Entonces, vamos a seguir con la segunda parte de Orando la Biblia, ¿no? La vez pasada habíamos mencionado sobre los Salmos. Esta parte también iniciamos sobre los Salmos, pero también algunas otras partes del Nuevo Testamento. ¿Por qué los Salmos? Porque Dios ha inspirado un Salmo para cada suspiro del alma. Y en los Salmos realmente vamos a poder encontrar todo, que todas nuestras emociones literal humanas, como a veces el júbilo, ¿no? La decepción, la frustración, el desaliento, la culpa, el perdón, el gozo, cuando tenemos gratitud.
También a veces con el trato de nuestros enemigos, el descontento, el contentamiento, angustia, que muchas veces la Biblia, de hecho, nosotros yo creo que le llamamos deprecio, pero la Biblia le llama angustia y viene más de 100 veces en la Biblia. Y clamor, ¿no? Entonces, todo esto lo vamos a poder encontrar en los Salmos. Atanasio era un teólogo norafricano del siglo IV que dijo, sea cual sea su necesidad o problema particular, desde el Libro de los Salmos puede seleccionar un grupo de palabras que lo represente.
Realmente, y creo que es lo que yo he podido experimentar que a veces, por decir, en mi Salmo del Día, pues si hay versos que me representan a lo mejor en la situación que estoy pasando en ese momento. Y es por eso que ahora les quería compartir en esta sección este método sistemático que cómo vamos a poder usar los Salmos, ¿verdad? Por decir, les comparto la tabla porque son 150 Salmos, realmente tenemos mucho de dónde escoger.
Y estos 150 Salmos los vamos a dividir, pues, en los 30 días de nuestro mes, ¿no? Y por decir, vamos a iniciar con el día del mes. No sé, yo estoy aprendiendo esto hasta hoy, que es 27, inicio el día 27. Y ahorita vamos a tomar como ejemplo el día 5. Les pasó, bueno, aquí está la tabla, ahorita te la explico, pero por decir, aquí está el día 5. Entonces, desde ese día yo tengo 5 opciones de Salmos para que alguno coincida con la necesidad de oración que yo tengo en ese momento, ¿verdad? Por ejemplo, el día 5, mis opciones que yo voy a poder tener, si por decir el día 5 no se relaciona a lo que yo quiero o estoy pasando en ese momento, tengo la opción de escoger el Salmo 35, o tengo la opción de escoger el 65, 95 y 125.
Entonces, lo que vamos a poder hacer es como dar un vistazo rápido y vamos a seleccionar el que vamos a orar. Muchas veces en la Biblia trae el título de los Salmos, o sea, yo creo que ya con eso nos vamos a dar una idea, ¿no? Como gratitud por victoria, o ayuda en la aflicción, o si me explico, o sea, son Salmos que traen esos títulos que a lo mejor vamos a poder agarrar uno o no más con facilidad, ¿no? Y los días 31, en los meses que tengan 31 días, el día 31 podemos escoger el Salmo 119.
¿Se acuerdan que este Salmo 119 tiene, yo lo leí, me acuerdo, más de 165 o más de 165 versículos, son muchos. Por eso es que el día 31 pues agarras una parte del Salmo 119, que son pues demasiados versículos, y no sé si se acuerdan que lo vimos en el libro de una mujer sabia, porque hablábamos de David, que pues David es un hombre conforme al corazón de Dios, y que David amaba la Palabra de Dios, y simplemente en este Salmo 119, prácticamente como 10 veces él le dice a Dios el amor por su Palabra, yo tengo amor por su Palabra, yo atesoro su Palabra, entonces me acordé de esta parte por el Salmo 119, ¿verdad? Así que esta tabla que ven aquí, no sé si se ve bien con ustedes, por decir, el día 2 tengo opción para el versículo 2, o el 32, 62, 92, o 122.
Entonces esta tabla nos va a ayudar para evitar estar vagando por todo el libro, ¿no? Como realmente sin tener una idea de que puedo orar, ¿no? Y así ya con esto vamos a poder tener como una guía. Lo que yo había hecho antes de esta tabla, yo había estado orando día por día, pero si realmente creo que esto es mejor porque nos va a ayudar a tomar lo que en ese momento estemos pasando, ¿no? Porque al seleccionar estos cinco Salmos, ¿no? Ya tenemos esta opción, entonces sabemos que alguno de ellos pondrá la Palabra en nuestro corazón, ¿verdad? Por lo que nuestro corazón esté pasando, y al mismo tiempo porque el mismo propósito de Dios es que Él usó su Palabra para hablar, ¿no? Para que nosotros la obtengamos para adorar, específicamente en los Salmos, ¿verdad? Y ahora por otro ejemplo, este es de los Salmos, pero también en este libro de Orando en la Biblia pone un ejemplo con el Nuevo Testamento.
Es esencial que nuestras oraciones sean guiadas y sostenidas y controladas por la Palabra de Dios, y eso lo vimos miércoles pasado porque realmente llegamos a un punto en el que, ok, ¿y ahora qué digo, no? Oramos por las mismas cosas y usamos las mismas palabras, y por eso pues se me hace aburrido y ya ni me dan ganas de orar. Entonces es esencial que siempre usemos la Palabra de Dios para poder orar. Y este va a ser pues, por decir, algún tema de, según nuestras necesidades, por decir, respecto al tema de que necesitó, bueno, hablando de nuestra compañera Rocío, que sus papás necesitan mejorar en su relación de matrimonio, ¿verdad? Podemos orar por ellos usando 1 Corintios capítulo 13, ¿verdad? Necesitamos desarrollar el amor bíblico y necesitamos, pues ellos necesitan desarrollar ese amor, ¿verdad? Basado en la Palabra de Dios, entonces podemos orar por ellos usando 1 Corintios versículo 13.
Hay otra parte que es en las cartas de César Lincenses en que escribió Pablo, dice, ustedes saben, hermanos, que nuestra visita a ustedes no fue en vano. Y decía, señor, gracias por aquellos que nos enseñaban tu palabra, porque Pablo está hablando como él personalmente, que él se dedicaba a compartir la Palabra de Dios. Entonces creo que esto nosotros lo podemos usar para orar por nuestros pastores, ¿verdad? O sea, podemos decir, señor, gracias por los que nos enseñan su palabra, que son nuestros pastores, ¿verdad? Porque realmente creo que no, difícilmente, o sea, como que ellos van a venir a ti a contarte sus problemas.
Si me explico, o sea, creo que es más nosotros que vamos con ellos y les contamos nuestros problemas y esto, pero difícilmente ellos van a venir con nosotros. Y sabemos que como son personas iguales que nosotros, van a tener problemas. Entonces podemos usar también la, la, esta parte de la Biblia para orar por ellos, ¿no? Para decirle, señor, gracias por nuestros pastores, porque, porque nos enseñan, porque nos guían, porque son fieles a ti, porque son fieles y pacientes con nosotros.
Gracias porque también, señor, tú abres mis ojos para yo ver mi necesidad de ti. Y empezamos, ¿verdad? Otra parte en este versículo de César Noicente decía, pues nuestra exhortación no procede de error o impureza ni es con engaños. ¿A qué se refería este versículo? A que, por decir nosotros, ¿no? Que compartimos de su palabra jamás va a ser con error ni con engaño, ¿no? Por lo que decía, yo me acuerdo que decía en la, en la Biblia que van a venir, pues sí, personas como que quieran venir a distorsionar la palabra de Dios, ¿no? O, o por decir nosotros mismos que tenemos familia, que, que viven como en ese engaño de, de, de otras cosas que le dijeron por parte de la religión, ¿no? Cosas que realmente esas personas no, a lo mejor no calificadas, decidieron creer, ¿verdad? Y cómo podemos orar por ellos, o sea, decirles como, señor, ayuda pues a quien sea, ya sea a mi jefe, a mi cónyuge, a mi amigo, a mis padres o en la iglesia, a personas que están siendo engañadas por el maligno, por corrientes también de pensamientos erróneos, ¿verdad? O sea, te ruego por ellos para que su mente sea libre de esas mentiras engañosas que han creído respecto a la mala religión, respecto a que, este, no sé, había también un, como que un grupo en donde decía, pues ya eres cristiano y todo te va a salir bien.
Eso es mentira también, eh, respecto a personas que tienen, este, un engaño en su mente sobre la identidad de género, ¿no? Todo este tipo de cosas vamos a poder usar, por decir esta parte de primera vez, de San Lorenzo. Y ahora, basándonos en el Nuevo Testamento, en Juan capítulo 5, perdón, déjenme descompartir aquí la, sí, aquí está. Juan 5, hay una, no sé si se acuerdan de esta historia. Esta viene siendo que vamos a poder usar también hechos o historias para ver el tema general de la lectura y así poder orarnos.
Probablemente una historia de la Biblia se está basando en la historia que yo estoy pasando por estos momentos, ¿verdad? Y en Juan 5 nos dice, una multitud de enfermos, de ciegos, de cojos, de paralíticos, estaba allí un hombre que tenía 38 años que estaba enfermo. Tantos años, y también yo pienso que muchas veces con facilidad nos acostumbramos como que al dolor de otras personas que ya ni siquiera tenemos misericordia. Entonces, aquí dice, o sea, había tantos enfermos que probablemente la gente pues ya se les hacía normal, ya ni siquiera les ponían atención, ya ni siquiera se preocupaba.
Por eso oramos y le decimos, Señor, ¿con cuánta facilidad nos acostumbramos al dolor de otros que ya no nos mueven, verdad? Perdóname por no tener esa actitud como la tuvo Cristo, ¿verdad? Dame un corazón compasivo, creo que eso es lo que a Dios le agrada, un corazón compasivo. Te ruego por los enfermos que están en los hospitales, por los que viven en soledad, por los que se sienten en depresión, por los que se sienten en angustia o ansiedad, que Dios nos dé compasión por las personas que están pasando ya sea por enfermedades físicas, enfermedades psicológicas, que Dios nos ayude a ser como Cristo en esto, tomando esta historia de la vida, ¿verdad? De poder tener compasión por ellos y acercarnos a ellos, aun cuando muchas veces yo pienso que ese tipo de personas trata de alejarte o ponerte en la soledad.
Ahorita les comparto uno de los versículos de por qué les digo esto. Entonces, bueno, es parte de cómo podemos usar las historias. Y un ejemplo que a mí se me venía a la mente estudiando esto era la vida de Ana. ¿Se acuerdan de la vida de Ana, que era una mujer estéril? Hay tantas mujeres estériles. Era la vida de Ana, que era una mujer estéril, y se burlaban de ella, y ella lloraba mucho, y lloraba, y lloraba, y lloraba.
Que de hecho decían, en la Biblia dice, ella estaba en depresión y lloraba. ¿Y cómo podemos orar? Tomando otra vez esta historia de la Biblia, es orando por esas mujeres estériles para que Dios cambie su corazón a través de esa situación, ¿verdad? Para que también las personas ya no se burlen de ellas, ¿no? Porque muchas veces la gente ni sabe. Y luego en la familia te dicen, oye, ¿y para cuándo los hijos? Y a la mejor de ellas obviamente no quieren decir, pues es que ni siquiera puedo.
Así me explico, va a ser a la mejor difícil para ellas expresar eso. Y es como que pues eso les va a hacer sentir peor, ¿no? Y creo que es una historia de Ana es la que podemos usar para orar por nuestras conocidas que son estériles. Entonces, ¿qué va a ser? O sea, a partir de esta información de su palabra, ¿cómo yo puedo tener estos resultados de practicar la oración, verdad? Que es lo que vimos, que mi mente ya no va a divagar y el tiempo se va a hacer corto en que aspecto a que vas a tener, la verdad que hay mucha información a través de la Biblia para poder orar, que literal te puedes pasar 30 minutos orando, hasta más.
Y la oración está más centrada en Dios que en mí, ¿verdad? Eso también lo veíamos en el Mateo 6, que era pues nuestro ejemplo de oración. Ahora también nuestro monólogo se va a convertir en una conversación con Dios, porque la Biblia es Dios hablando a nosotros, ¿verdad? Dios comienza el diálogo y cuando nosotros leemos, nosotros le respondemos con respecto a lo que Él nos dijo en este versículo y también nos vamos a poder identificar con los salmos porque fueron escritos por personas que experimentaron dificultades como nosotros.
Y esas palabras están expresando en estos momentos nuestro sentir, ¿verdad? Y también pensamos más en lo que la Biblia dice, porque la recordamos con mayor facilidad asimilándola. El estar leyendo, perdón, y orando a través de la Biblia, también nos va a ayudar a retener los versículos en nuestra mente y ahora, perdón, a tratar de meditar en la palabra en vez de estar dejándole a nuestra mente pensar en tantas cosas que, no sé por qué últimamente de la nada me vienen pensando, o sea, aunque no sean malos, pero digo, ¿eso qué? No quiero pensar en eso y mejor trato de acordarme de los versículos que he leído a través de la Biblia.
También lo que habíamos dicho el miércoles pasado es que vamos a seguir orando por temas de siempre, ¿no? Yo creo que la oración del justo Dios la escucha y que también la oración, aunque sea lo mismo también, Dios nos escucha porque hay una historia en la Biblia, perdón, de unos amigos que el amigo fue con su otro amigo porque tuvo visitas y pues no tenía nada que darle. Entonces yo iba a casa de Tatiana, Tati, Tati, Tati, ábreme la puerta.
Tatiana ya estaba acostada y yo ya estaba dormida y yo ahí, Tati, ábreme la puerta, por favor. ¿Y qué creen? Pues Tatiana me va a abrir más por mi intensidad porque ahí estuve persistente a que, pues, sí, ¿verdad? O sea, a lo mejor ella no se quería levantar pero ella me abrió porque yo estuve insistente y eso es a lo que voy. Entonces seamos insistentes en nuestras oraciones. O sea, probablemente pasa que muchas veces ahorita empiezo a orar por algo y ya dentro de dos semanas pues ya dejé de orar por eso, se nos olvida, ¿no? Yo por eso llevo como mi cuaderno para seguir.
A veces, aunque mi siguiente semana noto lo mismo, no importa porque es bueno ser insistentes. Dios mismo nos lo enseñó a través de esta historia, ¿no? Les aseguro que su amigo le va a abrir porque ha sido insistente. Dios nos va a escuchar porque estamos insistentes pero ahora a través de estos salmos vamos a poder orar con palabras diferentes, ¿verdad? Usamos el miércoles pasado, usamos el salmo 23 como ejemplo. Ahorita pues hablamos sobre el primera de Corintios 13 para que Dios, por decir, si quiero orar también por mis hijos para que el Señor desarrolle en mis hijos el amor, ¿no? Que dice en su palabra, ¿para qué? Por decir, para nuestra amiga Raisa.
Tú puedes usar el primera de Corintios 13 para que Dios desarrolle su amor en la vida de tus papás y en su matrimonio, ¿verdad? Y podemos usar también el salmo 1 para que nuestros familiares, para que nosotras mismas nos convirtamos en mujeres que mediten en su palabra. Mujer es una persona que registró más de 50.000 oraciones Él tenía un cuaderno en donde escribía todas sus oraciones. Él escribió 50.000 oraciones y tuvo respuesta el mismo día de 30.000.
A lo largo de su vida cuidó, alimentó y educó a más de 10.000 huérfanos. Eso es increíble. Claro que él era un hombre que tenía que depender de Dios. Probablemente, aún cuando tus ingresos a la Mejori le daban para alimentar a estos 10.000 huérfanos a la Mejori no, y por eso era que personas llegaban y le decían, oye, pues esta comida la íbamos a entregar en no sé dónde, pero por alguna razón no nos la aceptamos y venimos aquí y te la damos.
Entonces era como la forma de mujer en donde él podía experimentar y experimentó que Dios contestó 30.000 de sus oraciones al instante. Hay una frase de... ¿cómo se pronuncia? Perdonen mi pronunciación. Que dice, debemos orar cuando tenemos deseos de hacerlo para no desaprovechar lo que Dios nos quiere decir. ¿Se acuerdan de una vez que Dios me puso en mi corazón como que abre tu Biblia, abre tu Biblia? Y yo, bueno, pues como que es raro sentir eso, ¿no? Que abre tu Biblia.
Y cuando la abrí era uno de mis artículos favoritos que eran Romanos 8.28, verdad. Todo lo que te suceda, aun cuando no lo entiendas yo lo voy a usar para tu bien. O sea, eso es cuando Dios... que debemos aprovechar esos sentimientos que Dios nos está poniendo de querer orar, de ponernos a orar. Pero también debemos orar aun cuando no tengamos ganas, ¿verdad? Porque va a ser peligroso permanecer en esa condición. Si pasa, y creo que sí me llegó a pasar esos momentos en los que no tenía ganas de orar.
Y si te quedas mucho tiempo sí va a ser más difícil de que lo retomemos. Por eso dice, aun cuando muchas veces no tenga ganas de orar, oren, ¿verdad? ¿Por qué? Porque nuestro mayor ejemplo es Jesús. Ahorita les comparto el Salmo 22 porque Jesús mismo en medio de su dolor en esa cruz Él oró los salmos. Fíjense, en el Salmo 22 uno dice, Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? Y sabemos que en los Evangelios repite esta parte en Mateo 27, 46 que le dices, Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? Pueden buscar el Salmo 22 para que se den cuenta de lo que estoy hablando.
De todas formas, disculpen que no sigo compartiendo aquí, pero ustedes busquen el Salmo 22 porque en el versículo 34 y 35 dice, soy derramado como agua y todos mis huesos están desconjuntados. ¿No se han dado cuenta a veces que yo leía los Salmos? ¿A qué se refiere? Estoy derramado como agua, pero realmente era la situación en la que estaba pasando Jesús en la cruz, cuando le destruyeron todos sus huesos, cuando su sangre estaba escurriendo, ¿verdad? Era lo que decía en Juan 19, lo vemos en este Evangelio, uno de los soldados le traspasó el cotado, se acuerdan de eso, con una lanza y al momento salió sangre y aguas, por eso Jesús estaba orando el Salmo 22.
Estaba derramado como agua. También en el Salmo 22, versículo 15, dice, la lengua se me pega al paladar. ¿Recuerdan esta parte? No te habíamos visto en la película, que Jesús dijo, tengo sed y le acercaron como una esponja, ¿verdad? Para que él pudiera beber, pero creo que al final era vinagre, ¿verdad? Todos alrededor, no todos, perdón, pero muchos estaban burlando de ese momento que él estaba pasando porque en Salmo 22.7 dice, todos los que me ven de mí se burlan, hacen muecas con los labios y menean la cabeza porque perros me han rodeado y me han cercado cuadrilla de malhechores.
Y luego en Mateo 27 dice, en Dios confía que le libre ahora sí, si él quiere, perdón, lo repito de nuevo, si en Dios confía, que Dios lo ayude. ¿Se acuerdan de esta parte que estaban acá abajo estos soldados que decían y se burlaban? Si es cierto que fuera el Hijo de Dios, pues que él lo ayude, si me explico. Y es a lo que se refería el Salmo 22.7, o sea que los que estaban ahí se estaban burlando de él.
Y por último, bueno, en este Salmo 31 también, versículo 5 que dijo, en tu mano encomiendo mi espíritu, tú me has redimido, oh Señor, de verdad. Y en Lucas, Lucas lo escribe en el capítulo 23, versículo 46. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu, que fue el acto final de su vida terrenal. Fue orar las palabras de un salmo. Entonces con esto me quedo. Jesús es mi ejemplo y él mismo oró los salmos antes de su muerte.
Creo que ahora yo con este deseo que Dios pone en nosotros de orar y de buscarlo, pues quiero usar los salmos. Si hay otra parte de las Escrituras, como estábamos leyendo, Juan, si hay algo que también puedo agregar de Juan, uso Juan para orar. Pero creo que de ahora en adelante, después de haber aprendido esto, yo me quedo con esto. Siempre que quiera orar, voy a usar su Biblia. Y se los comparto que le decía ahorita a Yosa.
Siempre en mis noches, que es cuando yo ya tengo un poco más de tiempo, cuando ya mis hijos se duermen, lo que me gusta hacer para tomar descanso y mi tiempo es ponerme música. Entonces creo que ahí es como que empieza mi parte en donde mi intimidad con Dios. Me pongo música y adoro, yo creo que una, dos, tres canciones. Mientras está la música, también le platico y le digo, y lo adoro y le digo lo bueno que es.
Y ayer que estaba sentada, no sé por qué eran ya casi las 6 de la noche, no me acuerdo qué hora era, pero yo estaba sentada para leer mi Biblia y realmente me estaba quedando dormida. Y yo dije, a lo mejor es por la música, quité la música y yo realmente me estaba quedando dormida. Estaba demasiado cansada, ¿verdad? Pero aún así, también lo que podemos hacer es, aunque a lo mejor, bueno, no tengo 30 minutos para orar o ni siquiera puedo orar 30 minutos porque estoy demasiado cansada, agarro un versículo de mi Salmo del día o del Salmo que me haya tocado.
Un versículo nada más. Y al día siguiente empiezo a meditar en él. Esto creo que también lo comentamos el miércoles pasado. No hay más. Y con ese versículo que me quedé en la noche, al día siguiente medito y medito. También si estamos leyendo y si Dios nos habló a través de una sola palabra, medito en esa palabra.