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Florencia Meluso loved reading music magazines as a child. She considered studying music criticism or radio production but didn't pursue them. She took a journalism workshop to test her interest but decided against studying communication. Over 20 years later, she found a regional journalism program and enrolled. She now feels prepared and mature enough to pursue her passion of being a music journalist. Mi nombre es Florencia Meluso. De chica me encantaba leer revistas de música, esas que traÃan pósters para colgar en el dormitorio y reseñas de discos de rock. Algunas amigas me decÃan que tenÃa que estudiar para hacer crÃtica musical o algo asÃ, pero yo no me lo creÃa tanto. Por esos años intenté entrar en el ICER para ser locutora, pero me atemorizó el examen de ingreso. Después pensé mejor producción de radio porque me encantaba, pero tampoco me presenté a rendir examen. Hice un taller de periodismo para probar si estaba segura de que me iba a gustar la carrera antes de embarcarme en semejante cuestión. Cinco años me parecÃa una eternidad por aquel entonces, pero las vueltas de las vidas y las mÃas hicieron que dejara de lado la idea de estudiar comunicación. Más de 20 años después encontré un aviso sobre la carrera de periodismo regional de la EMAC y no lo dudé. Quizás antes me jugaron en contra la presión de tener que trabajar y estudiar algo que tenga salida laboral, pero ahora estoy preparada. Es más, tengo más herramientas para encarar este desafÃo que antes. Siento que tengo la madurez para afrontar esta etapa y estoy feliz de contarles que ya me siento más cerca de lograr eso que me apasiona, ser periodista musical. Mi nombre es Florencia Meluso. De chica me encantaba leer revistas de música, esas que traÃan pósters para colgar en el dormitorio y reseñas de discos de rock. Algunas amigas me decÃan que tenÃa que estudiar para hacer crÃtica musical o algo asÃ, pero yo no me lo creÃa tanto. Por esos años intenté entrar en el ICER para ser locutora, pero me atemorizó el examen de ingreso. Después pensé mejor producción de radio, porque me encantaba, pero tampoco me presenté a rendir examen. Hice un taller de periodismo para probar si estaba segura que me iba a gustar la carrera antes de embarcarme en semejante cuestión. Cinco años me parecÃa una eternidad por aquel entonces, pero las vueltas de la vida y las mÃas hicieron que dejara de lado la idea de estudiar comunicación. Más de 20 años después encontré un aviso sobre la carrera de periodismo regional de la EMAC y no lo dudé. Quizás antes me jugaron en contra la presión de tener que trabajar y estudiar algo que tenga salida laboral, pero ahora estoy preparada. Es más, tengo más herramientas para encarar este desafÃo que antes. Siento que tengo la madurez para afrontar esta etapa y estoy feliz de contarles que ya me siento más cerca de lograr eso que me apasiona, ser periodista musical.