Desarrollo moral en la adolesencia

In this episode of the program "Psychology and Life," the focus is on the emotional and moral development during adolescence, specifically between the ages of 5 and 10. It is important to take a holistic approach to understand the multiple factors that influence psychosocial development, such as biological, cognitive, emotional, and social factors. Emotions play a crucial role in human development, and there is a distinction between emotional states and moods. Intelligence emotional is a concept that highlights the importance of understanding and managing emotions. There are four basic emotions - happiness, anger, fear, and sadness - with happiness being the most innate. As children enter primary school, they develop social habits and a clearer sense of self. Identity construction and moral development occur during this stage. The child's thinking becomes more complex, considering social and familial contexts. Moral development progresses from heteronomous morality, imposed by authorit Bienvenidos a otra edición de su programa Psicología y Vida, donde analizaremos el desarrollo emocional y moral en la adolescencia, especialmente en la etapa de los 5 a 10 años. Etapa que, en el caso occidental, es de curso obligatorio en la educación primaria. Para empezar, es importante resaltar que para un desarrollo psicosocial más idóneo, entendiendo psicosocial como la relación de lo emocional con lo social, es vital una mirada holística del ser, teniendo en cuenta los múltiples factores que intervienen, tales como los biológicos, cognitivos, emocionales y sociales. Así las cosas, revisaremos definiciones de qué se entiende como emoción, la construcción de la identidad y el desarrollo moral en esta etapa. Arrancamos por invitarlos a que en el chat nos dejen su opinión de qué entienden por emoción. De nuestra parte, podemos decir que aunque en términos generales hay un consenso de su definición, estas varían aspectos de la etapa en que aparecen, también depende según la teoría desde la cual se estudie. Por ahora tomaremos la definición que nos hace la RAE, que la define de manera literal como la alteración del ánimo intensa pero pasajera, agradable o ingrata, ligada a una reacción somática, lo que nos invita a una primera y clara categorización. Una cosa es que hablemos de estado emocional y otra de estado anímico, pues tanto su duración, intensidad como forma son sustancialmente distintas. De todos los factores que intervienen en el desarrollo humano, es vital comprender el papel que tienen las emociones, por lo que hoy en psicología se habla de inteligencia emocional, concepto desarrollado inicialmente por Daniel Goleman. Peter Halloway y John Mayer. Lo anterior sobre todo si tenemos en cuenta que hay emociones que podemos considerar incluso innatas y que toda nuestra interacción con el medio está cruzada por estas experiencias y nuestros estados de ánimo. Con este panorama acordemos, por lo menos de manera parcial por supuesto, que se pueden establecer cuatro emociones básicas, la felicidad, la ira, el miedo y la tristeza. De estas cuatro se dice que sólo la felicidad es la que se puede observar de manera más innata, las otras aparecen pronto, aproximadamente a los dos meses. Para la etapa en análisis podemos decir que cuando el niño llega a la escuela primaria ya tiene consolidados algunos hábitos sociales, como lo son el control de su interés, el control de la agresividad, algunas normas de convivencia y conocimiento de los otros. A este punto el niño empieza a tener una conciencia más clara de sí mismo, es decir, se genera poco la construcción de la identidad, a lo que paralelamente también va tomando forma es el desarrollo moral. De la identidad podemos definir que es esa conciencia de sí de la que hablábamos, que se establece también como una representación en donde se diferencia nuestro yo del de los otros, quienes pues claramente a su vez están generando y proyectando el mismo proceso. En la etapa que venimos observando el pensamiento y la emoción se hace más compleja, ya el niño no tiene en cuenta sólo sus estados poco egocéntricos, sino que redimensiona y amplía el entorno, tanto en lo social y en lo familiar. La evolución moral está intrínsecamente marcada por las emociones. Se puede decir que el niño, como lo analiza Piaget, pasa de la moral heterónoma, lo que produce a que es impuesta por el tutor, a la moral autónoma, donde la norma se hace flexible. El niño cae en cuenta que la norma se puede modificar. No podemos dejar pasar por alto la importancia que adquiere la dimensión de justicia en este aspecto y su percepción en esta cuestión que llamamos de lo moral y su desarrollo. Incluso se puede establecer el siguiente lineamiento en el desarrollo de la moral, de los tres a los cuatro años que sólo busca recompensa, de los cinco a seis, que es una recompensa basada en igualdad, y de los siete en adelante, una recompensa basada en cantidad y calidad de la tarea que hace el niño. Este escenario está enmarcado por la interacción con los pares, claramente, su retroceso en la educación primaria. El niño ahora busca ser parte del grupo de manera intensa, empieza a establecer, por ello, conceptos más complejos y reflexivos sobre las circunstancias que vive, consolidando de a poco su identidad y su moral, que no es estática, recordemos, sino que continúa en permanente construcción. Bueno amigos, eso es todo por hoy, esperamos aportar en conceptos generales de teoría de desarrollo en adolescentes y infancia, y los motivamos a profundizar en su entendimiento y aplicabilidad en nuestros diferentes espacios íntimos, a fin de construir una sociedad con individualidades más sanas. Hasta la próxima.