empezar a tomarse responsabilidad de mí mismo significa que lo que pasa en mi vida tiene que ver conmigo.
Es una lección que necesito aprender. Es la manta que tengo que quitar. Así que si empiezo a mirar a mi vida de esta manera, es totalmente diferente. Tengo el poder de hacerlo. No soy víctima del mundo. Tengo el poder de mirar a lo que pasa alrededor de mí y utilizarlo para quitar una manta. Porque estas son todas lecciones que tienen a que ver conmigo mismo porque están allí en mi vida, así que tienen a que ver conmigo mismo.
Pero no como víctima, como ánima que está eligiendo esta situación para aprender algo y quitar esta manta. Esto es, para descubrir más y más, para acercarme más y más, y para más y más aprender a confiar en la existencia que sabe lo que yo necesito. No lo soy yo, lo sabe la existencia. Y más y más yo acepto estas lecciones y más y más confío en la existencia porque me doy cuenta que de verdad lo que me llega tiene que ver conmigo y es una elección, una clase, digamos, espiritual que tengo que aprender para seguir en este camino de vuelta a casa, para seguir con estas mantas, quitando estas mantas.
Esto es. Así que el consejo es esto. El consejo es buscar talleres que van en esta dirección, ¿no? Que dicen donde soy equivocado y no que me quieren arreglar. Esto no. No son, no son talleres que me pueden ayudar, de verdad. Y esto es otro consejo. Oh, ¿qué puede ser también? Observarme, ¿no? ¿Qué hago en mi vida? Como si estoy en una situación, ¿no? Activar este yo que es el observador, para observarme y ver qué hago, cómo reacciono, en esta situación.
Y esto me da la conciencia de mí mismo. Me da la conciencia de en qué yo es estoy identificado, por ejemplo. Y después, claro, necesito, si quiero hacerlo en profundidad de este trabajo, necesito de un ayudo, un ayudo profesional, un ayudo de alguien que sabe cómo trabajar en esto. Esto seguro, esto facilita, obviamente. Sí, has dado como muchos ejemplos y también iba resonando, ¿no? Así como recopilando hablabas esta parte de crítico, ya solo cuando lo vemos, ¿no, Elena? Como que ya no somos él.
Ya te da una perspectiva, ¿no? Este resonado, porque ahora podría contar un montón de anécdotas. O sea, es mi momento, es mi momento. También esto de responsabilidad, que, ostras, cómo entramos en la víctima, ¿no? Y somos en relación y cualquier situación nos trae una información para nosotros. Es que he contado, ¿no? El confiar. El confiar porque a veces desde nuestra persona quizás no lo entendemos y lo vemos como malo, pero hay que confiar en algo mayor.
Y quizás yo lo veo como bueno, pero sin un sentido para algo mejor que me está llegando, ¿no? Los talleres alineados, decías, y también esta observación constante. Creo que has hecho una buena recopilación de consejos que seguro que van a ser muy útiles para nuestro bien. No sé si quieres añadir alguna cosa más. No, simplemente un poco seguir con lo que tú estás resumiendo muy bien. Es esto, ¿no? Que el otro que está en mi vida, quien quiera, puede ser un novio, una novia, puede ser un hermano, una hermana, puede ser el vecino de casa, puede ser el colega, un hijo, una hija.
Sobre todo, si esta persona queremos matarla, los hijos no, los hijos no, pero hay veces que es difícil con ellos. Bueno, es increíble, pero esta persona está allí para enseñarnos algo. Y esta es una de las mantas que tenemos que quitar. Y hay la posibilidad de mirar a esta situación para aprender. Y hay herramientas en la psicología de los dioses que, como decías tú, Nuria, básicamente habla de polaridad. Así que cuando hay alguien enfrente de ti que no te gusta para nada, no te gusta la persona y tampoco te gustaría ser como él o ella, bien, estamos enfrente de una lección, de una clase espiritual, de una lección espiritual.
Él o ella son enseñantes de algo, como nosotros lo somos para esta persona, claro. Un encuentro, esto me sale, cada encuentro, no, ponemos en la actitud de hacer de cada encuentro un encuentro sacro, ¿y cómo lo hacemos? Sagrado. Sagrado, sí, gracias, sagrado, un encuentro sagrado. ¿Y cómo lo hacemos esto? También en la dificultad, en el juicio más feroz con esta persona, pensando en un rincón de nuestro cerebro, en frente de mí hay una lección que tengo que aprender.
Mientras estamos allí enfadados de reservar este espacito en la mente, esta vocecita que nos dice que esta es una lección que tienes que aprender. Yo le digo, Aleja, a veces así como metáfora, es como el cartel que te trae la carta, pero la carta el mensaje es tuyo, y quiero aprovechar aquí, porque a nuestra audiencia quizás le puede interesar más aprofundizar. Quiero decir que este enfoque, que además Elena enseña con tal maestría y tal pedagogía muy grande, nos ayuda a leer esta carta que es nuestra, porque el otro solo es el cartero.
Entonces yo la recomiendo muchísimo este enfoque, yo estoy formada con Elena, estoy certificada en WebDialog, por eso sé de lo que hablo, no hablo simplemente por lo experimentado. Me gustaría Elena, porque quizás hay personas que pueden interesarse y les gustaría aprofundizar, si puedes contar un poco cómo podrían aprofundizar en caso de estar interesado. En salto, sí. Sí, Nuria se ha formado y sigue formándose, y ella es parte de mi staff, así que conoce muy bien de qué estamos hablando, y no solo lo conoce, lo que veo que puedo apreciar en las personas como Nuria y personas de mi staff, que siguen formándose, ¿en qué sentido? Porque el Voice Dialog y la Psicología de los Yoes son vivientes.
Cada encuentro se mueve algo, no son protocolos, ¿se dice protocolos? Es algo que vive siempre, siempre nos da algo que puede, que podemos utilizar. Los ideadores también a la edad muy, son, Hal ahora ha falecido, pero Sidra sigue viviente. Pero cuando yo encontraba a ellos en la formación, que ya tenían una edad muy, con números muy altos, pero nos contaban situaciones de situaciones donde habían aprendido, seguían aprendiendo. Así que antes de todo, creo que esto es una peculiaridad muy interesante.
Y estamos organizando, hablando del crítico, una de las, de los talleres que probablemente lo estamos organizando en estos días, que van a salir, será en mayo, sobre el crítico y el juez interiores. Y yo creo que trabajar sobre los dos, en este momento de nuestra sociedad, en esta cultura de la performance, de la optimización, de optimizar todo, de hacer, de ser mejores y de ser tan, de, de éxito, el crítico se ha engordado de todo esto.
Y se ha vuelto peor de antes. Así que, este taller, seguro que va a ser un ayudo muy grande en este trabajo hacia la, el amor para sí mismos, la benevolencia para nosotros mismos. Porque necesitamos esto, no necesitamos del crítico que nos machaca. Necesitamos de benevolencia, de paciencia, porque somos una maravilla, pero bajo de todas estas mantas que tenemos que mirar, y no todas son maravillosas. Eso es. Pero si nos vamos a quitarla con benevolencia, y no con el crítico, bueno, esto es más fácil.
Así que tenemos el primer encuentro, la primera cita, para trabajar, para aprovechar de trabajar con la psicología de los jueces, será en mayo, sobre el crítico. Y después, puede ser, porque digo, lo estamos organizando en estos días, hay dos talleres sobre la vía de las relaciones. El título será, desde la necesidad hasta la sabiduría. La vía de las relaciones. Y esto también, que la relación es la enseñante más grande, que nos permite de llegar más con rapidez a este cristal, a este tesoro.
Bueno, pues hay como muchas opciones. Quien quiera tener información, lo puede hacer al mail fiss.es. Aquí pueden encontrar información, solicitar información. Y bueno, antes de despedirnos, si quieres decir algo. Sí, una cosa, perdona. Nuria, también, en unos días, cuando hemos organizado todo, en mi página web, elenadragoto.com. Bueno, bueno. Y bueno, antes de despedirme, quiero anunciar la próxima fecha, la próxima entrevista con Elena, que va a ser el 19 de marzo, Día del Padre, así no se nos olvida, a las ocho de la tarde, y también con un tema muy interesante, que se llama Primavera, atracciones y enamoramiento.
Es un dicho en castellano que dice que en la primavera la sangre altera, ¿no? Un poco parejo. Así que no os lo perdáis. Y finalmente, como siempre acabamos las entrevistas, le pedimos siempre a Elena que nos lance algunas preguntas inspiradoras, para si tenemos un poco de deberes para reflexionar. ¿Qué pregunta inspiradora tienes hoy para nosotros? Bueno, la pregunta podría ser, después que has escuchado todo esto, todo esto, ¿cómo te sientes? Esta es la pregunta. ¿Cómo te sientes? ¿Cómo estás? ¿Cómo te encuentras? Después de lo que has escuchado, ¿cómo te encuentras? ¿Cómo antes? ¿Mejor te encuentras más en paz contigo mismo, o más feliz, o no? ¿Cómo te encuentras? Escúchate un momento.
¿Y cómo te encuentras? Bien. Estupendo. Pues muchísimas gracias, Elena. Ha sido, como siempre, un placer muy inspirador. Gracias. Y no os perdáis la próxima entrevista, 19 de marzo. Hasta la próxima. Gracias a todos y adiós. ¡Chao! ¡Chao, chao!